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1. LA SEGUNDA MUERTE ES LA
DESTRUCCIÓN TOTAL DEL ALMA
Por Erick Vivanco
©Sana Doctrina Ministerio de Restauración Bíblica
Volviendo a la senda antigua...
Nota: En este estudió la palabra “Elohim” que es “El Poderoso”, reemplaza a la palabra “Dios”
Introducción:
Según la apreciación de la doctrina de la
inmortalidad del alma, el ser humano
condenado al lago de fuego, no dejara nunca
de sufrir el tormento de las llamas y el lloro
por el dolor que sentirán en el lago de fuego,
es decir según esta apreciación doctrinal
distinta a las escrituras, los pecadores sufrirán
por la eternidad en llamas de fuego y dolor.
Sin embargo la palabra de Elohim en el libro
de revelaciones, nos enseña que los
condenados tendrán parte en la segunda muerte, es decir, ellos resucitaran
para recibir el edicto final de sus condenas, luego recibirán el pago de sus
pecados en justa retribución, en llamas de de fuego, dolor, llanto y crujir de
dientes, todo esto según hayan sido sus condenas, para finalmente ser
destruidos en alma y cuerpo, y así morir para nunca mas volver a existir, esa
es la segunda muerte. Desde luego esto se encuentra registrado en las
escrituras, veamos:
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2. La condenación final y el tormento para los condenados no inscritos en el libro
de la vida, será la causal de la destrucción total de sus almas y de sus
cuerpos, es decir estos dejaran de existir, esto es la muerte segunda. Veamos
lo que las escrituras enseñan acerca del que el alma será destruida en el lago de
fuego:
“Y no temáis a los que matan el cuerpo, mas el alma no pueden matar; temed
más bien a aquel que puede destruir el alma y el cuerpo en el infierno
(Gehena)” (Mateo 10:28)
Este pasaje es usado muchas veces para decir que el alma es inmortal, pues se
dice que el hombre puede matar el cuerpo pero el alma no. Sin embargo este
pasaje esta diciendo que los hombres si pueden quitar la vida, es decir matar.
Pero la vida o alma no la pueden destruir, ya que solo Elohm si puede destruir
el cuerpo y el alma en el lago de fuego, esa es la segunda muerte. El
discípulo Lucas también nos da otra versión sobre este polémico pasaje de
Mateo, veamos, de seguro nos aclarara más el panorama.
“Pero os enseñaré a quién debéis temer: Temed a aquel que después de haber
quitado la vida, tiene poder de echar en el infierno (Gehena); sí, os digo, a éste
temed” (Lucas 12:5)
¿Le ha quedado mas claro? Es decir, según este pasaje el hombre si puede
quitar la vida, es decir matar y por consecuencia el alma queda muerta, pero no
puede destruirla, porque el único que tiene el poder para destruir el alma es
Elohim y lo hará a los condenados en el episodio que la Biblia llama la segunda
muerte. Sin embargo para explicar mejor el pasaje de Mateo debemos hacernos
la siguiente pregunta. ¿Por qué el Mesías dice que el alma no la pueden
matar los hombres? La respuesta es muy sencilla, y es porque él volverá a
dar vida a las almas en el día de la resurrección, unos resucitaran para vida y
otros para condenación, ¿Cuál condenación? La de no volver a existir mas, y
ser destruidos con tormento de acuerdo a la gravedad de los pecados, para
siempre en el lago de fuego en cuerpo y alma. A diferencia de los salvados lo
cuales volverán a vivir para ya no morir nunca mas, sino que para recibir la
inmortalidad en cuerpo y alma, esta es la vida eterna (1Corintios 15:53-54). Un
pasaje que nos explica esto es el siguiente:
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3. “Mas los que fueren tenidos por dignos de alcanzar aquel siglo y la
resurrección de entre los muertos, ni se casan, ni se dan en casamiento.
