1. Materia: Histología y Embriología
Carrera: Lic. Kinesiología y Fisiatría
Integrantes: Almonacid Lorena, Mendoza Patricia, Prancevic Cristian, Villan Noelia
2.
3. ¿Que es la Alimentación?
Es el proceso voluntario a través del cual los seres vivos se
proporcionan sustancias aptas, para el consumo, las modifica
partiéndolas, cocinándolas, introduciéndolas en la boca,
masticándolas y deglutiéndolas, momento a partir del cual
acaba la alimentación y comienza la nutrición.
¿Que es la nutrición?
Es el conjunto de procesos mediante los cuales el organismo
recibe transforma y utiliza las sustancias nutritivas que
contienen los alimentos.
Alimentación en el embarazo
Una adecuada alimentación durante el embarazo es
importante para lograr un óptimo crecimiento y desarrollo fetal
y una correcta ganancia de peso, evitando complicaciones
materno-fetales a corto y largo plazo.
Durante el embarazo, aumentan las necesidades de energía,
hidratos de carbono, proteínas, vitaminas y minerales. Se
recomienda aumentar el consumo de alimentos fuentes de
ácidos grasos omega-3 y de agua.
Una alimentación saludable contribuirá a disminuir el riesgo
de bajo peso al nacer, prematuros, inadecuaciones
nutricionales de la madre y el feto, etc.
4.
5. Alimentación Durante el Embarazo
El embarazo es un estado de la mujer, en el que se producen cambios
fisiológicos y metabólicos, los que determinan la necesidad de energía y
nutrientes para la formación de tejidos maternos y el trabajo necesario para
mover la masa corporal adicional, así como para el crecimiento y desarrollo del
feto. Se sabe que el embarazo es un periodo en el que los requerimientos de
nutrientes son proporcionalmente más altos, lo que hace que las embarazadas
sean uno de los grupos más vulnerables a la carencia alimentaria. El producto
de la gestación dependerá de los nutrientes transferidos por la madre para un
adecuado crecimiento. Asimismo, el peso al nacer estará dado por el estado
nutricional de la mujer antes y durante el embarazo. Son tres las formas por las
que una mujer embarazada puede proporcionar nutrientes a su organismo y al
feto, la más frecuente es mediante una dieta adecuada en calidad y cantidad,
que garantice una digestión, absorción y transporte normales hacia la
circulación materna y transferencia normal de los elementos nutricionales de la
madre al feto a través de la placenta, lo que va a requerir de una amplia
concentración de nutrientes en el lado de la madre, sin estos componentes
esenciales se produce un cierto retraso en el crecimiento fetal intrauterino. Una
segunda forma, la provisión de nutrientes puede darse por vía enteral o
parenteral, incluso por períodos prolongados, ya sea para sustituir o aumentar
esta provisión. Una tercera forma, menos deseable, es la movilización de las
reservas corporales maternas para obtener calorías, proteínas.
6. Necesidades de energía y nutrientes
Proteínas: Las proteínas están formadas por la
unión de numerosas unidades: los aminoácidos,
que son 20 en total y sirven para la
"construcción" del nuevo
bebé.
Las proteínas es uno de los factores distintivos
de la alimentación propia del embarazo, el bebé
crece dentro del útero principalmente a base de
proteínas.
Las proteínas en la dieta juegan un papel
decisivo para:
La madre: el desarrollo y crecimiento de los
órganos maternos durante el embarazo (útero,
mamas, placenta, etc.).
El bebé: para el desarrollo y crecimiento normal
de todo su cuerpo. Las necesidades de proteínas
aumentan durante el embarazo.
Hidratos de Carbono: La cantidad necesaria para
la mujer embarazada es prácticamente igual a la
de la mujer no embarazada, si bien puede variar
según diversos factores, como el peso, la actividad
física y el estado de salud general. Los hidratos de
carbono cumplen una función energética
predominante exteriorizada en la producción de
actividad muscular y calor, ayudan a la
desintoxicación y a la protección de todo el
organismo.
Consumir alimentos ricos en almidones, como
cereales, tubérculos y muchas verduras; así como
pan, arroz, pasta, que proporcionan tanto energía
como fibra (esta última ayuda a la digestión y a
mantener un ritmo intestinal normal).
7. Necesidades de energía y nutrientes
Grasas: Las grasas cumplen también la
función de transportar algunas vitaminas,
como la A y la D. Es importante que la
cantidad de grasas no sufra grandes
variaciones cualitativas; la cantidad de
grasas necesarias se modificará según la
época del año en que se desarrolle el
embarazo; por ejemplo, en invierno, el
organismo requerirá una cantidad un
poco superior que en verano.
