1. GERUNDIO
Es una forma invariable del verbo que NO indica ni el
tiempo en que transcurre la acción (presente, pasado o futuro), ni
número(singular o plural), ni el género (masculino o femenino). Y
su uso correcto (según tendencias gramaticales a las que me apunto)
sería cuando se refiera a una palabra cuyo caso o función dentro de
la oración sea el de sujeto o el de complemento directo.
“Los niños (sujeto) estaban saliendo(los niños) a la calle”
“Estábamos dándole caramelos (complemento directo)a los
niños”
En términos generales, el gerundio, incorrectamente utilizado,
induce ambigüedad. Precisamente, es esa ambigüedad lo que hace
poco recomendable su uso en literatura por la falta de precisión y
claridad que puede devaluar un escrito. Lo que no quiere decir que
su uso esté en entredicho en aquellos casos en que el significado de
la frase sea inconfundible.
Un primer acercamiento a su correcto uso lo encontramos
en su referencia al caso: el uso del gerundio será correcto cuando
2. el sujeto de dicho gerundio sea el complemento directo del verbo
principal; (caso acusativo).
P.e.: vimos a los niños caminando por la calle
-sujeto: Nosotros (elidido)
-verbo: vimos
-complemento directo: los niños (que son sujeto de la
acción de caminar o de “caminando”)
Sin embargo, una sola coma puede cambiar el significado
de la anterior oración. Si, en lugar de decir “vimos a los niños
caminando por la calle ”, (en que lo que decimos es que vimos a los
niños cuando ELLOS caminaban por la calle) decimos: “vimos a los
niños, caminando por la calle ”, lo que estamos diciendo es que
“vimos a los niños cuando NOSOTROS caminábamos por la calle.
Por eso, sería preferible utilizar el gerundio cuando indique
acción de simultaneidad y no acción de posterioridad.
Será correcto decir: “vimos a los niños cerrando la puerta ”;
es decir: en el mismo momento en que cerraban la puerta. Pero sería
más impreciso decir: “salieron cerrando la puerta” porque ese
“cerrando” se refiere a una acción posterior –y no simultanea- a la
de “salir” que, evidentemente, tiene que producirse antes de
“cerrar”.
Por la misma razón de imposibilidad de coincidencia
temporal
de
la
innecesariamente
acción,
complejo -,
-y
no
para
sería
evitar
correcto
un
lenguaje
utilizar
el
3. gerundio como auxiliar del verbo principal : “estoy hablándote
para que me entiendas” en lugar de “te hablo para que me
entiendas”. No obstante, se viene admitiendo por los Académicos la
utilización del gerundio como auxiliar del verbo cuando se refiere a
una acción repetitiva: “llevamos tiempo diciéndole…”.
El gerundio debe usarse siempre con carácter explicativo,
y nunca con carácter especificativo.
BIEN: “Te envío un paquete conteniendo libros”
MAL: “Te envío un libro hablando de árboles, flores,
huertos…”
Debe evitarse la utilización del gerundio en las oraciones
de relativo:
MAL:
“Estudio
las
normas
civiles
regulando
el
matrimonio”
BIEN: “Estudio las normas civiles que regulan el
matrimonio”.
4. En definitiva, y como norma literaria general : el
gerundio, cuando no induce a error, puede dar un juego literario
ciertamente interesante:
“Íbamos saliendo poco a poco de aquella situación agobiante”
Pero, si el discurso se distorsiona por el uso del gerundio,
mejor será sustituirlo por formas más comprensibles:
“Salimos
ilusionados
porque
vinieron
unos
amigos
dirigiéndonos a la feria”
…ese “dirigiéndonos” es confuso porque no in dica claramente si es
que nosotros nos dirigíamos o eran los amigos los que nos dirigían,
o éramos todos los que nos dirigimos…
Y, para terminar: tanto el gerundio como las esdrújulas
tienen una fuerte resonancia, así que, en poesía, debe tenerse en
cuenta su uso consciente para dar mayor o menor “intensidad”
fónica a lo que queremos escribir.
NOTA FINAL: En definitiva, son apreciaciones muy personales,
que siempre encontrarán a alguien que las contradiga. Asíque, ¡a
escribir, aunque sea todo en gerundio.