2. SEGURIDAD VIAL
La seguridad vial consiste en la prevención de accidentes
de transito o la minimización de sus efectos,
especialmente para la vida y la salud de las personas,
cuando tuviera lugar un hecho no deseado de transito.
También se refiere a las tecnologías empleadas para
dicho fin en cualquier medio de desplazamiento terrestre
(ómnibus, camión, automóvil, motocicleta, bicicleta y a
pie).
3. Las normas reguladoras de tránsito y la responsabilidad de
los usuarios de la vía pública componen el principal punto
en la seguridad vial. Sin una organización por parte del
estado, con el apoyo de reglamentaciones para el tránsito y
sin la moderación de las conductas humanas (educación
vial) particulares o colectivas, no es posible lograr un
óptimo resultado. Autoridades y promotores voluntarios
deben llevar a cabo en forma permanente campañas,
programas y cursos de seguridad y educación vial, en los
que se debe promover:
.La cortesía y precaución en la conducción de vehículos.
.El respeto al agente de vialidad.
.La protección a los peatones, personas con discapacidad y
ciclistas.
.La prevención de accidentes.
.El uso racional del automóvil particular.
4. SEGURIDAD ACTIVA
Es aquello que asiste al conductor para evitar un posible
accidente interviniendo de manera permanente durante la
circulación, algunos ejemplos que podemos citar son:
Sistema de retrovisores: Permite al conductor, la visibilidad
posterior del vehículo y la circulación que ocurre detrás,
para ello se cuenta con: espejos, eliminación de puntos
ciegos, y otras ayudas de control como radares,
comunicación de seguridad inalámbrica del vehículo y visión
nocturna.
Sistemas de suspensión: La suspensión tiene una labor muy
relevante en la seguridad activa. Sirve para dar comodidad
al vehículo y sus ocupantes, disminuyendo la transmisión de
irregularidades del terreno al habitáculo y favoreciendo el
agarre del automóvil al suelo y, por tanto, su estabilidad.
Los amortiguadores son los mecanismos que proporcionan
seguridad y confort durante la conducción, aportando
estabilidad al vehículo.
5. Los sistemas más empleados en automóviles de
uso particular, son el mecánico y el hidráulico. Los
frenos pueden ser de tambor o de disco, aunque
algunos fabricantes combinan ambos montando
los frenos de disco en las ruedas delanteras y los
de tambor en las traseras.
La fuerza de frenado debe asegurar una rápida
detención de las ruedas pero sin llegar a
bloquearlas. Para que eso sea posible es
fundamental tener en cuenta las condiciones de la
vía y el estado general de los mecanismos del
vehículo (neumáticos, suspensiones, etc.).
Se pueden encontrar distintos tipos de mejoras
que optimizan la frenada y garantizan la
gobernabilidad de la dirección en condiciones
críticas. Entre eficientes y muy eficientes:
ABS (Antilock, Brake, System: sistema anti-
bloqueo de frenos) con EBV (reparto electrónico
de frenada). ESP (control de estabilidad), con EDL
(control de tracción).
6. Muchos conductores que siguen la misma ruta cada día lo hacen sin
utilizar el área del cerebro donde tiene lugar el pensamiento consciente,
según afirma el científico especialista en tráfico Michael Schrekkenberg,
de la Universidad de Duisburgo-Essen (Alemania). Como conocen el
camino, los conductores se ocupan de otras cosas en vez de concentrarse
en el tráfico; en consecuencia, tardan más en advertir los peligros. Por
esta razón, se les recomienda recordar continuamente la necesidad de
estar alerta y no distraerse de la carretera. No solamente se debe tener
en cuenta que se conoce el camino sino también el clima ya que no es lo
mismo conducir en un día soleado a conducir en un fuerte aguacero o
sobre una vía congelada.