SlideShare una empresa de Scribd logo
1 de 4
Descargar para leer sin conexión
1
“YO NO CAMBIO”.-
Retiro congregacional, 05-07-2015.
La Florida, Santiago, Chile.
Pr. Mario.-
Mateo 24, 35 (RVR1960):
“... (35) El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán...”.
Todo a nuestro alrededor cambia, pero Jesucristo, sigue siendo el mismo. La gente, cambia de
ánimo, la familia cambia, todo; sin embargo, el único inmutable, es el Señor. Su palabra, es eterna.
Cuando transcurran 100 años más, sus palabras seguirán siendo las mismas. El Señor no ha
cambiado.
Debemos entender esta verdad. Arrepentirnos. Si el Señor no ha cambiado jamás -ni cambiara-
entonces ¿por qué nosotros cambiamos? ¿por qué nuestros estados anímicos cambian?. Muchas
veces, vivimos igual que un adolescente: voluble. Inestable. ¿Cuántas veces, nuestra vida en Cristo,
evidencia la misma inestabilidad? El Señor anhela que vivamos en una estabilidad espiritual,
emocional, intelectual, etc.
Si el Señor no cambia, nosotros no debemos cambiar, pues estamos llamados a vivir como el
Señor. Una vez que nosotros abrazamos el propósito eterno de Dios: “una familia de muchos hijos
semejantes a Jesús”, nos entregamos totalmente a ser semejantes a Jesús. No es una broma, no es
jocoso ni ligero, es verdad: nuestro único anhelo y proyecto de vida, es ser como Jesús. Por lo cual,
si queremos ser como Jesús, debemos analizar su vida, y su vida, siempre fue estable; nunca
estuvo expuesto a altibajos emocionales que impidieran que hiciera la voluntad de Dios. Por ende,
nuestra vida, debe ser igual: debemos ser personas estables.
Si el Señor no cambia, nosotros no podemos cambiar. Debemos ser gente de palabra; que nuestro
sí, sea sí, y nuestro no, sea no, pero no una permanente “montaña rusa”: un tiempo arriba, y otro
tiempo abajo. Debemos ser hijos de Dios, estables.
Los únicos niños que deben existir en la familia de Dios, son aquellos que recién se han convertido
a Jesús, pero alguien que lleva años escuchando las verdades de Cristo, y sigue viviendo en la
inestabilidad propia de un niño, lamentablemente, ya quedó como un “niño espiritual”.
Para tal efecto, es imperioso buscar al Señor. El que no busca al Señor, morirá, y cuando alguien
muere espiritualmente, a causa de una raquítica búsqueda del Señor, siempre comienza a culpar a
otro/as, pero nunca, así mismo.
Imaginemos por un segundo, el siguiente cuadro: un hombre ingresa al mar, comienza a nadar y,
luego de un rato, se ahoga. El motivo de su ahogo -y posterior muerte-, fue no obedecer a las
normas de seguridad que impedían que ingresara a distancias muy lejanas de la orilla del mar. Si
lográramos hablar con el fallecido del ejemplo mencionado, probablemente escucharíamos lo
siguiente:
2
- ¡Nadie corrió a salvarme!
-¡Los salvavidas tienen la culpa! ¡Si ellos hubiesen actuado rápido, nada de esto me hubiese
acontecido!
-¡La culpa de mi muerte la tiene la guardia marina: si hubiesen destinado algún helicóptero en aquel
momento, rondando por el sector, yo no hubiese muerto!
-¡Si la gente hubiese sido más solidaria conmigo, me hubiesen sacado de alguna forma!
Quizás, estas serían las respuestas del sujeto del ejemplo mencionado. Pero a este sujeto, sería
bueno formularle la siguiente pregunta: “... Bien, después de tus descargos, una pregunta; ¿Quién
te mandó a nadar tan lejos de la orilla?...”. Probablemente, el respondería: “... ¡Yo quise hacerlo!...”.
Muchas veces, tomamos decisiones por nuestra propia cuenta, sin consultar a Dios su anuncia, y
luego, en virtud de las consecuencias de nuestras propias decisiones, culpamos a otras personas u
otras situaciones, cuando los únicos culpables, somos nosotros.
En la iglesia del Señor, el que se muere espiritualmente, es porque no se alimenta de él: no asiste a
reuniones, no ora, no escudriña, no ayuna. No hay otro culpable, que aquel que deja de comer del
Señor por su propia cuenta. Hay personas que, aún no asistiendo a la congregación -por motivos
plausibles, como por ejemplo, una enfermedad que impide el movimiento- se encuentran llenos
del Espíritu Santo. Aquí, vale aclarar algunas cosas, pues si nosotros analizamos este último hecho
de manera ligera, perderemos el objetivo de lo que Dios nos quiere decir. En este último ejemplo,
cabe señalar que, primero; son personas que se ven imposibilitadas físicamente para poder asistir
a la reunión, por lo cual, no existiendo este “impedimento”, por supuesto estarían presentes en
todas las plenarias. Estas personas, no están llenas del Espíritu Santo por un azar “místico”, sino,
hay una búsqueda constante del Señor y, su permanencia en el hogar, no se debe a pereza y/o
comodidad, sino, a fuerza mayor. Por lo tanto, aquel que teniendo la posibilidad de asistir a la
congregación, no va, está pecando. Sí, no asistir a la reunión es un pecado cuando existen todas
las posibilidades de hacerlo, esto, lo corrobora la palabra del Señor en Santiago 4, 17 (NTV):
“... (17) Recuerden que es pecado saber lo que se debe hacer y luego no hacerlo...”.
El Señor es claro; ¿es bueno asistir a la reunión? Claro que sí, pues ahí oímos y vemos al Señor, por
lo tanto, según el pasaje que acabamos de leer, si no asistimos a la reunión -por mera pereza,
comodidad o por excusas vanas- sabiendo que es bueno delante del Señor, estamos pecando.
El asistir a la reunión, no es un acto proselitista, sino, es uno de los medios a través de los cuales,
Dios nos nutre de su verdad y, por supuesto, es la instancia en la que, como familia de Dios,
podemos entregar juntos al Señor lo que hay en nuestros corazones.
El discípulo que se alimenta del Señor, siempre tiene algo para entregar. El que se alimenta
permanentemente, tiene alabanza, lectura bíblica, vida, testimonio, etc. La vida de Dios en un
discípulo, se percibe y cuando no hay vida de Dios en un determinado sujeto, comienzan a surgir
las excusas: “... Es que en este lugar no se canta de tal manera...”, “... Es que el hermano me miró
mal...”, “... Es que hay mucho calor... “, “... Es que hay mucho frío...”, etc.
3
Nosotros, como discípulos, tenemos una responsabilidad ante Dios: buscar al Señor
constantemente. Nuestra responsabilidad, como hijos de Dios, es nutrirnos de las palabras del
Señor, que son eternas y son vida; debemos buscar al Señor y deleitarnos en estar junto con él.
A nosotros, como discípulos de Cristo, ¿debería afectarnos el entorno en el cual nos