Las grasas desempeñan una doble
función: energética y, en menor medida
que las proteínas, interviene en la
formación de los tejidos.
Vitaminas y Minerales: Con
una alimentación equilibrada se
ingieren cantidades suficientes
de vitaminas, minerales y del
resto de los nutrientes que
necesita durante el embarazo,
excepto de hierro, folatos y en
ocasiones de calcio. En la
mayoría de los casos, los
suplementos de vitaminas no
son necesarios.
Calcio: es el mineral que más
abunda en el cuerpo. El 99 % del
calcio corporal está localizado en los
huesos y dientes. Para que el
organismo pueda absorber todo el
calcio presente en un alimento, es
necesario que en ese mismo la
existencia de vitamina D ya que es
indispensable para la absorción
tanto del calcio como del fósforo
alimento haya fósforo. Es necesario
para el crecimiento y desarrollo de
los huesos y dientes del bebé; para
la coagulación de la sangre, para las
transmisiones nerviosas; etc.
8. Necesidades de energía y nutrientes
Hierro: Es un mineral de gran importancia para el
organismo y su deficiencia es el problema nutricional
más común en el mundo. La mayor parte del hierro
se encuentra alojada en los glóbulos rojos mientras
que el resto se halla en los músculos. Si el hierro se
encuentra por debajo de los niveles normales al inicio
del embarazo, el riesgo de anemia es severo. Si la
embarazada comienza con un nivel normal de hierro
en su organismo, es probable que continúe así o que
tal vez desarrolle una anemia leve. Esto se debe a
que el hierro es el único nutriente cuyas cantidades
necesarias durante el embarazo son mayores de las
que puede suministrarse sólo a partir de una dieta.
Una de cada tres embarazadas presenta anemia por
falta de hierro durante el último trimestre. Es cuando
el bebé necesita y absorbe este mineral de los
depósitos maternos en mayor cantidad que lo
habitual
Ácidos Fólicos: es una vitamina de gran
importancia para la embarazada, y recién hace
algunos años se considera su ingesta de sumo
valor.
Es fundamentalmente para:
1. La formación de glóbulos rojos.
2. El crecimiento y desarrollo de su bebé.
3. La formación y desarrollo del sistema nervioso
y el cerebro.
Deficiencia de ácido fólico:
a. Anemia durante la gestación.
b. Problemas en el crecimiento y desarrollo del
bebé.
c. Enfermedades del sistema nervioso: espina
bífida (cuando el bebé no desarrolla parte de
las vértebras) u otros trastornos del tubo neural
como la anencefalia (que es cuando el cerebro
no termina de formarse).
9. La malnutrición como el déficit nutricional
severo, antes y durante el embarazo, a causa
de una dieta insuficiente e inadecuada puede
ser causa de infertilidad, anemia, aborto
espontáneo, parto prematuro, malformaciones
congénitas, bajo peso al nacer y mayor
morbimortalidad en el momento de nacer o en
los primeros días después del nacimiento.
Mientras que la malnutrición en exceso,
sobrepeso u obesidad se asocia a un mayor
riesgo de hipertensión arterial (eclampsia y pre
eclampsia), diabetes gestacional, cesárea y
fórceps, y recién nacidos macrosómicos.
El caso de la madre: partos prematuros, hemorragia
post parto, abortos, desprendimiento placentario.
El caso de los hijos: debilidad en el sistema
inmunológico, nivel de resistencia bajo, menor
estatura, deterioros cognitivos, bajo coeficiente
intelectual, menor coordinación, mala visión, y en
casos extremos el feto podría nacer con espina bífida.
El momento crucial en la vida de un niño para
satisfacer las necesidades nutricionales es desde el
día 1 de la concepción hasta los 1000 días de la misma
(aprox. 2 años de vida). Uno de los factores que
repercuten en la determinación del peso al nacer lo
constituyen: el estado nutricional de la madre antes de
la gestación, la ganancia de peso durante el embarazo
teniendo en cuenta un embarazo a término
CONSECUENCIAS QUE ORIGINAN UNA MALA
NUTRICIÓN SON:
10. Deficiencias Nutricionales
El cretinismo endémico deriva de la deficiencia de
yodo, y se caracteriza por un desarrollo mental y un
crecimiento físico deficientes; también se señala
que las dietas con deficiencia de metilos alteran la
expresión de los genes con impronta y pudieran dar
origen a defectos congénitos y ciertas
enfermedades, como el cáncer en la vida posnatal.
