Las plantas producen su propio alimento a través de la fotosíntesis, mientras que los animales se alimentan de plantas u otros animales. Las plantas cultivadas necesitan atención humana para crecer, mientras que las plantas silvestres dependen de la naturaleza. Los animales salvajes viven libremente sin necesidad de ayuda humana, a diferencia de los animales domésticos que requieren atención. Debemos cuidar y respetar la naturaleza ya que es el hogar de todos los seres vivos.