El documento resume la historia y expansión del idioma español. Explica que el español se originó en la Península Ibérica y fue difundido a América durante la colonización española a partir del siglo 15. Debido a la mezcla con lenguas indígenas, africanas y otras influencias, el español de América desarrolló rasgos propios como el seseo y el voseo. Actualmente, el español es hablado oficialmente por más de 20 países americanos y es la segunda lengua más habl
1. Taysha Bruno Ortiz Jueves 24 de Marzo de 2011.
El Español en América
El español es una lengua hablada alrededor del mundo de manera oficial y extraoficial
por millones de personas. Sin embargo, a pesar de que gran parte de estos hablantes se
encuentran en América, no fue en este continente que se originó el idioma, sino que fue
difundido por los españoles en la época colonial. Entonces, como premisa a la historia,
expansión y estado del actual español, presento la definición de este idioma según el
diccionario de la Real Academia Española: “Lengua neolatina nacida y oficial de España, común
de muchas naciones de América, hablada también como propia en otras partes del mundo”.
Al igual que muchos otros eventos de relevancia histórico-cultural, el origen del idioma
español no tiene una fecha ni lugar de origen específico, pero investigadores de diferentes
campos coinciden en que la cuna de la lengua española yace en la Península Ibérica (en la
actualidad, España y Portugal). Alrededor del año 1,000 antes de Cristo, durante la época
prerromana, en este territorio se hablaba una diversidad de lenguas primitivas que dieron paso
a la diversidad lingüístico-cultural que tuvo lugar en este periodo. Ya en la época romana, el
establecimiento del español tomó su curso definitivo con la implantación del latín vulgar (el
hablado popularmente) como lengua oficial por los romanos. Para principios del siglo V
después de Cristo, el dominio romano fue remplazado por el del pueblo visigodo, y abrió paso a
la época visigoda en la historia del español. Este pueblo dejó un sinnúmero de vocablos en la
lengua española, pero en comparación a otras épocas, la aportación lingüística visigoda fue
mínima. No fue hasta el año 711 que la invasión musulmana en la península ibérica tuvo lugar
con una duración de alrededor de 781 años en España. La sociedad árabe aportó enormemente
en diversos aspectos de la cultura española (y por consiguiente, en la de los países colonizados
por España), impactando el idioma español casi de igual manera en que lo hizo el latín. Siendo
el árabe el segundo elemento más importante de la lengua española, todavía se conservan
íntegros cientos de vocablos de este origen.
Sin duda alguna, esta ocupación musulmana en la península ibérica tuvo un enorme
2. efecto en la lengua española. Luego de casi ochocientos años, la fecha de 1492 dio lugar a dos
eventos trascendentales en la incursión y expansión del español en el Nuevo Mundo. El primero
fue la salida del imperio árabe del territorio español. Este evento tuvo un papel crucial en el
segundo acontecimiento: el viaje del navegante Cristóbal Colón hacia el Nuevo Mundo. La
llegada de Colón trajo consigo la conquista y colonización de territorios a través de todo el
continente; la esclavización y exterminio de los nativos de las regiones colonizadas; y la
introducción de la lengua española en el continente. Para lograr difundir efectivamente la
lengua española en los territorios recién colonizados, los españoles se valieron principalmente
de la religión, evangelizando con iglesias a través de todo el continente, y educando mediante
la construcción de escuelas en todo América. Sin embargo, más que imposición de una doctrina
cristiana, la forma en que verdaderamente el idioma español se consolidó definitivamente en
América fue mediante la convivencia entre nativos, esclavos africanos y españoles, y sobretodo,
mediante el mestizaje entre estos.
Esto le abrió paso al establecimiento del español de América, que consiste básicamente
en el conglomerado de variaciones lingüísticas en nuestro continente americano. Siendo así
como se expandió el idioma en el Nuevo Mundo, este desarrolló ciertos rasgos particulares
como argumenta José Luís Ramírez Luengo en la edición del 2007 de su libro Breve Historia del
Español de América diciendo “Entre los fenómenos que lo caracterizan, se encuentra el seseo, el
voseo, la supresión de la consonante d, la velarización, la rr velar y la aspiración de la s, y la
presencia de indigenismos”. Además de estos, entre los rasgos principales que caracterizan el
español de América se encuentra el andalucismo americano. Se le llamó así a la manifestación
fonética que tomó parte mayormente en las Antillas y en el Caribe: zona en la que se estableció
una gran ola de inmigrantes andaluces en los primeros años del periodo de colonización. A este
periodo situado entre la llegada española y el 1519, los historiadores le llaman el “periodo
antillano”, y es en él donde tuvieron lugar los rasgos y características que posteriormente le
fueron atribuidas al español de América en general. Otro rasgo del español americano opuesto
al español castellano es el español atlántico, el hablado por los inmigrantes canarios. Esta
incidencia muestra cómo al igual que en América había un sinnúmero de dialectos (sobre cien
de ellos) que influyeron en nuestro español, así mismo las olas migratorias españolas
3. impusieron sus propios rasgos y características que formaron el español de América.