Por otro lado, la nutrición materna deficiente antes y
durante el embarazo contribuye al bajo peso al
nacer y los defectos congénitos, y que la inanición
durante la gestación se asocia con un incremento
de dos a tres veces la incidencia de esquizofrenia
en los hijos.
11. Anemia durante el embarazo
( Primer trimestre del embarazo )
La falta de hierro es la causa más común de la
anemia, pero no es la única. También se puede
desarrollar anemia si no se toma la cantidad
suficiente de ácido fólico o vitamina B12.
La anemia es una de las complicaciones más
frecuentes durante el embarazo (la sufren hasta
en el 95% de las mujeres embarazadas) y es
causada por un descenso del hierro por debajo
de los valores normales. El hierro es esencial
para la producción de hemoglobina, la proteína
que se encuentra en los glóbulos rojos y que
lleva el oxígeno a otras células. Durante el
embarazo, la cantidad de sangre en el cuerpo
de la mujer aumenta hasta un 50 por ciento
más de lo usual. Por lo tanto, necesita más
hierro con el fin de producir más hemoglobina
para toda esa sangre adicional que se
suministrará al bebé y a la placenta.
El bebé cubre su necesidad de hierro tomando su
parte antes de que la madre tome la suya. Sin
embargo, las embarazadas que estén anémica
durante los dos primeros trimestres, corren más
riesgos de tener un parto prematuro o un bebé de
bajo peso
12. Déficit de Folatos
Los defectos del Tubo Neural
La deficiencia de folatos puede ser debida a diferentes causas:
a) ingesta inadecuada;
b) absorción deficiente;
c) aumento del consumo
d) alteraciones en su utilización.
Además de una dieta insuficiente hay otras situaciones en las que puede existir un déficit de folatos, como el alcoholismo o
determinadas enfermedades intestinales. Otra situación de déficit puede aparecer como consecuencia de interacciones
medicamentosas, al inhibirse la enzima metilen-tetrahidrofolato-reductasa
Durante el embarazo las necesidades maternas de folatos aumentan, dada la importancia de la síntesis de ácidos nucleicos y
proteínas durante la embriogénesis, así como la gran velocidad de crecimiento y desarrollo fetal durante los primeros meses de la
gestación.
Las cantidades diarias de folatos que una mujer adulta necesita son de 200 microgramos/día, mientras que en una mujer
gestante las necesidades ascienden a 400 microgramos/día7.
Los folatos de la comida se encuentran en forma de poliglutamatos, que deben ser convertidos a monoglutamatos en las primeras
porciones del intestino delgado. Los suplementos de ácido fólico sintético se encuentran en forma de monoglutamatos y ofrecen
por lo tanto una mejor biodisponibilidad que los folatos de fuentes naturales.
Aunque la mayoría de los DEFECTOS DEL TUBO NEURAL presentan un origen multifactorial, se ha podido demostrar que la
deficiencia del ácido fólico durante la etapa periconcepcional se correlaciona con la prevalencia de estos defectos. La evidencia
más convincente es la que demuestra una reducción de la recurrencia de estos defectos con el suplemento de ácido fólico
13. LOS DEFECTOS DEL TUBO NEURAL
Son defectos congénitos del cerebro, la columna vertebral y la médula espinal
La anencefalia es un defecto en la
formación del tubo neural del bebé nace
sin partes del encéfalo. Un bebé que nace
con anencefalia puede sobrevivir solo
algunas horas o días después del
nacimiento.
Fuentes: Mayo Clinic y otras fuente
La espina bífida es una afección
que afecta la columna vertebral
y suele ser evidente en el
nacimiento. Es un tipo de
defecto del tubo neural (DTN)
La encefalocele es un tipo de defecto de nacimiento raro del tubo neural
que afecta el encéfalo. El tubo neural es un canal estrecho que durante la
tercera y cuarta semana del embarazo se pliega y cierra a fin de formar el
encéfalo y la médula espinal. La administración de ácido fólico durante el
embarazo, el mantenimiento de una dieta equilibrada y el ceso de consumo
de sustancias como el alcohol, el tabaco y otras drogas reduce en gran
medida el riesgo de que el feto en desarrollo padezca encefalocele.
14. Embarazadas
vegetarianas
La alimentación vegetariana es una práctica cada vez más frecuente en la población.
Una dieta libre de carne animal puede ser beneficiosa ya que contiene un bajo aporte
de grasas saturadas, suelen incluir un mayor consumo de fibras y antioxidantes,
generan un efecto de menor constipación y estreñimiento, ayudan a prevenir la
obesidad y suelen ser cardioprotectores.
