Este documento discute el papel del trabajador social en la promoción y protección de los derechos humanos en Colombia. Señala que el trabajador social debe usar sus habilidades y formación para defender los derechos humanos y responder a las necesidades de las personas vulnerables. También destaca que el trabajador social debe ser un actor activo que promueva iniciativas de cambio para lograr la igualdad, justicia y respeto de los derechos mediante el uso de las herramientas provistas por el estado. Además, enfatiza la importancia de que el trabaj
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DESDE LOS DERECHOS HUMANOS
Teniendo en cuenta cada uno de los aspectos que se tratan dentro de la Legislación
de Derechos humanos y el Derecho internacional humanitario en Colombia, y siendo
este a su vez un tema que se integra dentro del área de intervención del trabajador
social, es el profesional de dicha disciplina, quien debe, junto con su capacidad y
formación; ser partícipe de la promoción y protección de los derechos humanos,
es el mismo profesional quien debe estar bajo un actuar dado por las diferentes
necesidades y contextos que le proporcione o le exija el entorno; dando al conocer
la genuina realidad, que cada persona tienen que vivir al encontrarse en una
situación en la que su integridad y bienestar social, se encuentren vulnerados.
Es en el área de derechos humanos, donde el trabajador social, debe ser un ente
activo, que promueva mediante las herramientas que le proporciona el mismo
estado, nuevas iniciativas de cambio, que contribuyan, al respeto, la igualdad de
condiciones entre los habitantes del territorio, la construcción de un país justo y
humanitario, haciéndose pertinente reconocer, que este tipo de trabajo, no se da u
ejecuta, bajo la idea de soñar con un país justo, más que soñar, es poner en practica
lo que teórica y legalmente existe , ejemplo de esto es la misma legislación.
Conociendo el tipo de legislación que rige los derechos humanos en Colombia y
teniendo en cuenta, que es en el mismo territorio, donde se adelantan una serie
propuestas, programas y proyectos, que contribuyen a la elaboración de una nueva
política pública, política que acompañara el proceso de protección y respeto de los
derechos, que son inherentes desde el mismo momento en que se nace humano,
es en este tipo de situación donde se hace evidente los múltiples esfuerzos que
realizan los diferentes sectores dentro y fuera del país; evidenciando iniciativas
proporcionadas por los colectivos populares, hasta aportaciones que las mismas
organizaciones internacionales le dan al país , es estar dispuestos como
trabajadores sociales, a impulsar iniciativas de participación en los grupos y
sectores, que presentan mayor marginalidad a nivel social.
Es de tener en cuenta, que como profesionales y con la idea de querer materializar
un cambio, específicamente un trabajador social en el terreno colombiano; el hecho
de poner en marcha el mismo, hace necesario para el profesional, conocer las
diversas claves jurídicas y de orden, presentes en el territorio. Colombia en este
caso, cuenta con la legislación para guiar el proceso de intervención que se da bajo
el marco de derechos humanos, siendo esta un az bajo la manga, para que el mismo
profesional del trabajo social, sea capaz de reconocer a fondo la realidad social a la
que se está enfrentando, posibilitando la realización de proyectos transformadores
que estén ligados y sustentados dentro de lo institucional y lo legal, como bien se
presenta en cada una de las pautas que en la misma legislación se trata.
El trabajador social debe ser capaz de reconocer los derechos humanos como
principios generales que debe llevar a la práctica, ya que estos le van a permitir
2. trabajar sobre una realidad dada y no sobre algún supuesto ;es donde este contacto
con lo real, permite hacer de su papel profesional como trabajador social, alguien
que pretende, ir en busca de la equidad social, mediada por la declaración universal
de derechos, papel que se funda en la responsabilidad y el compromiso en su
acción, siendo capaz de proponer políticas que garanticen el bienestar y el buen
desarrollo de individuos, grupos o comunidades.
Es pensarse como trabajadores sociales, que posibles alternativas se pueden
crear, para la integración y conformación de instituciones y lugares, que garanticen
la focalización de las necesidades, que como individuos víctimas de la mitigación y
vulneración de sus derechos, tengan posibilidades de superar cada uno de los
obstáculos que le impiden llevar un adecuado desarrollo integral como persona,
contribuyendo así al respeto de los derechos humanos y al adecuado cumplimiento
del derecho internacional humanitario.