Porque no pueden ya más morir, pues son iguales a los ángeles, y son hijos
de Elohim, al ser hijos de la resurrección” (Lucas.20:35-37).
¿Lo puede ver usted?, Los hijos del Altísimo que serán tenidos por dignos de ser
resucitados, ¡NO PUEDEN YA MAS MORIR!. Pues han recibido la vida eterna.
¿Pero que sucederá con los que son resucitados para condenación? Estos, a
diferencia de los salvos, ¡SI VOLVERÁN A MORIR! Es decir, participaran de la
condenación, serán arrojados en cuerpo y alma al lago de fuego, donde serán
atormentados, y en la misma condición serán destruidos para siempre y por lo
tanto volverán a morir, ¡ESTA ES LA SEGUNDA MUERTE!. Leamos a
continuación:
“Pero los otros muertos no volvieron a vivir hasta que se cumplieron mil años.
Esta es la primera resurrección. Bienaventurado y santo el que tiene parte en
la primera resurrección; la segunda muerte no tiene potestad sobre éstos,
sino que serán sacerdotes de Elohim y del Mesias, y reinarán con él mil años”
(Apocalipsis 20:5-6)
En este pasaje vemos que el los hijos del Altísimo que vendrán a reinar con el
Mesías durante mil años, son bienaventurados y santos, por que al ser santos
y bienaventurados, la segunda muerte no tiene potestad sobre ellos y
vivirán para siempre. Es decir, por consecuencia la segunda muerte si tiene
parte sobre los condenados, esto quiere decir que serán destruidos en cuerpo y
alma y nunca más volverán a existir. Sigamos leyendo el libro de revelaciones:
“Y vi un gran trono blanco y al que estaba sentado en él, de delante del cual
huyeron la tierra y el cielo, y ningún lugar se encontró para ellos. Y vi a los
muertos, grandes y pequeños, de pie ante Elohim; y los libros fueron abiertos, y
otro libro fue abierto, el cual es el libro de la vida; y fueron juzgados los
muertos por las cosas que estaban escritas en los libros, según sus obras. Y el
mar entregó los muertos que había en él; y la muerte y el Hades entregaron
los muertos que había en ellos; y fueron juzgados cada uno según sus obras.
Y la muerte y el Hades fueron lanzados al lago de fuego. Esta es la muerte
segunda. Y el que no se halló inscrito en el libro de la vida fue lanzado al
lago de fuego” (Apocalipsis 20:11)
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4. Como usted puede leer, el destinos de los pecadores será medido y juzgado,
una vez que los libros sean abiertos, en ese momento sabremos quienes han de
ser condenados al lago de fuego y a su tormento destructor. Aquí no se hace
ninguna mención referente a que un supuesto infierno o lugar de tormento
existiera antes del juicio. Lo que si dice el pasaje, es que el Sheol o el Hades
y la muerte, entregaron a sus muertos para ser juzgados, pues ellos los
poseían, es decir, los muertos estaban en el Hades o Sheol “Lugar donde
habitan los muertos”, y estaban en la muerte, ya que se encontraban en la
condición de muertos. Notemos, que también el Hades (Sheol) y la muerte serán
arrojados al lago de fuego, por la sencilla y simple razón que ya nunca más de
entre los resucitados y salvos, volverá a existir la muerte y por ende tampoco
volverá a existir el lugar donde habitan los muertos.
Ahora bien cabe decir que los pecadores no serán de inmediato eliminados,
sino que serán atormentados en llamas de fuego literales, las cuales de
acuerdo a la gravedad de los pecados que hayan cometido los condenados
atormentaran a estos hasta ser destruidos en cuerpo y alma por la eternidad. Es
decir el castigo es eterno en el sentido de que no volverán a vivir nunca más
después de ser atormentados y seguidamente destruidos. Eso es lo que quiere
decir el Mesías, cuando el cita las siguientes palabras:
“E irán éstos al castigo eterno, y los justos a la vida eterna” (Mateo 25:46)
El Apóstol Pablo, también creía en que los muertos irían a eterna perdición, es
decir, nunca más serán hallados, pues serán destruidos por los siglos de los
siglos, no volverán a existir, ese es el correcto sentido de las palabras del
Apóstol.
