La ética cristiana se divide en personal y social. La ética cristiana personal se refiere al autoconocimiento y desarrollo de valores personales como la dignidad. La ética cristiana social implica valores como la solidaridad y justicia que guían las interacciones con la sociedad. Ambas éticas enseñan a ser respetuosos con los demás y contribuir al mejoramiento social a través de la ayuda a quien lo necesite.
3. Ética Cristiana personal Ética Cristiana social
COMPORTAMIENTO
APROPIADO DE LAS
PERSONAS COMO UN
TODO
4. LA ÉTICA CRISTIANA
PERSONAL
LA ÉTICA CRISTIANA
SOCIAL
Se refiere a la valoración de la persona en sí misma, es
decir, la auto valoración, al desarrollo de una conciencia
sobre la propia dignidad personal, y esto determina la
atención y desarrollo de ciertos valores.
Corresponde a los valores que nos formamos, aplicados en
la forma de relacionarnos con la sociedad en la que nos
desenvolvemos. Son de gran importancia en la sociedad ya
que estos son los que ayudan a tener un orden dentro de la
sociedad, debido a que la moral es la que nos impone una
serie de normas que guían nuestro comportamiento, las
cuales deben ser respetadas ante la sociedad.
Involucra aspectos como la costumbre, hábitos, modo de
ser y carácter; así como una serie de planteamientos como
son: ¿Quién soy?, ¿Quién me gustaría llegar a ser?, los
cuales serán de gran ayuda para proyectar nuestra vida y
ver qué es lo mejor para nosotros, involucrando factores
personales como los mencionados para así lograr ser
personas éticas y morales ante la sociedad.
5. LA ÉTICA CRISTIANA
PERSONAL
LA ÉTICA CRISTIANA
SOCIAL
La ética cristiana personal, frente a los demás seres
humanos, nos obliga a ser respetuosos, generosos, nobles,
considerados y justos; independientemente de la edad,
raza, sexo o posición social de los demás individuos,
conlleva el compromiso de prestar ayuda física o espiritual
a quien lo necesite; para de esta manera contribuir a ser
una mejor sociedad. Es decir cada persona debe ser
responsable de sus actos y contribuir al mejoramiento de la
sociedad en la que se desenvuelve.
Algunos ejemplos de la ética en el ámbito social son el
respeto a los otros: es la valoración base que se
reconoce el valor de cada persona; implica conocer y
reconocer las diferencias individuales.
La solidaridad responde: implica colaboración efectiva
de los miembros de la sociedad o grupo al que se
pertenece
La paz representa un valor permanente perseguido por
las sociedades humanas.
Compartir en comunidad: responde al ideal de la vocación
humana.
6. LA ÉTICA CRISTIANA
PERSONAL
LA ÉTICA CRISTIANA
SOCIAL
La ética cristiana pregunta qué nos enseña toda la Biblia
acerca de qué acciones, actitudes y rasgos de carácter
personal reciben la aprobación de Dios y cuáles no. Esto
significa que la ética cristiana nos enseña cómo vivir.
El objetivo es llevar una vida que glorifique a Dios
(«hacedlo todo para la gloria de Dios» 1 Cor 10:31).
Nos enseña que el pecado voluntario trae varias consecuencias
dañinas a nuestra vida diaria
Amar al prójimo como ti mismo significa reconocer en
los demás la misma dignidad que hay en tu propia vida;
es ofrecer al otro el mismo cuidado y consideración que
te das a ti mismo. Desde Levítico 19:17-18 este
mandamiento existía, solo que Jesús lo amplio.
Actitud de dialogo: implica el trascender los propios límites
para ensanchar el mundo has incluir el otro.
La justicia: es el valor ideal de la convivencia de los
hombres.