1. Universidad de San Carlos de Guatemala
CUNSUR
Facultad de Ciencia Medicas
Dr. Byron García
Semiología II
VIOLENCIA EN LA RELACION MEDICO –PACIENTE.
Integrantes:
Nathaly Andrea Cruz Estrada 201446276
Daniela María José García 201446298
Yitzhak Shamir García Gonzales 201446155
Boris Alejandro González Cardona 201446045
2. BIOETICA EN RELACION MÉDICO-PACIENTE:
Aborda los problemas suscitados en la relación del médico con el paciente,
con el equipo de trabajo, con otros niveles asistenciales, dese una óptica
multidisciplinar.
Investiga cuestión frontera entre la calidad, la gestión y los valores
profesionales. Algunas de estas cuestiones son el síndrome del quemado, el
acoso en el trabajo, los errores médicos, la violencia hacia el médico, la
priorización de recursos limitados, las voluntades anticipadas.
3. ALGUNAS CAUSAS DE LA VIOLENCIA EN
RELACION MÉDCIO-PACIENTE
Varios estudios han identificado las causas más comunes que originan actos
de violencia en el sector de la salud, como la espera para recibir tratamiento
y la insatisfacción del tratamiento proporcionado.
Además, los pacientes pueden tener un comportamiento agresivo debido a
su estado de salud o a los medicamentos que toman o consumo de alcohol y
otras drogas.
Otro ejemplo importante es que las personas pueden amenazar o perpetrar
violencia física contra el personal de la salud porque se oponen, en base a
sus creencias sociales, políticas o religiosas, a un área específica de la
práctica médica.
4. INTERRUPCIONES DE LAS CONSULTAS:
Las interrupciones en una
conversación siempre se perciben
como manifestaciones de
agresividad. La gente reacciona de
muy diversas maneras ante un
intento de dominación.
Las interrupciones en la consulta
afectan tanto al paciente como al
médico. Al primero que se le rompe
el clima adecuado para que narre los
problemas por los que consulta,
dificultándole la expresión de
confidencias.
Es común que las interrupciones se
perciban como signo de
hiperocupación, “el médico tiene
demasiado trabajo”, o bien
“aunque hable, no se va a enterar,
tiene demasiadas cosas en la
cabeza” y puede llegar a perder
autoestima, “lo mío, después de
todo, no es tan importante”.
5. LA VIOLENCIA SEGÚN CARACTERÍSTICAS DE
PERSONALIDAD DEL PACIENTE
Tener personalidad insegura y con escasas habilidades sociales puede ser el motivo por
el que un paciente presente actitudes a la defensiva, especialmente cuando ha vivido
experiencias negativas previas, en sí mismo o en su entorno más cercano.
En las relaciones de malos tratos el rol maltratado/maltratador es, con frecuencia,
intercambiable, lo que dificulta la posibilidad de romper el círculo de violencia. Son
relaciones llenas de violencia, en las que ésta se expresa, de forma inadecuada, a
través de respuestas de contención o de intensificación.
. La intensificación, o ira manifiestam es la respuesta que adopta el maltratador. Se
expresa mediante preguntas acusadoras, y a través de la vociferación y el insulto
6. VIOLENCIA Y EL CONTEXTO DE SALUD:
Se entiende por violencia cualquier comportamiento físico, psicológico/emocional
y/o sexual que, por medio de la acción u omisión, provoca daño a las personas.
Se reconoce también como expresión de violencia aquellas situaciones en las que
existe una percepción de mala calidad de servicios o de mala atención, no
satisfacción de necesidades de un cliente, proveer de servicios que están muy lejos
de las expectativas del usuario, cuando se abusa o se recibe un trato injusto.
Entre los trabajadores con mayor riesgo de actos violentos, según los estudios, se
encuentran los que se desempeñan en el sector salud, especialmente en el área
intrahospitalaria.
Para el CIE (2002) esta problemática tiene carácter universal, es decir, afecta a todos
los trabajadores de atención sanitaria en mayor o menor grado, principalmente al
personal de ambulancias, médicos y personal de enfermería que se desempeña en
servicios hospitalarios. Esta violencia de los funcionarios en el lugar de trabajo
también puede generar en ellos comportamientos violentos, extendiéndose hacia
los usuarios de los servicios de salud
7. CODIGO DEONTOLOGICO:
Artículo 7: El médico como empleado, no debe aceptar que se vulneren sus
derechos, pretextando el apostolado médico; la remuneración del médico
por sus servicios prestados debe de ser justa, decorosa, apegada a las leyes
laborales a efecto de satisfacer sus necesidades de orden material, moral y
cultural; sin pretextar formación, capacitación o residencia. Cuando esto se
transgreda debe ser puesto en conocimiento del Colegio Médico.