“Porque es justo delante de Elohim pagar con tribulación a los que os
atribulan, y a vosotros que sois atribulados, daros reposo con nosotros, cuando
se manifieste el Señor Yeshua desde el cielo con los ángeles de su poder, en
llama de fuego, para dar retribución a los que no conocieron a Elohim, ni
obedecen al evangelio de nuestro Señor Yeshua; los cuales sufrirán pena de
eterna perdición, excluidos de la presencia del Señor y de la gloria de su
poder” (2Tesalonicenses.1:6-9).
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5. La palabra de Elohim en la Torah y los profetas, también nos enseña como es
que Elohim destruirá a los impíos, y no les dejara raíz ni rama, sino que nunca
mas volverán a existir, como lo he repetido hasta el cansancio. Veamos algunos
pasajes del antiguo pacto, el cual es absolutamente inspirado por el Eterno y
vigente para todos los que guardamos los mandamientos del Altísimo por el
poder de su espíritu.
“Porque he aquí, viene el día ardiente como un horno, y todos los soberbios y
todos los que hacen maldad serán estopa; aquel día que vendrá los abrasará,
ha dicho YHWH de los ejércitos, y no les dejará ni raíz ni rama. Más a vosotros
los que teméis mi nombre, nacerá el Sol de justicia, y en sus alas traerá
salvación; y saldréis, y saltaréis como becerros de la manada. Hollaréis a los
malos, los cuales serán ceniza bajo las plantas de vuestros pies, en el día en
que yo actúe, ha dicho YHWH de los ejércitos” (Malaquias 4:1-3).
¿Lo puede ver usted? La profecía dada al profeta Malaquías, dice claramente,
que el Soberano y Altísimo Elohim, a los impíos y condenados que rechazaron el
evangelio y que no se encontraban inscritos en el libro de la vida, no les dejara
ni raíz ni rama, además luego termina diciendo este pasaje, que serán ceniza.
Desde este punto de vista absolutamente bíblico, entendemos que los
condenados serán destruidos por el Creador en el lago de fuego y no que
vivirán eternamente siendo atormentados, pues si fuera así, ya no existiría la
segunda muerte. Pues esta, denota la inexistencia de los condenados, no su
eternidad. Veamos otros pasajes:
“Como Sodoma y Gomorra y las ciudades vecinas, las cuales de la misma
manera que aquéllos, habiendo fornicado e ido en pos de vicios contra
naturaleza, fueron puestas por ejemplo, sufriendo el castigo del fuego
eterno” (Judas 1:7)
La palabra de Elohim, en la epístola de Judas, también nos enseña que la
destrucción de los impíos habitantes de Sodoma, Gomorra y las ciudades
vecinas, fueron destruidas para ser ejemplos del castigo del fuego eterno.
Note usted que el pasaje menciona las palabras “castigo del fuego eterno”. Es
decir deberíamos pensar que aquel fuego que extermino aquellas ciudades,
aun existe y aun esta en medio de nosotros. Sin embargo ese fuego hoy no
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6. existe, se esfumo y ya es ceniza. ¿Qué nos quiere decir esto? Lo que el Apóstol
Judas nos esta enseñando, es que ese fuego es eterno en el sentido de que el
castigo y la exterminación que provoca ese fuego, es eterna para los impíos,
pues estos dejaran de existir, pues tendrán parte en la segunda muerte, cuando
sean arrojados vivos al lago de fuego.
