La necropsia tiene como objetivos determinar la causa y manera de muerte, documentar todos los hallazgos, y recopilar evidencia. Existen dos tipos de necropsia: clínica, que requiere consentimiento y busca identificar la causa de muerte; y médico legal, que no requiere consentimiento y busca determinar la causa de muerte y descartar muerte criminal, además de preservar evidencia. La necropsia médico legal incluye examen externo e interno del cuerpo, así como análisis toxicológicos