1. Petro 1
David N. Petro
Español 702—El español de los Estados Unidos
Dr. Gabriel Rei-Doval
21 de octubre de 2015
A propósito del estadounidismo
El presente trabajo procura analizar la decisión que toma la Real Academia de la Lengua
Española1 en el 2012 respecto a la génesis del término estadounidismo. Podría conjeturarse que
dicha etiqueta es un intento de otorgar una mayor legitimidad al uso de la lengua española en los
Estados Unidos. Sea como fuere el caso, ¿qué se entiende por estadounisimo, en términos
lingüísticos? ¿Qué supone su génesis en el ámbito oficial de la RAE en el siglo XXI? Así, este
trabajo tiene dos funciones principales: matizar, más allá de la definición breve que aporta la
RAE, en lo tocante al significado del término estadounidsimo, y argüir que la incorporación del
mismo en el diccionario de la RAE sucede a causa del boom poblacional de hispanohablantes en
Estados Unidos.
Según la RAE, estadounidismo tiene la siguiente definición: “[p]alabra o uso propios del
español hablado en los Estados Unidos de América”. Efectivamente, parece ser que el término se
refiere al uso característico de la lengua española por hispanohablantes en los Estados Unidos,
según las pautas existentes allí. No obstante, al recurrir una vez más a la RAE, el mismo patrón
se sigue en lo tocante a “chilenismo” o “colombianismo”: “[p]alabra o uso propios del español
hablado en Chile” y “[p]alabra o uso propios del español hablado en Colombia”,
1 Se refiere a dicha institución de aquí en adelante como la RAE.
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respectivamente. Naturalmente, como se puede apreciar, surge la siguiente problemática: ¿qué
diferencia(s) hay, independientemente del concepto de la nación, entre un estadounidismo, un
chilenismo y un colombianismo? En resumidas cuentas, a diferencia de lo que sucede con las
variedades del español hablado en los países donde el español es la lengua oficial, se resalta el
contacto con el inglés en lo referente al estadounidismo, dado que el inglés es la lengua oficial de
facto2 en Estados Unidos. Sin embargo, la etiqueta de Spanglish no es homóloga en lo que atañe
al mencionado estadounidismo, puesto que el primero es demasiado ambiguo y porque Lipski la
tacha de “an overly facile catchphrase that has been used to refer to so many disparate and
inaccurately described language phenomenon as to have become essentially meaningless”
(Escobar & Potowski 131). En fin, este trabajo propone la siguiente definición en lo que respecta
al término estadounidismo: un calco, una extensión semántica o un préstamo usado en la lengua
española de los hispanohablantes en los Estados Unidos. Un calco se entiende como una
traducción literal que se propaga en una lengua a través del contacto con otra, una extensión
semántica se entiende como una palabra que adquiere un significado nuevo al tratarse de un
cognado erróneo entre dos lenguas, y un préstamo es una palabra de cierta lengua que es
adoptada por otra lengua mediante un grado variado de integración lingüística. En síntesis, el
término estadounidismo se refiere tanto al léxico como al uso de la lengua, ambos matizados por
el contacto con el inglés, que caracteriza el español hablado en los Estados Unidos.
En términos globales, la extensión semántica parece ser el fenómeno lingüístico que más
representa lo comprendido por estadounidismo. Escobar y Potowski mencionan cuatro palabras,
también mencionadas en varios medios de comunicación como Telemundo y El País.com.co3,
que adquieren significados nuevos al usarse como estadounidismos: parada, departamento,
2 El énfasis es mío.
3 Ambos artículos serán mencionados como obras citadas al final del presente trabajo.
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aplicar y elegible. Por ejemplo: parada tiene el nuevo significado de desfile, departamento como
“ministerio o secretaría” (121), aplicar como sinónimo de postular o solicitar, y elegible “en el
sentido de ser beneficiario” (121). El uso de las palabras anteriormente mencionadas son
fundamentalmente diferentes al compararse con lo que sería quizá un préstamo léxico como
decir carpeta en vez de alfombra. Según un artículo del periódico colombiano “El País.com.co”,
respecto a lo que afirma Leticia Molinero de la Academia Norteamericana de la Lengua
Española, “[m]ientras que el estadounidismo se refiere a palabras que existen en la lengua
española pero que en Estados Unidos adquieren un significado diferente, el espanglish es una
modalidad donde se mezclan elementos léxicos y morfológicos ingleses y españoles (como
"carpeta" cuando uno se refiere a alfombra, que es "carpet" en inglés)”. Por consiguiente, se
puede apreciar que el estadounidismo se asemeja más a lo que es una extensión semántica
mientras que un préstamo léxico cualquiera como “carpeta” para referirse a “alfombra” no sería
un ejemplo de un estadounidismo acatado por la RAE.
A manera de conclusión, se busca contestar el siguiente interrogante: ¿por qué resulta que
la RAE agrega la palabra estadounidismo a su repertorio léxico en el año 2012? El boom
poblacional de los hispanohablantes en los Estados Unidos es una causa evidente. Se dice, por
ejemplo, que hay “un total aproximado de 48,6 millones de hispanohablantes en los EE.UU.,
colocando al país en el segundo lugar en el mundo, solo después de México…” (Escobar &
Potowski 10). Sería un tanto arriesgado creer que la Academia Norteamericana de la Lengua
Española pudiese llegar a promover el uso oficial y reconocido de los estadounidismos ante la
RAE de no haber sido por la inmensa cantidad de hispanohablantes que viven en Estados
Unidos. Prueba de ello podría ser el hecho de que no existe una palabra como “guineanismo”
para referirse al español hablado en Guinea Ecuatorial.
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Obras citadas
Escobar, Ana María & Kim Potowski. El español de los Estados Unidos. Cambridge: Cambridge
UP, 2015. Impreso.
“Estadounidismo, la nueva palabra aceptada por la RAE”. Elpais.com.co. El País S.A., 29
septiembre 2012. Web. 20 octubre 2015.
“La RAE acepta ‘estadounidismo’”. Telemundo47.com. Telemundo 47, 30 agosto 2014. Web.
20 octubre 2015.
La Real Academia Española. Diccionario de la lengua española. 23.ª ed. Madrid: Espasa, 2014.
Impreso.