desenvolvemos? Bajo ningún punto de vista. Si el Señor está en nosotros, ¿un ambiente
beligerante y hostil en todo sentido del quehacer humano, debería afectar nuestra forma de vivir?
Por ejemplo, si en nuestros trabajos todos fuman, beben alcohol, consumen drogas y llevan a cabo
un sin fin de perversiones, ¿eso nos da pie para que actuemos de la misma forma y adoptemos la
misma manera de vivir? Por supuesto que no, ¿verdad? Entonces, ¿por qué en una congregación en
donde algunas personas de nuestro entorno viven en frialdad espiritual, nos afecta también a
nosotros? Si estamos llenos del Señor, entonces, ni el ambiente más indiferente en el que nos
encontremos -incluso en medio de congregaciones- no nos debería afectar en lo más mínimo en
nuestra estabilidad con el Señor.
Si nosotros no aceptamos que -en el ejemplo antes mencionado- nuestra actitud se vea
modificada, entonces, no es aceptable que nuestra actitud como discípulos de Jesús cambie de
acuerdo a nuestro entorno. El único que puede afectar nuestra vida, es Cristo Jesús.
Si el Señor Jesús es nuestro fundamento, nada nos puede -ni podrá- cambiar. No hay ninguna otra
forma, por medio de la cual, un discípulo de Jesucristo pueda mantenerse estable en el Reino de
Dios. Imaginemos lo siguiente: un hombre tiene mucha hambre, pero no come. Aun cuando está
en su propia casa, con la alacena repleta de víveres y elementos para preparar comida, no come.
Producto de la falta de comida, comienzan a percibirse los estragos físicos que produce la
inanición. Nos encontramos con este sujeto y, obviamente, al ver su famélico estado, le
preguntamos: “... ¿Qué te pasa? ¿Por qué estás tan delgado? ¿Estás enfermo?...”, y él nos responde:
“... Es que no he comido nada en semanas y meses...”, entonces nosotros, ante tal afirmación le
preguntamos: “... Pero ¿Por qué? ¿Por qué no has comido nada durante tanto tiempo?. El sujeto
responde: “... Porque he estado solo en mi casa, sin mi esposa que me prepare algo para comer...”.
Entonces, lógicamente, lo emplazamos de la siguiente forma: “... Pero prepárate algo para comer
tú. Busca algunos víveres y elementos en tu cocina, y prepara algo para que comas y no mueras de
inanición...”. Por medio de este burdo ejemplo, describimos la vida espiritual de muchas personas:
sabiendo que deben someter al cuerpo a la oración, a la lectura de la palabra de Dios, al ayuno y la
comunión con los hermanos, no lo hacen y mueren espiritualmente, y cuando se les pregunta
porqué sucedió su muerte espiritual, responden lo mismo que el sujeto del ejemplo anterior: “... Es
que nadie me 'dio algo para comer'...”, siendo que el alimento -las palabras de vida eterna de Dios-
están al acceso de todo aquel que lo quiera.
Para mucha gente, su único alimento, es asistir a la reunión general el día domingo, y nada más. No
se han querido percatar; de a poco, están muriendo espiritualmente.
Producto de que muchas personas no se alimentan de la palabra de Dios, de oración, de búsqueda
constante del Señor, es que cuando llegan a la reunión el día domingo, y no se sienten edificados,
por lo tanto, se van tanto o más famélicos de lo que llegaron. Esto sucede a causa de que no han
entendido que, la reunión dominical -o reunión general- es el momento en que nuestro corazón
expresa todo lo que ha adquirido del Señor, durante la semana.
4
Una persona que no busca al Señor; que no ora, que no lee la escritura, que no ayuna, que no está
en sujeción, que no es examinado por parte de su coyuntura y/o pastor, está destinado a morir.
Que nada ni nadie nos afecte en nuestra vida devocional con Dios. Que no nos afecte el que, a
nuestro alrededor, hayan personas que no vibran con el nombre ni con la presencia de nuestro
Señor Jesucristo; que no nos afecte que, en medio nuestro, hayan personas que vivan en un
contante “invierno espiritual”, sin percatarse que, el Señor, tiene el poder para hacer florecer la
primavera de su presencia.
Permítanme realizar una comparación que no siempre es agradable; pero nosotros, deberíamos
ser igual que los roedores. Los roedores, son siempre menospreciados dentro del amplio espectro
animal, pero tienen una particularidad que no todos los animales poseen: los roedores no saben
caminar hacia atrás. El roedor no sabe retroceder, por eso, siempre busca la forma de ir hacia
adelante. Nosotros como discípulos de Cristo, nunca deberíamos retroceder, por nada ni por
nadie; si a nuestro alrededor no hay fervor por el Señor, nosotros, no asumamos la misma “marcha
atrás” dejándonos adormecer y perdiendo la sensibilidad al Señor, por el contrario, vayamos
siempre adelante, contra cualquier tipo de corriente, en donde esta se encuentre. No mi porta que
los demás no den fruto, esforcémonos nosotros, cada día, en dar fruto de vida.
¿Cómo podríamos vivir una vida cristiana sin Cristo? ¿Cómo poder vivir una “vida de discípulo” sin
oración, sin lectura de la biblia, sin ayuno, sin sujeción, sin escuchar al Señor, sin ser examinado ni
formado? Es imposible. Dentro de la grey del Señor, es cierto que pueden existir “apariencias” de
cristianos y/o discípulos, pero el Señor, que ve todo en lo íntimo, sabe cuando realmente hay una
vida de Reino de Dios y cuando no.
Todo esto se relaciona intrínsecamente con el encuentro que cada uno de nosotros hayamos
tenido con el Señor Jesucristo y su potente voz; todo aquel que, de verdad, ha escuchado la voz
del Señor Jesús, no puede volver atrás. La voz eterna de Dios es tan potente que, por ejemplo, al
apóstol Pablo no le permitió retroceder en ningún caso. Aun cuando el apóstol se enfrentó a las
más terribles circunstancias y personas, el encuentro con Jesús y su voz, provocó tal
determinación que nunca pensó, siquiera por un segundo, en retroceder.
El problema, justamente, está dentro de nosotros: si no hemos experimentado un encuentro
genuino con Cristo, entonces, jamás podremos vivir en una constante determinación.
El Señor nos instruye, en el modelo de oración (Lucas 11) a que pidamos “el pan nuestro de cada
día”, este pan, por supuesto, es Jesús: el pan vivo que descendió del cielo. Por lo tanto, cuando
alguien no pide este pan, es notorio; su espíritu muere de “inanición espiritual”, porque ha decidido
comer del pan que este mundo entrega y satisface la carne, en detrimento del alimento con el que
nuestro espíritu debe nutrirse diariamente.

