1. Semana Santa
El domingo de Ramos eras aclamado en Jerusalén.
El jueves te recordaré en el cenáculo, dándote como comida, y
teniendo presente tu mandamiento: “amaos los unos a los otros
como yo os he amado”.
El viernes recorreré el camino del calvario, para llegar al Gólgota
y estar contigo al pie de tu cruz.
Así llegaré al domingo, la Pascua del Señor, el paso de la muerte a la
vida la victoria de Dios.
Estamos, Señor Jesús, en la recta final de tu vida, que sintetiza toda
tu existencia.
Gracias, Señor, Jesús. Gracias por tu vida y por tu muerte y sobre
todo gracias por tu resurrección.
Ayúdanos a vivir tu pasión como nuestra pasión para participar de tu
resurrección.
Evangelio
5-abril-2015
1º-Pascua-B
2. PASCUA: Cristo VIVE hoy...
¡Pasa la LUZ del RESUCITADO!
1. VER: Luces y oscuridades
-Estos días hemos sufrido por la muerte de tantos inocentes en Francia.
La noticia nos ha llenado de oscuridad y tristeza. Hay otros
acontecimientos que iluminan nuestra vida, nos animan.
-A lo largo de esta Semana Santa vamos participando en las procesiones y
oficios. Los pasos y escenas de Jesús nos conmueven y hacen pensar.
-Empezamos el tiempo de Pascua. La Pascua es la vida que viene de Dios.
Cristo ha cargado con el peso de la cruz y Dios le resucita trayéndonos
un rayo de luz, de esperanza de vida en medio del sufrimiento.
¿Cómo participáis en los oficios de Semana Santa?
¿Qué hacéis? ¿Qué es la Pascua?
2. JUZGAR: ¡Él VIVE: cree, alégrate, sé testigo!
+En el evangelio de hoy, Jesús nos cuenta lo que sucedió aquel
domingo trás la muerte de Jesús: María Magdalena descubrió el
sepulcro vacío. Lo mismo le sucedió a Pedro y a Juan que vieron
sólo las vendas por el suelo. Y este es el testimonio de cada uno
de ellos: “vió y creyó”.
¿QUÉ NOS QUIERE DECIR? Que Cristo no está muerto, vive hoy.
+CREE: -María Magdalena pasa de la oscuridad a la luz de la fe al
encontrarse con Jesús. Pedro y Juan son de los que ven y creen.
La pascua es tiempo de fe fuerte, profunda, enraizada en Cristo
que ha resucitado. Hay que aprender a ver con los ojos de la fe.
+ALÉGRATE: -Aleluya es nuestro saludo, es decir, alegría, hurra,
bien…. La razón de la alegría es que Jesús ha resucitado y su vida
no se acabó con su muerte… No seguimos a un muerto sino a un
vivo, que va con nosotros… Al final nos espera otra vida
resucitada…. Por tanto en la vida, con El, todo acaba bien…
+SÉ SU TESTIGO: María Magdalena, Pedro y Juan, que no paran
hasta anunciar la buena noticia a los otros apóstoles, ellos son
testigos de la resurrección de Jesús. Los relatos de las apariciones
no son más que testimonios, inconexos en los detalles, de lo que
representó, para los primeros testigos de la fe, esta experiencia de
encuentro con El…. Sé testigo de Jesús de que Cristo que vive hoy.
¿Qué me está pidiendo el evangelio de hoy?
3. ACTUAR: ¡Pasa la luz, prende la llama!
-La pascua es un buen tiempo para ser testigos de Jesús: prende la
llama, pasa la luz de la fe, que se nos vea seguidores convencidos,
alegres, solidarios… Se necesitan más testigos que maestros…
¿Qué vamos hacer?
Hechos 10, 34 a.37-43: Hemos comido y bebido con él después de la
resurrección.
En aquellos días, Pedro tomó la palabra y dijo: «Conocéis lo
que sucedió en el país de los judíos, cuando Juan predicaba
el bautismo, aunque la cosa empezó en Galilea. Me refiero a
Jesús de Nazaret, ungido por Dios con la fuerza del Espíritu
Santo, que pasó haciendo el bien y curando a los oprimidos
por el diablo, porque Dios estaba con él. Nosotros somos
testigos de todo lo que hizo en Judea y en Jerusalén. Lo
mataron colgándolo de un madero. Pero Dios lo resucitó al
tercer día y nos lo hizo ver, no a todo el pueblo, sino a los
testigos que él había designado: a nosotros, que hemos
comido y bebido con él después de su resurrección. Nos
encargó predicar al pueblo, dando solemne testimonio de
que Dios lo ha nombrado juez de vivos y muertos. El
testimonio de los profetas es unánime: que los que creen en
él reciben, por su nombre, el perdón de los pecados.»
Salmo 117: Este es el día en que actuó el Señor, sea
nuestra alegría y nuestro gozo.
Colosenses 3,1-4: Buscad los bienes de allá arriba donde
está Cristo.
SAN JUAN 20, 1-9: El había de resucitar de entre los muertos.
Narrador: Al anochecer de aquel día, el primero de la semana,
estaban El primer día de la semana, María Magdalena fue al
sepulcro al amanecer, cuando aún estaba oscuro, y vio la
losa quitada del sepulcro. Echó a correr y fue donde estaba
Simón Pedro y el otro discípulo, a quien tanto quería Jesús, y
les dijo:
María Magdalena -Se han llevado del sepulcro al Señor y no
sabemos dónde lo han puesto.
Narrador: Salieron Pedro y el otro discípulo camino del sepulcro.
Los dos corrían juntos, pero el otro discípulo corría más que
Pedro; se adelantó y llegó primero al sepulcro; y,
asomándose, vio las vendas en el suelo; pero no entró. Llegó
también Simón Pedro detrás de él y entró en el sepulcro: vio
las vendas en el suelo y el sudario con que le habían cubierto
la cabeza, no por el suelo con las vendas, sino enrollado en
un sitio aparte. Entonces entró también el otro discípulo, el
que había llegado primero al sepulcro; vio y creyó. Pues
hasta entonces no habían entendido la Escritura: que él
había de resucitar de entre los muertos.