Pero este tipo de dietas también deben ser monitoreadas por especialistas en nutrición
mas en el embarazo, porque existe un mayor riesgo de sufrir carencias nutricionales
como: Hierro, Calcio, omega 3, vitamina B12, Proteínas.
Las legumbres, los cereales, las verduras o los frutos secos son una fuente de
proteínas. Pero, hay que saber cómo combinarlas y administrarlas para que no resulten
insuficientes. En los casos de embarazadas que lleven una vida vegetariana, será
necesaria la ingesta de suplementos.
Esta advertencia se debe a que en este grupo de mujeres es frecuente encontrar
menores concentraciones de estos nutrientes en comparación con embarazadas
omnívoras (que se alimenta de toda clase de sustancias orgánicas, tanto vegetales como animales).
Si la dieta es planeada y desarrollada con asesoramiento profesional para suplementar
los nutrientes considerados críticos en el embarazo, no presentan ningún riesgo.
LOS RIESGOS DE UNA MALA ALIMENTACIÓN EN EL
EMBARAZO
15. Datos que alarman
Para la Organización Mundial de la Salud, la malnutrición abarca la desnutrición, los desequilibrios de vitaminas o minerales, el
sobrepeso, la obesidad, y las enfermedades no transmisibles relacionadas con la alimentación. Según datos de la OMS de abril
de este año:
52 millones de niños menores de 5 años presentan emaciación (un adelgazamiento patológico), 17 millones padecen
emaciación grave y 155 millones sufren retraso del crecimiento. Además 41 millones tienen sobrepeso o son obesos.
Alrededor del 45% de las muertes de menores de 5 años tienen que ver con la desnutrición.
La mayoría de los casos de mortalidad infantil se registran en los países de ingresos bajos y medianos. Al mismo
tiempo, en esos mismos países están aumentando las tasas de sobrepeso y obesidad en la niñez.
Las mujeres, los lactantes, los niños y los adolescentes están particularmente expuestos a la malnutrición. Una buena
alimentación durante los primeros años de vida asegura beneficios a largo plazo.
Las consecuencias en el desarrollo y las problemáticas económicas, sociales y médicas que trae aparejada una dieta
desequilibrada son graves y duraderas. No sólo afecta a la persona sino también a las familias y la comunidad en la que
viven.
16. Datos que alarman
CONSECUENCIAS DE LA MALNUTRICIÓN
Existe amplia evidencia acerca de las consecuencias de la
desnutrición en niños y niñas en relación con sus
habilidades, el desarrollo cognitivo, la mortalidad y la
prevalencia de morbilidades a lo largo del ciclo de vida.
Desde hace unos años el análisis se ha centrado en
profundizar las consecuencias de la malnutrición, tanto por
déficit como por exceso.
El bajo peso al nacer, que también es un indicador de
desnutrición durante el embarazo, aumenta el riesgo de
muerte en los primeros meses y años de vida. Asimismo,
afecta las funciones de inmunidad durante la infancia,
aumentando el riesgo de enfermedad y, por lo tanto, las
posibilidades de morir a causa de diversas infecciones. La
desnutrición global, aguda y crónica estarían asociadas con
un aumento del riesgo de muerte por diarrea, neumonía y
sarampión (Black y otros, 2013). El bajo peso al nacer y la
desnutrición durante la niñez son, además, factores de
riesgo para el desarrollo de enfermedades no transmisibles
como la diabetes y las enfermedades cardiovasculares.
17. En cada etapa de sus vidas, desde la gestación en el vientre materno hasta la adolescencia, los niños tienen
necesidades nutricionales específicas.
Los niños de todas las edades partiendo por la dieta que llevan las madres no tienen una alimentación
suficientemente rica en nutrientes o variada y consumen demasiada azúcar, sal y grasa.
Independientemente de su edad, esta alimentación puede exponerlos a una o más formas de malnutrición: retraso en
el crecimiento, emaciación (adelgazamiento patológico Perdida de masa muscular de un 10%), hambre oculta (se
produce cuando la calidad de los alimentos que comemos no cumple con nuestras necesidades de nutrientes) y
sobrepeso u obesidad.
Por ello es tan importante una buena alimentación e ingesta de macronutrientes desde el inicio del embarazo
ALIMENTAR A LOS NIÑOS PARA TODA LA VIDA »
Conclusión
Niños, alimentos y nutrición – UNICEF https://www.unicef.org