Ficha

1. El objetivo del art�culo es realizar una serie de consideraciones cr�ticas en torno al rol de la
ling��stica Aplicada en el contexto de la ense�anza del espa�ol como lengua extranjera en Brasil.
El art�culo pretende, pues, presentar una LA vista desde una perspectiva social y comprendi�ndola
como herramienta para la inclusi�n social y la interacci�n cultural en Am�rica Latina.
La autora considera que ense�ar y aprender lenguas extranjeras es una oportunidad incre�ble para
promover la interacci�n entre el mundo del aprendiz y este mundo de la lengua/cultura meta. Por
ello, propone presentar un nuevo discurso de la LA a la ense�anza del espa�ol en el contexto
brasile�o, discuti�ndolo desde una perspectiva social y comprendi�ndolo como herramienta para
la inclusi�n social y la interacci�n cultural en Am�rica Latina. Aprender lenguas extranjeras pas�
a ser una oportunidad de crecimiento, de reflexi�n, de autoconocimiento, de autocr�tica, por lo
que, el aprendizaje de lenguas extranjeras podr�a ser una herramienta importante en el sentimiento
de inclusi�n social y cultural.
El art�culo est� organizado en tres partes, refiri�ndose en la primera a la LA en Brasil; en la
segunda, a Am�rica Latina como espacio contempor�neo e intercultural; y, en la tercera, asociar�
esos discursos a otros que confirman la (des)integraci�n continental.
En cuanto a la primera parte, nos ayuda a comprender que la palabra es posterior al mundo, que
es el mundo con sus personas y sus historias los que constituyen los sentidos de las palabras. Por
lo tanto, se debe recordar que los aprendices tienen conocimientos y experiencias importantes que
necesitan ser considerados durante el proceso de lectura de la palabra escrita y resaltando la
importancia de la realidad sociocultural de los aprendices.
Por lo tanto, parece esencial que la LA se acerque a �reas que focalizan lo social, lo pol�tico y la
historia. Esta es, incluso, una condici�n para que la LA pueda hablar de la vida contempor�nea.
Por lo tanto, esta ciencia ling��stica necesita estar m�s all� de la aplicaci�n o uso de lenguaje.
Teniendo en cuenta la segunda parte, �De que Am�rica Latina se est� hablando? Seguramente,
de un espacio cultural m�ltiple, complejo, h�brido y en constante transformaci�n. Pero m�s que
resaltar de d�nde est� hablando, interesa saber �de qu� manera se puede, como profesor y
formador de profesores de espa�ol, contribuir al conocimiento y la integraci�n de ese espacio
cultural? Y la respuesta no podr�a ser otra, sino posibilitar el conocimiento de esa lengua/cultura
tan diversa cuanto son diversos los pueblos que la utilizan para expresarse. Y ese conocimiento,
que deber�a ser mutuo, es el arma contra el prejuicio, el estereotipo, la reducci�n y la
generalizaci�n de lo que (no)somos.

2. Por lo que respecta a la tercera parte, se han analizado tres textos que ayudan a pensar en tres
aspectos fundamentales: el prejuicio ling��stico, el poder ling��6stico y las identidades de
(des)integraci�n.
Con el primero se ha confirmado que la lengua espa�ola, en la modalidad hispanoamericana es
vista con prejuicio por los medios de comunicaci�n. Con el segundo se confirma que el poder de
lo dicho en lengua espa�ola, cuando la modalidad es la ib�rica, persiste en el imaginario de
muchos brasile�os. El tercero, ilustra la labor de muchos brasile�os que todav�a no se reconocen
como latinoamericanos. Y, si alguien no se reconoce como parte de los que constituye su
identidad cultural, �C�mo un profesor puede promover cambios, bien sea para ellos mismos o
para sus alumnos?