Este documento discute la importancia de la investigación y comunicación para intercambiar información y generar conocimiento de manera participativa y multidisciplinaria. Señala que la persona que vive y siente es la unidad principal de aprendizaje, mientras que el investigador y el conocimiento también aprenden a través de la toma de decisiones y los cambios. Finalmente, enfatiza la importancia del lenguaje y las redes tecnológicas para difundir estrategias de comunicación enfocadas en sectores específicos.