2. Solubilidad es la cualidad de soluble (que se
puede disolver). Se trata de una medida de la
capacidad de una cierta sustancia para
disolverse en otra. La sustancia que se
disuelve se conoce como soluto, mientras que
aquella en la cual este se disuelve recibe el
nombre de solvente o disolvente. La
concentración, por otra parte, hace
referencia a la proporción existente entre la
cantidad de soluto y la cantidad de disolvente
en una disolución.
3. La solubilidad puede ser expresada en porcentaje
de soluto o en unidades como moles por litro o
gramos por litro. Es importante destacar que no
todas las sustancias se disuelven en los mismos
solventes. El agua es solvente de la sal pero no del
aceite.
4. Sustancia que es capaz de destruir la agregación
de las moléculas de un cuerpo soluble. Un
significado más amplio de la palabra es aquel
componente que se halla en mayor proporción en
una mezcla homogénea.
5. Los disolventes o solventes presentan las siguientes
características principales:
Son compuestos líquidos y de peso molecular ligero.
Son sustancias poco polares, y por tanto escasamente
miscibles en agua, que manifiestan una gran lipofilia.
Poseen gran volatilidad, por lo que presentan una alta
presión de vapor, pudiendo pasar fácilmente a la
atmósfera en forma de vapor durante su manejo y por
ello susceptibles de ser inhalados fácilmente.
Tienen unos puntos de ebullición relativamente bajos.
En general, producen importantes efectos tóxicos.
Son sustancias combustibles cuyos vapores mezclados
con el aire pueden dar lugar a mezclas inflamables y
con riesgo de explosión.
6. En general, producen importantes efectos
tóxicos.
Son sustancias combustibles cuyos vapores
mezclados con el aire pueden dar lugar a
mezclas inflamables y con riesgo de explosión.
7. La cristalización es un proceso en donde los
iones, átomos o moléculas que constituyen la
red cristalina crean enlaces hasta formar
cristales, que se emplea en química con
bastante frecuencia para purificar una
sustancia sólida. En la cadena de operaciones
unitarias de los procesos de fabricación, se
ubica después de la evaporación y antes de la
operación de secado de los cristales y
envasado.
8. a) .- No debe reaccionar con el sólido.
b) .- Tener punto de ebullición inferior al
punto de fusión del sólido a purificar.
c) .- Debe presentar volatilidad moderada,
para eliminarlo con facilidad de
los cristales.