2. Blanqueando dinero.
Un coleccionista posee mil monedas de plata que
desea limpiar. Con el fin de lograrlo acude a una
droguería para comprar tanto líquido limpiador
cuanto fuere necesario. - ¿Cuánto dinero he de gastar
para limpiar mil monedas de plata? - preguntó. - Eso
le costará doscientas cincuenta monedas de plata -
contestó el tendero.- Bueno, entonces ya no puedo
limpiarlas todas - replicó el coleccionista. Tras pagar
una cierta cantidad de monedas obtuvo todo el
líquido que necesitaba para limpiar las restantes
monedas sin que sobrase nada de líquido.
¿Cuántas monedas de plata, ya limpias, tiene ahora el
coleccionista?
3. Orden y caos
Blanca es una niña muy cuidadosa a la que le
gusta tener todo ordenadito. Es capaz de
ordenar el salón en dos horas. Segismundo es un
niño muy despreocupado que todo deja
desordenado. Puede desordenar el salón en tres
horas. Un día coincidieron en el salón, que
estaba totalmente desordenado, y mientras
Blanca se puso a ordenar Segismundo se dedicó
a deshacer el orden.
¿Cuánto tiempo tardó Blanca en ordenar todo el
salón en aquella extraña ocasión?
4. Dos hombres y un destino.
Rómulo y Remo son dos gemelos que van al colegio
en autobús, ya que éste es diez veces más rápido que
ellos. En la calle donde viven hay dos paradas de la
misma línea de autobuses y, aunque viven
juntos, Rómulo siempre sale hacia la parada del
norte, que es la más cercana, y Remo lo hace a la vez
hacia la parada del sur, en la misma dirección que el
autobús. Curiosamente siempre llegan al colegio en el
mismo autobús. Si a Rómulo le cuesta nueve minutos
llegar a su parada,
¿cuánto tiempo tarda Remo en llegar a la suya?
5. Nervios templados.
Aquella mañana de primavera Cristina se
asomaba por la ventana para ver el
termómetro que estaba colgado en el
exterior del edificio. - ¡Mira, Pedro! - exclamó
- ¡Hoy hace más calor de lo esperado! -
Tranquilízate, querida - dijo Pedro - ese
termómetro está graduado en la escala
Celsius y no en Fahrenheit.
¿Qué tal tiempo hacía realmente?
6. Me río de Janeiro
Una tarde Janeiro remó en barca desde su
pueblo hasta la villa vecina y después regresó
otra vez hasta su pueblo. El río estaba quieto
como si de un lago se tratase. Al día siguiente
repitió el mismo recorrido, pero esta vez el río
bajaba con cierta velocidad, así que primero
tuvo que remar contra corriente pero durante el
regreso remaba a favor.
¿Empleó más, menos o el mismo tiempo que el
día anterior en dar su acostumbrado paseo en
barca?
7. La ley mosaica
Godofredo es un artista mañoso que se gana la vida construyendo mosaicos.
En una ocasión recibió un encargo de la Asociación de Amigos del
Rectángulo, cuyo presidente, don Angulo Rectillo, le explicó: "Necesitamos
un gran mosaico para nuestro salón de actos. Tiene que estar construido por
estas piezas cuadradas de diamante, todas del mismo tamaño, que
guardamos en este baúl, sin que sobre ninguna porque nos han costado muy
caras. Además, el mosaico ha de tener una forma perfectamente rectangular
y no deberá haber ningún hueco en su interior, tal como exigen las normas
de la institución". Godofredo comenzó inmediatamente a realizar el
mosaico. Primeramente decidió hacerlo con 20 filas de facetas, pero una vez
terminado observó que faltaba una para completar el rectángulo. Probó de
nuevo organizándolo en 19 filas de facetas. De nuevo necesitaba una faceta
más para completar el rectángulo. Siguió ensayando con 18 filas, 17, 16... E
incluso llegó a disponer el mosaico en 2 filas. Pero la historia terminaba
siempre igual: faltando una pieza para completar la obra. Por fin realizó el
mosaico alineando todas las facetas en una sola fila. Era un mosaico raro
pero estaba terminado.
Averigüe el lector cuántas piezas contenía el baúl.