1. LORENA MORÓN
LÓPEZ
Educar despacio
El movimiento "slow" se traslada a la educación y propone a
padres y docentes respetar el ritmo natural de aprendizaje de
los niños
¿Qué opinión os merece este artículo?
Pienso que utilizando bien este nuevo movimiento podría ser muy útil, tenemos que ser
conscientes de que es algo nuevo, diferente y como todo cambio en algún momento nos
puede asustar o incluso parecer inútil, pero no es así, debemos enfrentarnos al cambio y
asimilarlo lo mejor posible porque hasta ahora considero el método de aprendizaje como un
error. Yo misma he presenciado esto, estudiamos para algo a corto plazo, estudiamos para dos
días después vomitar todo lo que sabemos sin retener más tiempo esta información lo que
conlleva que en nuestro futuro lo “estudiado” lo “aprendido” no tenga ningún valor porque a
penas muchos de nosotros lo conservamos. Estoy de acuerdo que todo esto sucede porque
aprendemos con un reloj que nos marca cada minuto, cada hora, cada semana en la que nos
tenemos que saber algo, a lo mejor incluso no lo hemos ni entendido pero ya nos lo debemos
saber, creo que es mejor no estar tan pendiente de que el tiempo corra y realmente
preocuparnos primero de entender todo para luego aprenderlo de esta manera toda esa
información se mantendrá en nosotros mismos a lo largo de nuestra vida, es decir, en nuestro
futuro.
Con todo este cambio tenemos que tener claro que lo que queremos conseguir es lograr un
cambio de actitud de los agentes educativos -padres, docentes y colegios-, para respetar los
diferentes ritmos de aprendizaje y mejorar la calidad del tiempo escolar y extraescolar de los
niños, por eso todos debemos involucrarnos
Hay otro factor que repercute en el aprendizaje y madurez del niño y son las constantes
actividades extraescolares que tiene al día. Cuando son pequeños sobre todo los padres
conocidos como “padres helicópteros”, hacen de sus días horarios completamente planeados
de modo que no tienen tiempo para ni aburrirse, creo que no es malo en su cierta medida
pero tenemos que intentar no abusar tanto de ello y también permitirle que de pequeño
sientan el aburrimiento y sepan enfrentarse a él con este proceso se va a intentar ralentizar el
ritmo de vida diario y aprender a gestionar bien el tiempo, de manera que no se les asfixien su
capacidad de decisión.
Todo lo citado con anterioridad se ve reflejado en los resultados académicos, el plan que
hemos utilizado hasta ahora en el aprendizaje de los niños hace que sea un aprendizaje rápido
no por ello mejor ya que tras varios estudios se ve que las consecuencias no son satisfactorias,
aquí se lleva un ritmo rápido se utilizan objetivos a corto plazo y permanece en ello una
constante presión todo esto provoca situaciones insostenibles, pérdida de creatividad y estrés
en los alumnos y profesorado.
2. LORENA MORÓN
LÓPEZ
Tras ver que los resultados no son fructíferos nos centraremos en la propuesta “slow” que es
aprender bien y asentar los conocimientos con un ritmo apropiado sin prisa. “slow education"
apuesta por métodos de enseñanza más eficaces y estimuladores para los alumnos, que
atiendan a sus características particulares y modos de aprendizaje. Una de las ideas es evitar la
obsesión por la educación precoz.
Algunos cambios que se proponen son:
• Apostar por el juego sencillo, básico y desestructurado como herramienta de
aprendizaje.
• Conseguir despertar en los niños la pasión por aprender, descubrir y sentir
curiosidad por las cosas les ayudará más en el futuro
• Confiar en su capacidad como padres,
• Pasar más tiempo con los hijos,
• No intentar llenar los espacios "vacíos" de los niños con actividades planificadas,
ser más flexibles y liberarles del estrés al que se someten muchos de ellos
• Respetar la infancia y no intentar que los niños se conviertan en adultos antes de
tiempo.
¿Qué relación establecéis con las ideas que ya hemos estudiado del Naturalismo pedagógico
y los estudios sobre Psicología educativa de H. Wallon, Piaget y Vigotsky?
Establezco una estrecha relación con el naturalismo pedagógico en este nuevo
método ya que lo que se quiere es realmente apreciar la naturaleza del aprendizaje es
decir no usar el modo artificial para la enseñanza. Todo esto aparece en torno al siglo
XVIII. Con el modo artificial lo que conseguimos es que el niño pierda el interés por
aprender, por mejorar y lo que buscamos es que el esfuerzo salga del el mismo y no
sea un esfuerzo forzado. Buscamos enseñar por el interés natural de los niños, y así
pues enseñaremos de manera intuitiva.