1. UNIVERSIDAD DE CASTILLA-LA MANCHA
El tutor y la familia ante
la gran pantalla
[Escribir el nombre del autor]
2012
EDUCACIÓN Y SOCIEDAD
2. EL TUTOR Y LA FAMILIA ANTE LA GRAN PANTALLA
El día 18 de Abril de 2012 nuestras compañeras nos expusieron en clase su tema: “El
tutor y la familia ante la gran pantalla”, y a continuación, haré una breve recesión de todo lo
que allí aprendí sobre este tema, que tan relevancia y presencia tiene en nuestro día a día.
En primer lugar, nuestras compañeras hablaron sobre una de las formas de
aprendizaje de los niños en su infancia, basada ésta en la observación. No solo las personas
que rodean a los pequeños sirven como modelo de aprendizaje para estos, sino que la
televisión constituye uno de las grandes fuentes de aprendizaje para ellos. Incluso, ellas nos
mostraron cómo en muchas ocasiones lo niños tratan de buscar en la televisión, respuestas a
preguntas que no consiguen conocer de parte de los adultos que les rodean.
Por otro lado, nos llevaron a plantearnos la siguiente cuestión: ¿La Televisión educa?
Para dar respuesta a esta compleja pregunta, ellas nos presentaron cuál es el panorama
televisivo que en nuestra actualidad tienen las cadenas de televisión. Así, hablamos de los
siguientes programas:
- En Clan TVE, podemos encontrar series como Caillou, Pocoyó, Los Lunnis o Dora la
Exploradora. Lo cierto es que estas cuatro resultan bastante positivas para el desarrollo y
educación de nuestros pequeños, puesto que ellas se encargan de trasmitir valores tales
como: sociabilidad, tolerancia, respeto, gusto por hábitos de vida saludables, bilingüismo,
curiosidad por el mundo interactivo…
- En el caso de Antena 3 Neox, nuestras compañeras nos mostraron un panorama de
dibujos animados muy diferente al que acabo de explicar. Las series que priman en esta
cadena son Los Simpsons, American Dad o Sinchan, y ellas distan mucho de ofrecer un
panorama educativo y de buenos modales. Lo más característico de estas series son los
insultos, lenguajes vulgares, así como transmisión de valores poco éticos.
- En tercer lugar, hablamos de Boing (del grupo Mediaset España), del cual analizamos
en clase dos series: Doraemon y La Hora de aventuras. De ellas, tampoco consideramos que se
trataran realmente adecuadas para los niños, puesto se encargan de transmitir ideas como la
holgazanería, la venganza, el acoso, y en ellas podemos encontrar en ocasiones un humor
insultante.
- Finalmente, hablamos de series que podíamos encontrar en el canal infantil de
Disney Channel. De él, nuestras compañeras nos hablaron sobre Hannah Montana y Phineas y
Ferb.
Después de este recorrido por nuestro actual panorama televisivo, nuestras
compañeras nos mostraron algunos de los resultados más significativos de una encuesta que
realizaron cuarenta y ocho niños de edades comprendidas entre los seis y los doce años. De
entre todas las conclusiones, he de destacar las siguientes como más llamativas:
- Casi todos contestaron que veían la televisión dos horas al día.
- Ellos no suelen ver la TV en familia, sino que la ven solos o con sus hermanos.
- Pocos de los encuestados tienen televisión en su habitación, la gran mayoría suelen
ver la TV en el salón de casa.
- Los dibujos animados que mayor popularidad tienen entre estos pequeños son Los
3. Simpsons, Gormiti y Bob Esponja.
- Dibujos como Doraemon, Los Simpsons o la Hora de las Aventuras, son los dibujos
que gran parte de los padres de los niños encuestados, les prohíben ver.
Una vez conocidos estos resultados, la exposición se centró finalmente en el uso de la
televisión como recurso educativo. Por ello, en este apartado, ellas trataron de darnos una
serie de consejos para sacar siempre el mejor partido a este gran medio:
- Ver la televisión de una forma moderada.
- Evitar la televisión mientras se come, para fomentar la comunicación.
- Usar el cine o las películas en casa como reunión familiar.
- Evitar poner televisiones en las habitaciones de los hijos.
4. COMENTARIO
El mundo de la televisión y su relación con la educación, se ha convertido en uno de los
asuntos que más preocupa a la sociedad, y en especial a padres y educadores. La influencia
que sobre los más pequeños puede ejercer este medio de comunicación es enorme, de ahí que
debamos cuidar todo lo que ellos ven y aprenden de la televisión.
Considero que, la responsabilidad de que los niños vean contenidos que no están
apropiados a su edad, está única y exclusivamente en manos de los adultos que están a su
cargo. Puede resultar realmente cómodo, sentar al pequeño frente al televisor durante horas,
concibiendo todo ese tiempo como “descanso” para padres e hijos. Pero, debemos ser
conscientes de que este tiempo de relax, puede volverse en nuestra contra siempre que el
niño esté viendo en la TV programas o series que se escapan de lo “permitido” para su edad.
Para evitar que pueda producirse este efecto negativo, los adultos debemos ser los
responsables de la elección de qué programas de la parrilla televisiva pueden o deben ver los
niños. Además, resulta realmente positivo que, el adulto vea la televisión con el pequeño, para
que este pueda ir ayudándolo a analizar todo lo que ve por la TV. De este modo, el niño podrá
ir adquiriendo un sentido crítico ante todo lo que ve, y podrá darse cuenta de lo bueno y de lo
malo que las series o programas muestran, para evitar así que ellos lo reproduzcan en su vida
diaria.
Por otro lado, un tema que suscitó mucho debate durante la exposición de nuestras
compañeras, fue la cuestión sobre si en nuestros días la TV educa o no. Lo cierto es que es
enorme la disparidad de respuestas que en clase se dieron sobre esta pregunta.
Desde mi punto de vista, he de decir que los programas que se muestran en este
medio de comunicación siguen siendo realmente muy educativos para los más pequeños, solo
que quizá, en nuestra sociedad, se le dé mayor relevancia a aquellos que contienen, por
ejemplo, elementos violentos o insultantes.
La gran parte de los dibujos animados que poseen este tipo de contenidos no aptos
para los más pequeños, son creados para un público adulto, y no buscan en los menores a sus
más fieles seguidores. Solo que, parece difundida la idea de que, por ser animadas, esas series
han sido creadas para niños.
Series como American Dad, Los Simpsons, Family Guy o South Park, son claros
ejemplos de estos dibujos que buscan como espectadores a los adultos, es decir, aquellos que
son capaces de diferenciar lo que es ficción a lo que es realidad, y los que son capaces de
analizar lo bueno y malo de cada contenido.
Por todo lo ya dicho, finalmente creo que el mundo de la televisión puede ser un
magnífico modo de promover el aprendizaje diferente y entretenido de los más pequeños,
pero siempre y cuando un adulto sepa seleccionar cuáles son los más adecuados contenidos
para los niños.