Por otra parte también tenemos los pasajes donde el mismo Mesías Yeshua dice
que los impíos irán a parar a un lugar donde el fuego nunca se apaga y el
gusano de ellos nunca muere. Veamos:
“Si tu mano te fuere ocasión de caer, córtala; mejor te es entrar en la vida
manco, que teniendo dos manos ir al infierno (gehena), al fuego que no
puede ser apagado, donde el gusano de ellos no muere, y el fuego nunca se
apaga. Y si tu pie te fuere ocasión de caer, córtalo; mejor te es entrar a la vida
cojo, que teniendo dos pies ser echado en el infierno (gehena), al fuego que no
puede ser apagado, donde el gusano de ellos no muere, y el fuego nunca se
apaga. Y si tu ojo te fuere ocasión de caer, sácalo; mejor te es entrar en el reino
de Elohim con un ojo, que teniendo dos ojos ser echado al infierno (gehena),
donde el gusano de ellos no muere, y el fuego nunca se apaga”. (Marco 9:43-
48).
En este pasaje el Mesías nos dice que el fuego que atormentara a los
condenados nunca se apagara. Quiero dar una explicación a esto, pero no voy a
ser dogmático solo explicare cuales son las dos posturas mas correctas. Si
pensamos en que este fuego nunca se apagara, aquello no cambia en nada el
destino de los pecadores, el cual sin ninguna duda será la destrucción en cuerpo
y alma y por ende la segunda muerte, el hecho de que este fuego no se apague
y el gusano de ellos no muera, no quiere decir que los impíos no vayan a morir,
pues el pasaje dice que el fuego no se apaga, y que los gusanos son los que no
mueren, por lo tanto exceptúa a los condenados los cuales si morirán
eternamente.
Por otra parte tenemos la siguiente explicación. Tal como las ciudades de
Sodoma y Gomorra fueron puestas por ejemplo del fuego eterno, así también
sucederá con los impíos, pues ese fuego eterno que describe Judas es eterno
en el sentido de ellos fueron eliminados para siempre de la tierra, no volvieron
existir dichas ciudades, los mismo puede ocurrir con los impíos en lago de fuego,
pues ese fuego eterno los eliminara para siempre y nunca mas serán hallados.
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7. Note usted que se fuego eterno de Sodoma y Gomorra ya se extinguió, se
esfumo, no esta entre nosotros, por lo tanto no es eterno en el sentido literal,
sino que en el sentido de que la destrucción que causa será eterna para los
destruidos, pues no volverán a existir nunca mas. Es por esto que no quiero ser
dogmático, pues las dos posturas son muy posibles, y las dos no cambian en
nada el real destino de muerte de los perdidos.
Ahora bien, veamos que la palabra de Elohim enseña que los condenados serán
sometidos a un castigo y tormento que dependerá de las condenas que estos
reciban. Pues no puede ser atormentados de igual forma todos los seres
humanos condenados, pues es evidente que unos no hicieron tanto mal como
otros, por ejemplo; Un asesino y violador, no recibirá la misma condena que un
incrédulo, o aquel que asesino una persona y no se arrepintió de aquello, no
recibirá la misma condena que un asesino de millones de personas, que
tampoco se arrepintió. Es por eso que el juicio de Elohim es justo. Las escrituras
dicen:
“Entonces comenzó a reconvenir a las ciudades en las cuales había hecho
muchos de sus milagros, porque no se habían arrepentido, diciendo: Ay de
ti, Corazín! Ay de ti, Betsaida! Porque si en Tiro y en Sidón se hubieran
hecho los milagros que han sido hechos en vosotras, tiempo ha que se hubieran
arrepentido en cilicio y en ceniza. Por tanto os digo que en el día del juicio,
será más tolerable el castigo para Tiro y para Sidón, que para vosotras. Y
tú, Capernaum, que eres levantada hasta el cielo, hasta el Hades serás
abatida; porque si en Sodoma se hubieran hecho los milagros que han sido
hechos en ti, habría permanecido hasta el día de hoy. Por tanto os digo que
en el día del juicio, será más tolerable el castigo para la tierra de Sodoma,
que para ti. (Mateo 11:20-24)
En este pasaje vemos que las condenas que se emitirán en el día del Juicio, no
serán iguales para todos los condenados. Es por eso que el Mesías dice; Que
el castigo en el día del Juicio será más tolerable para Tiro y Sidon, que para las
ciudades de Corazin y Betsaida en las cuales el Mesías hizo muchos milagros,
pero aun así no creyeron y no se arrepintieron de sus pecados. Lo mismo
ocurrirá con Capernaum, pues su condena será mayor que la de Gomorra en el
día del juicio, pues si en Gomorra se hubieran hecho los milagros que el Mesías
hizo en Capernaum, ya habrían se arrepentido en polvo y ceniza. Es decir, las
condenas de los que no se encontraron inscritos en libro de la vida, serán en
base al mal que estos hayan practicado en la tierra, el tormento, el dolor, el
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8. llanto y el crujir de dientes, no será a todos por igual, pues como ya hemos dicho
dependerá de las condenas de cada quien.