Más contenido relacionado

La actualidad más candente

Vivir vida de victoria escuela ministerial i agosto 2014
Vivir vida de victoria escuela ministerial i agosto 2014Vivir vida de victoria escuela ministerial i agosto 2014
Vivir vida de victoria escuela ministerial i agosto 2014IBE Callao
 
Etapas de desarrollo en la vida del cristiano
Etapas de desarrollo en la vida del cristianoEtapas de desarrollo en la vida del cristiano
Etapas de desarrollo en la vida del cristianoIACYM Ayacucho
 
Inmadurez espiritual
Inmadurez espiritualInmadurez espiritual
Inmadurez espiritualVictor Deossa
 
Principio excelencia agosto 2017
Principio excelencia   agosto 2017Principio excelencia   agosto 2017
Principio excelencia agosto 2017jhonathanmaradey
 
Comunidad Encuentro__Una Vida Con Proposito Parte I
Comunidad Encuentro__Una Vida Con Proposito Parte IComunidad Encuentro__Una Vida Con Proposito Parte I
Comunidad Encuentro__Una Vida Con Proposito Parte Iclaudioq
 
Manual de matrimonios paz para mi hogar
Manual de matrimonios paz para mi hogarManual de matrimonios paz para mi hogar
Manual de matrimonios paz para mi hogarYosef Sanchez
 
Lo que tenemos que rechazar manual hogar enero 2016 ok
Lo que tenemos que rechazar manual hogar enero 2016 okLo que tenemos que rechazar manual hogar enero 2016 ok
Lo que tenemos que rechazar manual hogar enero 2016 okIBE Callao
 
Lecciones De La Vida Cristiana MóDulo 1 LeccióN 9
Lecciones De La Vida Cristiana MóDulo 1 LeccióN 9Lecciones De La Vida Cristiana MóDulo 1 LeccióN 9
Lecciones De La Vida Cristiana MóDulo 1 LeccióN 9guest27ccb92
 
Características de la Inmadurez Espiritual
Características de la Inmadurez EspiritualCaracterísticas de la Inmadurez Espiritual
Características de la Inmadurez EspiritualArgentina
 
Crecimiento espiritual
Crecimiento espiritualCrecimiento espiritual
Crecimiento espiritualJosue Gallegos
 
Rick Warren una vida con propósito
Rick Warren una vida con propósitoRick Warren una vida con propósito
Rick Warren una vida con propósitoTatiana Castañeda
 
Directions - Discipulado bíblico
Directions - Discipulado bíblicoDirections - Discipulado bíblico
Directions - Discipulado bíblicoHéctor Polo
 

La actualidad más candente (20)

Creciendo En Gracia
Creciendo En GraciaCreciendo En Gracia
Creciendo En Gracia
 
Vivir vida de victoria escuela ministerial i agosto 2014
Vivir vida de victoria escuela ministerial i agosto 2014Vivir vida de victoria escuela ministerial i agosto 2014
Vivir vida de victoria escuela ministerial i agosto 2014
 
Viviendo Libre en Cristo 4
Viviendo Libre en Cristo 4Viviendo Libre en Cristo 4
Viviendo Libre en Cristo 4
 
Etapas de desarrollo en la vida del cristiano
Etapas de desarrollo en la vida del cristianoEtapas de desarrollo en la vida del cristiano
Etapas de desarrollo en la vida del cristiano
 
Inmadurez espiritual
Inmadurez espiritualInmadurez espiritual
Inmadurez espiritual
 
Seamos una zarza que arde
Seamos una zarza que ardeSeamos una zarza que arde
Seamos una zarza que arde
 
Principio excelencia agosto 2017
Principio excelencia   agosto 2017Principio excelencia   agosto 2017
Principio excelencia agosto 2017
 
Viviendo Libre en Cristo 1
Viviendo Libre en Cristo 1Viviendo Libre en Cristo 1
Viviendo Libre en Cristo 1
 
Viviendo Libre en Cristo 2
Viviendo Libre en Cristo 2Viviendo Libre en Cristo 2
Viviendo Libre en Cristo 2
 
La disciplina de Dios ¿En que consistes?
La disciplina de Dios ¿En que consistes?La disciplina de Dios ¿En que consistes?
La disciplina de Dios ¿En que consistes?
 