Por consiguiente, es debido mencionar los países americanos que tienen la lengua
española como su idioma oficial; estos son: México, España, Colombia, Argentina, Perú,
Venezuela, Chile, Guatemala, Ecuador, Cuba, Bolivia, Republica Dominicana, Honduras, El
Salvador, Paraguay, Nicaragua, Costa Rica, Puerto Rico, Panamá, Uruguay, Guinea Ecuatorial,
Belice y Sahara Occidental. Las diferencias entre el español de cada uno de estos países varían
grandemente con sus antecedentes históricos. Por ejemplo, en países en los que en la
actualidad restan tribus indígenas como México y Venezuela, existe una mayor influencia y
presencia de estas lenguas en el español que se emplee en ese territorio. También cada país se
caracteriza del resto cuando se toma en consideración sus antecedentes migratorios; por
ejemplo, los países que fueron poblados por andaluces van a tener un español muy diferente al
de los países que fueron poblados por canarios o madrileños; este hecho es la base de las
variaciones en el español hablado en América. Algo que diferencia principalmente a Argentina
del resto de los países es el empleo del voseo, que en la mayor parte de los países hispanos es
inexistente. Otra diferencia entre países es el uso del diminutivo -ico que lo vemos mayormente
en Venezuela, Colombia, Cuba y Costa Rica, y es proveniente de diferentes zonas de España,
entre ella Andalucía. Estos son apenas algunos ejemplos con el propósito de ilustrar la manera
en la que el mismo idioma en un continente tiene diversidad de matices.
De igual manera, el español llegó a Puerto Rico mediante los procesos de colonización
española para finales del siglo XV; posteriormente, la isla fue arropada por una ola migratoria
de diferentes partes de España como Andalucía y las Islas Canarias, entre otras. En contraste a
otros países hispanoamericanos, en Puerto Rico la aportación de las lenguas autóctonas fue
mínima, ya que el exterminio taíno fue casi simultáneo a la llegada española. Es menester
resaltar que una gran influencia del español de Puerto Rico se debe a la entrada de esclavos
africanos a la isla. Ya para 1899, con la llegada de Estados Unidos a la isla como nuevo
colonizador, el español de la isla dio otro giro – uno con influencia anglosajona. Teniendo
presentes estos factores, se coincide en que las mayores influencias en el español en Puerto
Rico yacen en voces taínas, africanas y estadounidenses. Considerando la influencia migratoria
española que tuvo la isla, se puede comparar grandemente el español de Puerto Rico con otras
4. antillas y con países suramericanos como Venezuela, que tienen una influencia similar a la
nuestra.
De acuerdo con lo que afirmó la décimo sexta edición del libro Ethnologue publicada en
2009 y editada por M. Paul Lewis, “el español es el segundo idioma más empleado en el mundo,
contando con alrededor de trescientos veintinueve millones de hablantes”. Cifra que reafirma la
exitosa expansión del español a través de los siglos, no solo en América, sino también alrededor
del mundo y se tiene evidencia documentada de que esta cifra ha ido gradualmente
aumentando año tras año. Esta premisa abre paso a la expectativa de que más entidades
políticas y económicas alrededor del mundo adopten el español como su lengua oficial.
En fin, no resta sino que recapitular lo siguiente: el español es una lengua romance
original de España hablada alrededor del mundo cuyo producto actual tomó siglos formarse.
Esta lengua logró alcanzar nuestro continente mediante el proceso de colonización que
comenzó a finales del siglo XV, que trajo consigo una ola migratoria de españoles. Tras su
expansión en América desde ese siglo a la actualidad, el español ha atravesado una serie de
cambios que ante muchos eruditos son un tipo de “mutilación al idioma español”. Luego de mi
búsqueda pude concluir que las aportaciones lingüísticas que ha recibido esta lengua son
meramente el resultado natural de todo proceso de esta índole, y en el futuro continuará
acoplándose a su época y ambiente mediante la evolución de la lengua. No cualquier idioma
tiene la versatilidad que posee el español; esta característica le otorga una trascendencia sin
límites.