Luego que los condenados sean atormentados, según les corresponda por el
justo juicio del Altísimo, el evangelio enseña que estos serán destruidos en
cuerpo y alma (Mateo 10:28). Y las escrituras en el antiguo pacto también
enseñan que los malignos serán destruidos. Veamos:
“Porque los malignos serán destruidos, Pero los que esperan en Yahweh, ellos
heredarán la tierra” (Salmo 37:9)
“Porque los benditos de él heredarán la tierra; Y los malditos de él serán
destruidos” (Salmo 37:22)
“Mas los transgresores serán todos a una destruidos; La posteridad de los
impíos será extinguida” (Salmo 37:34)
“Cuando brotan los impíos como la hierba, Y florecen todos los que hacen
iniquidad, Es para ser destruidos eternamente” (Salmo 92:7)
“Porque el violento será acabado, y el escarnecedor será consumido; serán
destruidos todos los que se desvelan para hacer iniquidad” (Isaías 29:20)
“Y se airaron las naciones, y tu ira ha venido, y el tiempo de juzgar a los
muertos, y de dar el galardón a tus siervos los profetas, a los santos, y a los que
temen tu nombre, a los pequeños y a los grandes, y de destruir a los que
destruyen la tierra” (Apo.11:18)
¿Lo puede usted ver? Cuando la Biblia enseña que Elohim destruirá algo, no
esta enseñando que lo dejara con vida, sino que, ya no volverá a existir tal
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9. cosa. Es por eso que el concepto de destrucción esta falsificado en la doctrina
de la inmortalidad del alma, pues se piensa que los condenados sufrirán
eternamente, al pensar en aquello, se deja de lado absolutamente el concepto
de destrucción real y bíblico, y además se contradice absolutamente lo que
dice el espíritu en revelaciones, donde se explica que el lago de fuego es la
segunda muerte, es decir la inexistencia de los impíos para siempre. Pondré un
simple ejemplo; “Si usted toma un bate y comienza dar golpes a un televisor
y usted destruye tal aparato, al punto de solo dejar minúsculos pedazos”
¿Podríamos pensar que luego de ser destruido ese televisor, es aun un
servible? ¿Si ese televisor es ahora solo minúsculos pedazos de material,
podríamos pensar que tal aparato es eterno? ¡Claro que no! Por que usted ha
destruido ese televisor, por lo tanto ese aparato propiamente tal, nunca mas
volverá a existir. ¡Lo mismo ocurre con el real sentido de la palabra destrucción
en la Biblia, los impíos serán destruidos, y no volverán a existir nunca mas, pues
tendrán parte en la segunda muerte. Recordemos que la paga del pecado es
muerte:
“Porque la paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Elohim es vida eterna
en el Mesías Yeshua Señor nuestro” (Romanos 6:23)
Si los hombres no se arrepienten, perecerán, es decir morirán todos
eternamente, eso es, lo que nos enseña el Mesías Yeshua en las siguientes
palabras:
“En este mismo tiempo estaban allí algunos que le contaban acerca de los
galileos cuya sangre Pilato había mezclado con los sacrificios de ellos.