Comunidad Encuentro__Una Vida Con Proposito Parte I
Comunidad Encuentro__Una Vida Con Proposito Parte IComunidad Encuentro__Una Vida Con Proposito Parte I
Comunidad Encuentro__Una Vida Con Proposito Parte I
 
Manual de matrimonios paz para mi hogar
Manual de matrimonios paz para mi hogarManual de matrimonios paz para mi hogar
Manual de matrimonios paz para mi hogar
 
Lo que tenemos que rechazar manual hogar enero 2016 ok
Lo que tenemos que rechazar manual hogar enero 2016 okLo que tenemos que rechazar manual hogar enero 2016 ok
Lo que tenemos que rechazar manual hogar enero 2016 ok
 
Lecciones De La Vida Cristiana MóDulo 1 LeccióN 9
Lecciones De La Vida Cristiana MóDulo 1 LeccióN 9Lecciones De La Vida Cristiana MóDulo 1 LeccióN 9
Lecciones De La Vida Cristiana MóDulo 1 LeccióN 9
 
Características de la Inmadurez Espiritual
Características de la Inmadurez EspiritualCaracterísticas de la Inmadurez Espiritual
Características de la Inmadurez Espiritual
 
Crecimiento espiritual
Crecimiento espiritualCrecimiento espiritual
Crecimiento espiritual
 
Rick Warren una vida con propósito
Rick Warren una vida con propósitoRick Warren una vida con propósito
Rick Warren una vida con propósito
 
Directions - Discipulado bíblico
Directions - Discipulado bíblicoDirections - Discipulado bíblico
Directions - Discipulado bíblico
 
DesarrolloII
DesarrolloIIDesarrolloII
DesarrolloII
 
Madurez Espiritual
Madurez Espiritual Madurez Espiritual
Madurez Espiritual
 

Similar a "Yo No Cambio".-

Santidad para todos: Para ser santos en la vida ordinaria - Puigbo Juan
Santidad para todos: Para ser santos en la vida ordinaria - Puigbo JuanSantidad para todos: Para ser santos en la vida ordinaria - Puigbo Juan
Santidad para todos: Para ser santos en la vida ordinaria - Puigbo JuanJasterRogue2
 
Charla 4. ejercicios espirituales 2013
Charla 4. ejercicios espirituales 2013Charla 4. ejercicios espirituales 2013
Charla 4. ejercicios espirituales 2013Francesc Vives
 
Volviendo a lo espiritual
Volviendo a lo espiritualVolviendo a lo espiritual
Volviendo a lo espiritualMarcelo Valdés
 
Predica agosto 11 de 2013 con activismo o con el corazon- isaias 58,8-14
Predica agosto 11 de 2013 con activismo o con el corazon- isaias 58,8-14Predica agosto 11 de 2013 con activismo o con el corazon- isaias 58,8-14
Predica agosto 11 de 2013 con activismo o con el corazon- isaias 58,8-14Iglesia Alianza Bogotá
 
Manual para testificar jhon macarthur
Manual para testificar jhon macarthurManual para testificar jhon macarthur
Manual para testificar jhon macarthurSana Doctrina
 
La vida-que-vence
La vida-que-venceLa vida-que-vence
La vida-que-vencekrlos777777
 
20 Domingo Ordinario - B
20 Domingo Ordinario - B20 Domingo Ordinario - B
20 Domingo Ordinario - BJoaquinIglesias
 
Padre John Mc Closkey - Santidad
Padre John Mc Closkey - SantidadPadre John Mc Closkey - Santidad
Padre John Mc Closkey - SantidadNicaragua-Catolica
 
El cristiano y su compromiso fervoroso con dios
El cristiano y su compromiso fervoroso con diosEl cristiano y su compromiso fervoroso con dios
El cristiano y su compromiso fervoroso con diosJosue Gallegos
 
Escrito esta. 2 co. no. 4:1-18
Escrito esta. 2 co. no. 4:1-18Escrito esta. 2 co. no. 4:1-18
Escrito esta. 2 co. no. 4:1-18jose montero
 
03.14. cosas espirituales nunca entenderá el mundo
03.14. cosas espirituales nunca entenderá el mundo03.14. cosas espirituales nunca entenderá el mundo
03.14. cosas espirituales nunca entenderá el mundoalfredo1g
 
Para Que Me Sirve Ser Cristiano
Para Que Me Sirve Ser CristianoPara Que Me Sirve Ser Cristiano
Para Que Me Sirve Ser Cristianoguest52307e
 
LOS MANDAMIENTOS DE LA LEY DE DIOS Y DE LA IGLESIA_PRIMERO.pdf
LOS MANDAMIENTOS DE LA LEY DE DIOS Y DE LA IGLESIA_PRIMERO.pdfLOS MANDAMIENTOS DE LA LEY DE DIOS Y DE LA IGLESIA_PRIMERO.pdf
LOS MANDAMIENTOS DE LA LEY DE DIOS Y DE LA IGLESIA_PRIMERO.pdfMarielaPozo3
 
Herramientas para discipulado escuela ministerial ii oct 2015
Herramientas para discipulado escuela ministerial ii oct 2015Herramientas para discipulado escuela ministerial ii oct 2015
Herramientas para discipulado escuela ministerial ii oct 2015IBE Callao
 

Similar a "Yo No Cambio".- (20)

Santidad para todos: Para ser santos en la vida ordinaria - Puigbo Juan
Santidad para todos: Para ser santos en la vida ordinaria - Puigbo JuanSantidad para todos: Para ser santos en la vida ordinaria - Puigbo Juan
Santidad para todos: Para ser santos en la vida ordinaria - Puigbo Juan
 
Charla 4. ejercicios espirituales 2013
Charla 4. ejercicios espirituales 2013Charla 4. ejercicios espirituales 2013
Charla 4. ejercicios espirituales 2013
 
Volviendo a lo espiritual
Volviendo a lo espiritualVolviendo a lo espiritual
Volviendo a lo espiritual
 
Cómo vivimos el primer mandamiento
Cómo vivimos el primer mandamientoCómo vivimos el primer mandamiento
Cómo vivimos el primer mandamiento
 
