8. 3. Estudio de la Cultura Antropología cultural Siglo XIX Objeto = Método adecuado Analizar las culturas
9. 3.1. Escuelas antropológicas Se preocupa por el sentido existencial que proporcionan las culturas Antropología simbólica Interés por elementos simbólicos Defiende el materialismo a la hora de estudiar la cultura Ecologismo cultural Interés por elementos materiales Interesa analizar las estructuras de la sociedad. Se inspira en la lingüística. Estructuralismo la sociedad La cultura es un todo global. Quiere comprender de esta manera cómo cada elemento social se relaciona con el resto. Funcionalismo Interés por la estructura de Es importante el desarrollo histórico de cada cultura, aunque estas no se pueden comparar. Difusionismo Compara diferentes culturas, lo que les lleva a ordenarlas en función de su desarrollo Evolucionismo Interés Histórico
El ser humano es un ser cultural, lo que lo diferencia del resto de seres vivos Ser cultural precisa vivir en sociedad, pero vivir en sociedad no lleva consigo ser cultural. En el caso de los seres humanos si, puesto que se establecen unas normas, unas costumbres, unas leyes, etc… que hacen a la sociedad, una sociedad cultural. Es falsa la oposición que se suele hacer entre biología y cultura. Lo biológico humano no se desarrolla sin los elementos externos (culturales) y por otra parte la cultura presupone siempre determinados procesos biológicos.
Cuando hablamos de cultura hablamos del conjunto de técnicas y recursos que nos ayudan a vivir; a las instituciones que organizan nuestra convivencia; a las ideas y creencias de los pueblos e individuos, a un alto grado de conocimiento alcanzado por algunos de los miembros de una comunidad; a un conjunto de actividades apreciadas por un grupo humano
Cultura es el sustantivo abstracto del verbo latín colere, que significa labrar un campo, hacerlo fértil, cult-ivarlo. De ahí los términos cultivo y agri-cultura. Esta expresión latina traducía el concepto griego de paideia (educación) y se refería a un ideal de humanidad que debeser alcanzado, para lo cual se necesita un “cultivo” personal
Dos formas de entender la cultura: El sentido etimológico de cultura agrupa dos acepciones fundamentales: formación personal e inserción en una comunidad. Cultura en sentido pedagógico: Un ideal humano que hay que alcanzar y se cifra en una serie de conocimientos Cultura en sentido etnográfico: La cultura es una forma de vida y de interpretar la naturaleza
Gracias a la cultura estamos en el mundo de una determinada manera y no nos conformamos con vivir sino que vivimos con sentido. Con la cultura habitamos los lugares, soñamos el tiempo y tenemos sentido. Habitar los lugares: Nuestra vida está condicionada por los paisajes y geografías, en los que nacemos y vivimos. Esa humanización y personalización del espacio es obra de la cultura. Soñar el tiempo. El ser humano no puede vivir sin recordar y sin proyectar. La vida humana es tiempo y tiempo con sentido. Tener sentido: Cada cultura ofrece un modo de vida a los individuos que participan de esa cultura. Esta constituye en la red de símbolos y expresiones con la que los humanos damos sentido al mundo. Comprender, una cultura es entender su forma de dar sentido a la realidad y sus lenguajes. Por eso, un mismo hecho puede tener un sentido u otro según la red simbólica de cada cultura. Esto es así porque las personas no viven entre “hechos” sino entre “sentidos”.
La ciencia de la cultura, la antropología cultural, nace como tal en el siglo XIX. Su objetivo es describir con un método adecuado y analizar las culturas tal y como se presentan.
Existen numerosos enfoques antropológicos.
La cultura, como hemos podido comprobar, es difícil de definir, por eso nuestros antropólogos se limitan a dar una serie de notas: La cultura es aprendida. Es lo que los antropólogos denominan “enculturación” La cultura es simbólica. Es una red de sentidos vitales La cultura somete a la naturaleza: Las necesidades biológicas las vivimos interpretadas por la cultura La cultura es general y específica. Es una capacidad que tienen todos los hombres, pero solo vivimos una cultura particular. La cultura lo abarca todo. Nada queda fuera de la cultura. Establece normas, reglas o patrones de comportamiento para todo tipo de actividades. La cultura es compartida. No es un atributo de los individuos aislados, sino de lso individuos formando un grupo. Por ello es difícil separar sociedad y cultura. La cultura es adaptante y mal adaptante. El hombre puede adaptarse a la naturaleza gracias a la cultura pero determinadas formas culturales pueden ser mal adaptantes, pues ponen en peligro la continuidad de la especie humana sobre la tierra (por ejemplo desarrollando una economía que hace peligrar los recursos naturales.
