Debido a los cambios en el mundo, las instituciones y los maestros deben apropiarse de las nuevas tecnologías y tendencias pedagógicas como el aprendizaje invertido para facilitar el aprendizaje de los estudiantes y motivarlos. El aprendizaje invertido permite que los estudiantes interactúen con el profesor y sus compañeros en el aula. Los maestros deben ser innovadores, motivadores y tener empatía con los estudiantes para promover un cambio y construir una nueva sociedad.