Predica agosto 11 de 2013 con activismo o con el corazon- isaias 58,8-14
Predica agosto 11 de 2013 con activismo o con el corazon- isaias 58,8-14Predica agosto 11 de 2013 con activismo o con el corazon- isaias 58,8-14
Predica agosto 11 de 2013 con activismo o con el corazon- isaias 58,8-14
 
La obediencia
La obedienciaLa obediencia
La obediencia
 
Manual para testificar jhon macarthur
Manual para testificar jhon macarthurManual para testificar jhon macarthur
Manual para testificar jhon macarthur
 
VERDADERA CONSAGRACION A.docx
VERDADERA CONSAGRACION A.docxVERDADERA CONSAGRACION A.docx
VERDADERA CONSAGRACION A.docx
 
La vida-que-vence
La vida-que-venceLa vida-que-vence
La vida-que-vence
 
20 Domingo Ordinario - B
20 Domingo Ordinario - B20 Domingo Ordinario - B
20 Domingo Ordinario - B
 
Padre John Mc Closkey - Santidad
Padre John Mc Closkey - SantidadPadre John Mc Closkey - Santidad
Padre John Mc Closkey - Santidad
 
El cristiano y su compromiso fervoroso con dios
El cristiano y su compromiso fervoroso con diosEl cristiano y su compromiso fervoroso con dios
El cristiano y su compromiso fervoroso con dios
 
Escrito esta. 2 co. no. 4:1-18
Escrito esta. 2 co. no. 4:1-18Escrito esta. 2 co. no. 4:1-18
Escrito esta. 2 co. no. 4:1-18
 
pastor
pastorpastor
pastor
 
La ignorancia de las cosas de Dios Oseas 4:6
La ignorancia de las cosas de Dios Oseas 4:6La ignorancia de las cosas de Dios Oseas 4:6
La ignorancia de las cosas de Dios Oseas 4:6
 
Alunoespanholv3baixa 130131135246-phpapp02
Alunoespanholv3baixa 130131135246-phpapp02Alunoespanholv3baixa 130131135246-phpapp02
Alunoespanholv3baixa 130131135246-phpapp02
 
03.14. cosas espirituales nunca entenderá el mundo
03.14. cosas espirituales nunca entenderá el mundo03.14. cosas espirituales nunca entenderá el mundo
03.14. cosas espirituales nunca entenderá el mundo
 
Para Que Me Sirve Ser Cristiano
Para Que Me Sirve Ser CristianoPara Que Me Sirve Ser Cristiano
Para Que Me Sirve Ser Cristiano
 
LOS MANDAMIENTOS DE LA LEY DE DIOS Y DE LA IGLESIA_PRIMERO.pdf
LOS MANDAMIENTOS DE LA LEY DE DIOS Y DE LA IGLESIA_PRIMERO.pdfLOS MANDAMIENTOS DE LA LEY DE DIOS Y DE LA IGLESIA_PRIMERO.pdf
LOS MANDAMIENTOS DE LA LEY DE DIOS Y DE LA IGLESIA_PRIMERO.pdf
 
Herramientas para discipulado escuela ministerial ii oct 2015
Herramientas para discipulado escuela ministerial ii oct 2015Herramientas para discipulado escuela ministerial ii oct 2015
Herramientas para discipulado escuela ministerial ii oct 2015
 

Más de Comunidad Cristiana La Florida (10)

¿Carne o Espíritu?
¿Carne o Espíritu?¿Carne o Espíritu?
¿Carne o Espíritu?
 
Viviendo a cristo en lo natural de la carne o en lo sobrenatural del espiritu...
Viviendo a cristo en lo natural de la carne o en lo sobrenatural del espiritu...Viviendo a cristo en lo natural de la carne o en lo sobrenatural del espiritu...
Viviendo a cristo en lo natural de la carne o en lo sobrenatural del espiritu...
 
Viviendo a cristo en lo natural de la carne o en lo sobrenatural del espiritu...
Viviendo a cristo en lo natural de la carne o en lo sobrenatural del espiritu...Viviendo a cristo en lo natural de la carne o en lo sobrenatural del espiritu...
Viviendo a cristo en lo natural de la carne o en lo sobrenatural del espiritu...
 
Reflexiones Proposito Eterno De Dios
Reflexiones Proposito Eterno De DiosReflexiones Proposito Eterno De Dios
Reflexiones Proposito Eterno De Dios
 
Reflexiones del reino de Dios
Reflexiones del reino de DiosReflexiones del reino de Dios
Reflexiones del reino de Dios
 
Reflexión Evangelistica.-
Reflexión Evangelistica.-Reflexión Evangelistica.-
Reflexión Evangelistica.-
 
"Muerte Blanca".
"Muerte Blanca"."Muerte Blanca".
"Muerte Blanca".
 
Mensaje A Los Matrimonios: Comunicación Eficiente (II).
Mensaje A Los Matrimonios: Comunicación Eficiente (II).Mensaje A Los Matrimonios: Comunicación Eficiente (II).
Mensaje A Los Matrimonios: Comunicación Eficiente (II).
 
Reino de Dios: Hombres De Obediencia.-
Reino de Dios: Hombres De Obediencia.-Reino de Dios: Hombres De Obediencia.-
Reino de Dios: Hombres De Obediencia.-
 
Nueva Versión Internacional.-
Nueva Versión Internacional.-Nueva Versión Internacional.-
Nueva Versión Internacional.-
 

Último

LA PARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pptx
LA PARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pptxLA PARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pptx
LA PARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pptxAntonio Miguel Salas Sierra
 
LA POBREZA EN EL PERU - FRANCISCO VERDERA V
LA POBREZA EN EL PERU - FRANCISCO VERDERA VLA POBREZA EN EL PERU - FRANCISCO VERDERA V
LA POBREZA EN EL PERU - FRANCISCO VERDERA Vczspz8nwfx
 
la Eucaristia es una Fiesta-Explicación para niños
la Eucaristia es una Fiesta-Explicación para niñosla Eucaristia es una Fiesta-Explicación para niños
la Eucaristia es una Fiesta-Explicación para niñosGemmaMRabiFrigerio
 
