La atmósfera se compone principalmente de nitrógeno y oxígeno y está dividida en capas. La troposfera, donde se encuentra la vida, y la estratosfera, que contiene la capa de ozono, son las capas más bajas y importantes. La atmósfera mantiene el calor en el planeta, filtra la radiación solar dañina y proporciona gases necesarios para la respiración y la fotosíntesis.