Los contenidos de la Cultura son: Las instituciones. Son los modelos de comportamientos. Dentro de esos modelos existen unos más suaves y otros más severos. Los folkways son costumbre, los mores, son “más” exigentes y las leyes. Las ideas incluyen conocimientos, creencias y valores. Los materiales. Mundo cultural físico Las técnicas. Formas de producir (Agricultura, arquitectura, etc…)
A los antropólogos que estudian una cultura les interesa adoptar un doble punto de vista para intentar dar cuenta tanto de la cultura real como de la ideal. El antropólogo intenta ponerse en la perspectiva del participante de esa cultura, es decir, intenta hacerse uno de ellos. A esto se le llama perspectiva emic. El segundo punto de vista de los antropólogos consiste en tomar distancia del grupo cultural y analizarlo desde fuera, como un observador ajeno al grupo. Es el punto de vista llamado etic.
Una subcultura está formada por un grupo social que posee y transmite una serie de patrones culturales que difieren de los de la cultura dominante. No hay que confundirlo con contracultura, que es aquella subcultura cuyas formas de sentir o actuar cuestionan deliberadamente la cultura dominante, o se oponen a ella. La cultura no nos determina, sino que nos condiciona. Nos da posibilidades. Para que la cultura siga viva debe ser asumida
A la hora de buscar el origen de la cultura nso surge un dilema. Fue antes el individuo o la cultura. Parece la respuesta lógica decir que el individuo, pero el individuo no se convierte en persona sino a través de la cultura, por tanto la necesita para ser persona.
Cuando en el siglo XIX nace la Antropología y el estudio de la cultura domina el positivismo: Interesan, sobre todo, los hechos. Por eso se define básicamente como un conjunto de costumbres, creencias, etc… transmitidas de generación en generación. Pero este tratamiento olvida el origen de la cultura y como nace. Esto será el objetivo de la filosofía: intentar elaborar una definición completa de cultura a partir de su origen. La corriente filosófica que mejor ha tratado este tema es la fenomenología, fundada por E. Husserl a comienzos del siglo XX. Para la fenomenología, la cultura es el modo como interpretamos la realidad, la valoramos y nos valoramos a nosotros mismos.
El mundo se nos presenta como algo irremediablemente plural. La pluralidad es la característica fundamental de nuestra sociedad.
Ante la diversidad cultural son posibles tres actitudes fundamentales: Actitud etnocentrista: Esta actitud contempla a las otras culturas desde la propia. El otro debe adaptarse a mi cultura si quiere convivir conmigo. Esta actitud puede conducir a la xenofobia (rechazo al extranjero, a lo extraño) y al racismo. Relativismo cultural. Según esta posición las culturas no pueden juzgarse desde fuera. Bajo la apariencia del respeto máximo, prefiere evitar el contacto. Ello evita el desarrollo, la comprensión y no evita el racismo. Hospitalidad cultural. Considera que es necesario el respeto, pero no excluye el diálogo. El encuentro intercultural requiere un esfuerzo de comunicación y de autoconocimiento
El Diálogo intercultural supone: Una toma de conciencia de nuestra propia tradición. - Un proceso de distanciamiento de las herencias culturales Un redescubrimiento novedoso de la propia tradición a través de los ojos de otra cultura Un encuentro en profundidad que descubre la humanidad común
Ortega estudia filosofía en Madrid, Berlín y Marburgo. Posteriormente da clases en Madrid hasta 1936. Gran conocedor de la historia de la filosofía El concepto fundamental de su filosofía es el de razón vital, el cual está íntimamente relacionada con la vida humana, con la historia y con la cultura. Para Ortega la cultura es una forma de discurso que da razón y sentido a las cosas. Se nos presenta como capacidad humana de diálogo con el mundo. Las Meditaciones del Quijote, su primer gran libro, es su gran aportación a la filosofía de la cultura. Empieza planteándose las cosas más nimias, las más cercanas, las que tenemos en nuestro derredor. Estas cosas son las que componen la cultura; son nuestras circunstancia. Y en ellas nos tenemos que centrar, para que no nos ocurra como a Don Quijote, que se olvidó de lo más próximo. El héroe es el que inventa y crea, y esa creación es la cultura. La cultura es, pues, el cultivo de lo inmediato, de lo cercano, es decir, de la vida
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