HIMNO CRISTIANO TIERRA DE LA PALESTINA.pptx
HIMNO CRISTIANO TIERRA DE LA PALESTINA.pptxHIMNO CRISTIANO TIERRA DE LA PALESTINA.pptx
HIMNO CRISTIANO TIERRA DE LA PALESTINA.pptxPalitoBlanco1
 
Proverbios 8: La sabiduría viva de YHWH.
Proverbios 8: La sabiduría viva de YHWH.Proverbios 8: La sabiduría viva de YHWH.
Proverbios 8: La sabiduría viva de YHWH.yhostend
 
"Lo que tú quieras", biografía ilustrada de Montse Grases.
"Lo que tú quieras", biografía ilustrada de Montse Grases."Lo que tú quieras", biografía ilustrada de Montse Grases.
"Lo que tú quieras", biografía ilustrada de Montse Grases.Opus Dei
 
El Modelo del verdadero Compromiso..pptx
El Modelo del verdadero Compromiso..pptxEl Modelo del verdadero Compromiso..pptx
El Modelo del verdadero Compromiso..pptxjenune
 
CRECIMIENTO ESPIRITUAL PARA EL CREYENTE 1.pptx
CRECIMIENTO ESPIRITUAL PARA EL CREYENTE 1.pptxCRECIMIENTO ESPIRITUAL PARA EL CREYENTE 1.pptx
CRECIMIENTO ESPIRITUAL PARA EL CREYENTE 1.pptxRicardoMoreno95679
 
PARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pdf
PARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pdfPARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pdf
PARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pdfAntonio Miguel Salas Sierra
 
EXAMENES PREGUNTAS CORTA...........................S.pdf
EXAMENES PREGUNTAS CORTA...........................S.pdfEXAMENES PREGUNTAS CORTA...........................S.pdf
EXAMENES PREGUNTAS CORTA...........................S.pdfinmalopezgranada
 

Último (12)

LA PARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pptx
LA PARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pptxLA PARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pptx
LA PARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pptx
 
LA POBREZA EN EL PERU - FRANCISCO VERDERA V
LA POBREZA EN EL PERU - FRANCISCO VERDERA VLA POBREZA EN EL PERU - FRANCISCO VERDERA V
LA POBREZA EN EL PERU - FRANCISCO VERDERA V
 
la Eucaristia es una Fiesta-Explicación para niños
la Eucaristia es una Fiesta-Explicación para niñosla Eucaristia es una Fiesta-Explicación para niños
la Eucaristia es una Fiesta-Explicación para niños
 
HIMNO CRISTIANO TIERRA DE LA PALESTINA.pptx
HIMNO CRISTIANO TIERRA DE LA PALESTINA.pptxHIMNO CRISTIANO TIERRA DE LA PALESTINA.pptx
HIMNO CRISTIANO TIERRA DE LA PALESTINA.pptx
 
Proverbios 8: La sabiduría viva de YHWH.
Proverbios 8: La sabiduría viva de YHWH.Proverbios 8: La sabiduría viva de YHWH.
Proverbios 8: La sabiduría viva de YHWH.
 
"Lo que tú quieras", biografía ilustrada de Montse Grases.
"Lo que tú quieras", biografía ilustrada de Montse Grases."Lo que tú quieras", biografía ilustrada de Montse Grases.
"Lo que tú quieras", biografía ilustrada de Montse Grases.
 
El Modelo del verdadero Compromiso..pptx
El Modelo del verdadero Compromiso..pptxEl Modelo del verdadero Compromiso..pptx
El Modelo del verdadero Compromiso..pptx
 
Santa Luisa de Marillac nos muestra: Los escollos a evitar
Santa Luisa de Marillac nos muestra: Los escollos a evitarSanta Luisa de Marillac nos muestra: Los escollos a evitar
Santa Luisa de Marillac nos muestra: Los escollos a evitar
 
CRECIMIENTO ESPIRITUAL PARA EL CREYENTE 1.pptx
CRECIMIENTO ESPIRITUAL PARA EL CREYENTE 1.pptxCRECIMIENTO ESPIRITUAL PARA EL CREYENTE 1.pptx
CRECIMIENTO ESPIRITUAL PARA EL CREYENTE 1.pptx
 
La oración de santa Luisa de Marillac por el P. Corpus Juan Delgado CM
La oración de santa Luisa de Marillac por el P. Corpus Juan Delgado CMLa oración de santa Luisa de Marillac por el P. Corpus Juan Delgado CM
La oración de santa Luisa de Marillac por el P. Corpus Juan Delgado CM
 
PARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pdf
PARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pdfPARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pdf
PARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pdf
 
EXAMENES PREGUNTAS CORTA...........................S.pdf
EXAMENES PREGUNTAS CORTA...........................S.pdfEXAMENES PREGUNTAS CORTA...........................S.pdf
EXAMENES PREGUNTAS CORTA...........................S.pdf
 