8. CODIGO DEONTOLOGICO
Artículo 9. El médico que desempeña
un cargo tiene derecho a negarse a
efectuar asistencia que no encuadre
dentro de las obligaciones inherentes
al cargo, salvo en situaciones de
emergencia nacional o peligro para la
salud de la población, debiendo
prestar su cooperación con las
autoridades competentes, en la
protección de la salud y la
organización de los cuidados
permanentes, a no ser que la edad
y/o la salud se lo impidan.
Artículo 26. El médico debe
concentrar su atención en procurar
la recuperación de la salud de sus
pacientes, guardando el debido
respeto tanto al cuerpo como a la
dignidad de los mismos.
9. CODIGO DEONTOLOGICO
Artículo 34. Cuando el médico acepta atender a un paciente, se
compromete a asegurarle la continuidad de sus servicios, que podrá
suspender si llegara al convencimiento de no existir hacia él la necesaria
confianza y/o disposición a seguir sus indicaciones. Advertirá entonces de
ello al paciente y/o a sus familiares, y facilitará que otro médico, al cual
transmitirá la información oportuna, se haga cargo del caso.
10. RECOMENDACIONES:
La AMN insta a las asociaciones médicas nacionales (AMNs) a tomar
medidas en las siguientes áreas:
Estrategia: Las AMNs deben instar a las instituciones de salud a elaborar e
implementar un protocolo para enfrentar los actos de violencia. El
protocolo debe incluir lo siguiente:
11. RECOMENDACIONES:
AMNs:
• Política de tolerancia cero para la violencia en el trabajo.
• Definición universal de la violencia en el lugar de trabajo.
• Un plan predeterminado para mantener la seguridad en el lugar de
trabajo.
• Un plan de acción designado para uso de los profesionales de la salud
cuando ocurra violencia.
• Un sistema para informar y registrar los actos de violencia que puede
incluir informar a las autoridades legales o policíacas.
• Un medio para asegurar que los empleados que informan sobre violencia
no enfrenten represalias
12. RECOMENDACIONES
Para que este protocolo sea eficaz es necesario que la administración de las
instituciones de salud comunique y tome las medidas necesarias para
asegurarse que todo el personal conozca la estrategia. Y que tome lo siguiente
como importante:
Elaboración de politicas.
Comunicación.
Ayuda a las víctimas.
Recopilación de información.
Seguridad.
Investigación
Aspecto financiero.
13. Los principios fundamentales del médico.
1. Respetar la autonomía del paciente, sobre todo al tomar decisiones.
2. Aplicar el principio de no maleficencia, es decir, no causar daño con decisiones y
acciones.
3. Pugnar por el principio de beneficencia, o sea, hacer el mayor bien posible en su
actuar.
4. Mantener el secreto profesional y la confidencialidad.
5. Buscar una gestión racional y eficaz de los recursos de salud para todos los pacientes.
6. No solo aliviar síntomas, sino llevar al enfermo a su mayor nivel de funcionalidad
posible.
7. Honrar el derecho del paciente a una segunda opinión médica.
8. Gestión adecuada de conflictos de intereses
9. Autorregulación y respeto mutuo entre los colegas.
14. ESTUDIAR ENTRE TORTURA:
El titular del Ministerio de Salud, Luis Enrique
Monterroso, menciona la palabra tortura cuando
describe castigos como extender los turnos, lidiar con
áreas inhumanas de descanso y abusos de diferentes
tipos. Por eso giró un oficio el 15 de octubre a los
directores de los cuatro hospitales escuelas principales
(Cuilapa, Occidente, Roosevelt y San Juan).
“En reiteradas ocasiones se han recibido denuncias de
estudiantes de pregrado y posgrado (…) han
manifestado que constantemente reciben por parte de
los jefes de servicio y médicos residentes maltrato,
acoso sexual, discriminación, castigos infames,
sometimiento a jornadas extremas y otros actos que
vulneran la dignidad de las personas, lo que
compromete la calidad del aprendizaje y servicio que
brindan dichos estudiantes”.
”.
El documento solicita investigar y someter a los
responsables al “régimen disciplinario de
conformidad con lo estipulado a partir del artículo
74 del decreto 17-48, Ley de Servicio Civil”. La
norma establece cuatro clases de sanciones
graduales (por gravedad de la falta): verbal,
escrita, suspensión del trabajo sin goce de sueldo
por un máximo de 30 días y suspensión sin goce de
sueldo en casos de detención y prisión provisional.
Sin embargo, advierte Juan Carlos Villeda, asesor
del ministerio, “cuando los investigadores llegan a
los hospitales, las mismas personas que venían
siendo castigadas lo niegan todo. Pero conocemos
el fenómeno desde dentro y sabemos qué sucede