"Yo No Cambio".-

  • 1. 1 “YO NO CAMBIO”.- Retiro congregacional, 05-07-2015. La Florida, Santiago, Chile. Pr. Mario.- Mateo 24, 35 (RVR1960): “... (35) El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán...”. Todo a nuestro alrededor cambia, pero Jesucristo, sigue siendo el mismo. La gente, cambia de ánimo, la familia cambia, todo; sin embargo, el único inmutable, es el Señor. Su palabra, es eterna. Cuando transcurran 100 años más, sus palabras seguirán siendo las mismas. El Señor no ha cambiado. Debemos entender esta verdad. Arrepentirnos. Si el Señor no ha cambiado jamás -ni cambiara- entonces ¿por qué nosotros cambiamos? ¿por qué nuestros estados anímicos cambian?. Muchas veces, vivimos igual que un adolescente: voluble. Inestable. ¿Cuántas veces, nuestra vida en Cristo, evidencia la misma inestabilidad? El Señor anhela que vivamos en una estabilidad espiritual, emocional, intelectual, etc. Si el Señor no cambia, nosotros no debemos cambiar, pues estamos llamados a vivir como el Señor. Una vez que nosotros abrazamos el propósito eterno de Dios: “una familia de muchos hijos semejantes a Jesús”, nos entregamos totalmente a ser semejantes a Jesús. No es una broma, no es jocoso ni ligero, es verdad: nuestro único anhelo y proyecto de vida, es ser como Jesús. Por lo cual, si queremos ser como Jesús, debemos analizar su vida, y su vida, siempre fue estable; nunca estuvo expuesto a altibajos emocionales que impidieran que hiciera la voluntad de Dios. Por ende, nuestra vida, debe ser igual: debemos ser personas estables. Si el Señor no cambia, nosotros no podemos cambiar. Debemos ser gente de palabra; que nuestro sí, sea sí, y nuestro no, sea no, pero no una permanente “montaña rusa”: un tiempo arriba, y otro tiempo abajo. Debemos ser hijos de Dios, estables. Los únicos niños que deben existir en la familia de Dios, son aquellos que recién se han convertido a Jesús, pero alguien que lleva años escuchando las verdades de Cristo, y sigue viviendo en la inestabilidad propia de un niño, lamentablemente, ya quedó como un “niño espiritual”. Para tal efecto, es imperioso buscar al Señor. El que no busca al Señor, morirá, y cuando alguien muere espiritualmente, a causa de una raquítica búsqueda del Señor, siempre comienza a culpar a otro/as, pero nunca, así mismo. Imaginemos por un segundo, el siguiente cuadro: un hombre ingresa al mar, comienza a nadar y, luego de un rato, se ahoga. El motivo de su ahogo -y posterior muerte-, fue no obedecer a las normas de seguridad que impedían que ingresara a distancias muy lejanas de la orilla del mar. Si lográramos hablar con el fallecido del ejemplo mencionado, probablemente escucharíamos lo siguiente:
  • 2. 2 - ¡Nadie corrió a salvarme! -¡Los salvavidas tienen la culpa! ¡Si ellos hubiesen actuado rápido, nada de esto me hubiese acontecido! -¡La culpa de mi muerte la tiene la guardia marina: si hubiesen destinado algún helicóptero en aquel momento, rondando por el sector, yo no hubiese muerto! -¡Si la gente hubiese sido más solidaria conmigo, me hubiesen sacado de alguna forma! Quizás, estas serían las respuestas del sujeto del ejemplo mencionado. Pero a este sujeto, sería bueno formularle la siguiente pregunta: “... Bien, después de tus descargos, una pregunta; ¿Quién te mandó a nadar tan lejos de la orilla?...”. Probablemente, el respondería: “... ¡Yo quise hacerlo!...”. Muchas veces, tomamos decisiones por nuestra propia cuenta, sin consultar a Dios su anuncia, y luego, en virtud de las consecuencias de nuestras propias decisiones, culpamos a otras personas u otras situaciones, cuando los únicos culpables, somos nosotros. En la iglesia del Señor, el que se muere espiritualmente, es porque no se alimenta de él: no asiste a reuniones, no ora, no escudriña, no ayuna. No hay otro culpable, que aquel que deja de comer del Señor por su propia cuenta. Hay personas que, aún no asistiendo a la congregación -por motivos plausibles, como por ejemplo, una enfermedad que impide el movimiento- se encuentran llenos del Espíritu Santo. Aquí, vale aclarar algunas cosas, pues si nosotros analizamos este último hecho de manera ligera, perderemos el objetivo de lo que Dios nos quiere decir. En este último ejemplo, cabe señalar que, primero; son personas que se ven imposibilitadas físicamente para poder asistir a la reunión, por lo cual, no existiendo este “impedimento”, por supuesto estarían presentes en todas las plenarias. Estas personas, no están llenas del Espíritu Santo por un azar “místico”, sino, hay una búsqueda constante del Señor y, su permanencia en el hogar, no se debe a pereza y/o comodidad, sino, a fuerza mayor. Por lo tanto, aquel que teniendo la posibilidad de asistir a la congregación, no va, está pecando. Sí, no asistir a la reunión es un pecado cuando existen todas las posibilidades de hacerlo, esto, lo corrobora la palabra del Señor en Santiago 4, 17 (NTV): “... (17) Recuerden que es pecado saber lo que se debe hacer y luego no hacerlo...”. El Señor es claro; ¿es bueno asistir a la reunión? Claro que sí, pues ahí oímos y vemos al Señor, por lo tanto, según el pasaje que acabamos de leer, si no asistimos a la reunión -por mera pereza, comodidad o por excusas vanas- sabiendo que es bueno delante del Señor, estamos pecando. El asistir a la reunión, no es un acto proselitista, sino, es uno de los medios a través de los cuales, Dios nos nutre de su verdad y, por supuesto, es la instancia en la que, como familia de Dios, podemos entregar juntos al Señor lo que hay en nuestros corazones. El discípulo que se alimenta del Señor, siempre tiene algo para entregar. El que se alimenta permanentemente, tiene alabanza, lectura bíblica, vida, testimonio, etc. La vida de Dios en un discípulo, se percibe y cuando no hay vida de Dios en un determinado sujeto, comienzan a surgir las excusas: “... Es que en este lugar no se canta de tal manera...”, “... Es que el hermano me miró mal...”, “... Es que hay mucho calor... “, “... Es que hay mucho frío...”, etc.
  • 3. 3 Nosotros, como discípulos, tenemos una responsabilidad ante Dios: buscar al Señor constantemente. Nuestra responsabilidad, como hijos de Dios, es nutrirnos de las palabras del Señor, que son eternas y son vida; debemos buscar al Señor y deleitarnos en estar junto con él. A nosotros, como discípulos de Cristo, ¿debería afectarnos el entorno en el cual nos desenvolvemos? Bajo ningún punto de vista. Si el Señor está en nosotros, ¿un ambiente beligerante y hostil en todo sentido del quehacer humano, debería afectar nuestra forma de vivir? Por ejemplo, si en nuestros trabajos todos fuman, beben alcohol, consumen drogas y llevan a cabo un sin fin de perversiones, ¿eso nos da pie para que actuemos de la misma forma y adoptemos la misma manera de vivir? Por supuesto que no, ¿verdad? Entonces, ¿por qué en una congregación en donde algunas personas de nuestro entorno viven en frialdad espiritual, nos afecta también a nosotros? Si estamos llenos del Señor, entonces, ni el ambiente más indiferente en el que nos encontremos -incluso en medio de congregaciones- no nos debería afectar en lo más mínimo en nuestra estabilidad con el Señor. Si nosotros no aceptamos que -en el ejemplo antes mencionado- nuestra actitud se vea modificada, entonces, no es aceptable que nuestra actitud como discípulos de Jesús cambie de acuerdo a nuestro entorno. El único que puede afectar nuestra vida, es Cristo Jesús. Si el Señor Jesús es nuestro fundamento, nada nos puede -ni podrá- cambiar. No hay ninguna otra forma, por medio de la cual, un discípulo de Jesucristo pueda mantenerse estable en el Reino de Dios. Imaginemos lo siguiente: un hombre tiene mucha hambre, pero no come. Aun cuando está en su propia casa, con la alacena repleta de víveres y elementos para preparar comida, no come. Producto de la falta de comida, comienzan a percibirse los estragos físicos que produce la inanición. Nos encontramos con este sujeto y, obviamente, al ver su famélico estado, le preguntamos: “... ¿Qué te pasa? ¿Por qué estás tan delgado? ¿Estás enfermo?...”, y él nos responde: “... Es que no he comido nada en semanas y meses...”, entonces nosotros, ante tal afirmación le preguntamos: “... Pero ¿Por qué? ¿Por qué no has comido nada durante tanto tiempo?. El sujeto responde: “... Porque he estado solo en mi casa, sin mi esposa que me prepare algo para comer...”. Entonces, lógicamente, lo emplazamos de la siguiente forma: “... Pero prepárate algo para comer tú. Busca algunos víveres y elementos en tu cocina, y prepara algo para que comas y no mueras de inanición...”. Por medio de este burdo ejemplo, describimos la vida espiritual de muchas personas: sabiendo que deben someter al cuerpo a la oración, a la lectura de la palabra de Dios, al ayuno y la comunión con los hermanos, no lo hacen y mueren espiritualmente, y cuando se les pregunta porqué sucedió su muerte espiritual, responden lo mismo que el sujeto del ejemplo anterior: “... Es que nadie me 'dio algo para comer'...”, siendo que el alimento -las palabras de vida eterna de Dios- están al acceso de todo aquel que lo quiera. Para mucha gente, su único alimento, es asistir a la reunión general el día domingo, y nada más. No se han querido percatar; de a poco, están muriendo espiritualmente. Producto de que muchas personas no se alimentan de la palabra de Dios, de oración, de búsqueda constante del Señor, es que cuando llegan a la reunión el día domingo, y no se sienten edificados, por lo tanto, se van tanto o más famélicos de lo que llegaron. Esto sucede a causa de que no han entendido que, la reunión dominical -o reunión general- es el momento en que nuestro corazón expresa todo lo que ha adquirido del Señor, durante la semana.
  • 4. 4 Una persona que no busca al Señor; que no ora, que no lee la escritura, que no ayuna, que no está en sujeción, que no es examinado por parte de su coyuntura y/o pastor, está destinado a morir. Que nada ni nadie nos afecte en nuestra vida devocional con Dios. Que no nos afecte el que, a nuestro alrededor, hayan personas que no vibran con el nombre ni con la presencia de nuestro Señor Jesucristo; que no nos afecte que, en medio nuestro, hayan personas que vivan en un contante “invierno espiritual”, sin percatarse que, el Señor, tiene el poder para hacer florecer la primavera de su presencia. Permítanme realizar una comparación que no siempre es agradable; pero nosotros, deberíamos ser igual que los roedores. Los roedores, son siempre menospreciados dentro del amplio espectro animal, pero tienen una particularidad que no todos los animales poseen: los roedores no saben caminar hacia atrás. El roedor no sabe retroceder, por eso, siempre busca la forma de ir hacia adelante. Nosotros como discípulos de Cristo, nunca deberíamos retroceder, por nada ni por nadie; si a nuestro alrededor no hay fervor por el Señor, nosotros, no asumamos la misma “marcha atrás” dejándonos adormecer y perdiendo la sensibilidad al Señor, por el contrario, vayamos siempre adelante, contra cualquier tipo de corriente, en donde esta se encuentre. No mi porta que los demás no den fruto, esforcémonos nosotros, cada día, en dar fruto de vida. ¿Cómo podríamos vivir una vida cristiana sin Cristo? ¿Cómo poder vivir una “vida de discípulo” sin oración, sin lectura de la biblia, sin ayuno, sin sujeción, sin escuchar al Señor, sin ser examinado ni formado? Es imposible. Dentro de la grey del Señor, es cierto que pueden existir “apariencias” de cristianos y/o discípulos, pero el Señor, que ve todo en lo íntimo, sabe cuando realmente hay una vida de Reino de Dios y cuando no. Todo esto se relaciona intrínsecamente con el encuentro que cada uno de nosotros hayamos tenido con el Señor Jesucristo y su potente voz; todo aquel que, de verdad, ha escuchado la voz del Señor Jesús, no puede volver atrás. La voz eterna de Dios es tan potente que, por ejemplo, al apóstol Pablo no le permitió retroceder en ningún caso. Aun cuando el apóstol se enfrentó a las más terribles circunstancias y personas, el encuentro con Jesús y su voz, provocó tal determinación que nunca pensó, siquiera por un segundo, en retroceder. El problema, justamente, está dentro de nosotros: si no hemos experimentado un encuentro genuino con Cristo, entonces, jamás podremos vivir en una constante determinación. El Señor nos instruye, en el modelo de oración (Lucas 11) a que pidamos “el pan nuestro de cada día”, este pan, por supuesto, es Jesús: el pan vivo que descendió del cielo. Por lo tanto, cuando alguien no pide este pan, es notorio; su espíritu muere de “inanición espiritual”, porque ha decidido comer del pan que este mundo entrega y satisface la carne, en detrimento del alimento con el que nuestro espíritu debe nutrirse diariamente.