Respondiendo Yeshua, les dijo: ¿Pensáis que estos galileos, porque padecieron
tales cosas, eran más pecadores que todos los galileos? Os digo: No; antes si
no os arrepentís, todos pereceréis igualmente. O aquellos dieciocho sobre
los cuales cayó la torre en Siloé, y los mató, ¿pensáis que eran más culpables
que todos los hombres que habitan en Jerusalén? Os digo: No; antes si no os
arrepentís, todos pereceréis igualmente. (Lucas 13:3-5)
Algunos dicen que esta destrucción no será con dolor ni con sufrimiento, sin
embargo las palabras escritas en los evangelios, dictan algo muy distinto, pues
ellas señalan que si habrá fuego literal que quemara los cuerpos de los
condenados, los cuales sufrirán y lloraran, sus dientes crujirán, o sea el dolor
que se experimentaran es destructivo y muy grande, producto de esto, ellos
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10. luego de haber recibido la justa paga, no volverán mas a existir. Veamos
algunos pasajes, que demuestran el gran dolor y tormento que experimentaran
los condenados.
“De manera que como se arranca la cizaña, y se quema en el fuego, así será en
el fin de este siglo. Enviará el Hijo del Hombre a sus ángeles, y recogerán de su
reino a todos los que sirven de tropiezo, y a los que hacen iniquidad, y los
echarán en el horno de fuego; allí será el lloro y el crujir de dientes.
(Mateo.13:40 -42),
“Asimismo el reino de los cielos es semejante a una red, que echada en el mar,
recoge de toda clase de peces; y una vez llena, la sacan a la orilla; y sentados,
recogen lo bueno en cestas, y lo malo echan fuera. Así será al fin del siglo:
saldrán los ángeles, y apartarán a los malos de entre los justos, y los
echarán en el horno de fuego; allí será el lloro y el crujir de dientes” (Mateo
13:47-50)
¡Como usted puede ver, el tormento de los condenados será tremendamente
doloroso!, al punto de la destrucción eterna. Las palabras del Mesías; “Allí será
el lloro y el crujir de dientes” Dictan el tremendo dolor que experimentaran los
condenados, los cuales lloraran amargamente, serán vergüenza para todos los
salvados, sus cadáveres serán testimonio de su mal y de la ira del Elohim
Todopoderoso.
“Y saldrán, y verán los cadáveres de los hombres que se rebelaron contra mí;
porque su gusano nunca morirá, ni su fuego se apagará, y serán abominables
a todo hombre” (Isaías 66:24)
Es decir fuera de la ciudad y del gobierno del Altísimo, estará ese lago de fuego,
donde estarán los cadáveres de los impíos, sus cuerpos estarán destruidos y
sus almas muertas, pues han sido participantes de la segunda muerte. La
podredumbre de sus cuerpos será devorada por los gusanos, pues sus gusanos
no mueren, las llamas de aquel fuego no se apagan, pues son eternas, ¡Los que
si dejaran de existir será los condenados! Pues estos serán destruidos en
cuerpo y alma, (Mateo 10:28) ¡ESA ES LA SEGUNDA MUERTE!.
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11. “Pero los cobardes e incrédulos, los abominables y homicidas, los fornicarios y
hechiceros, los idólatras y todos los mentirosos tendrán su parte en el lago
que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda” (Apocalipsis 21:8)
“Bienaventurados los que lavan sus ropas, para tener derecho al árbol de la
vida, y para entrar por las puertas en la ciudad. Mas los perros estarán fuera,
y los hechiceros, los fornicarios, los homicidas, los idólatras, y todo aquel que
ama y hace mentira” (Apocalipsis 22:14-15)
Tal como dice el pasaje de Isaías 66; 24, los salvos verán a las afueras de la
cuidad santa del Altísimo, los cadáveres de las personas condenadas en lago de
fuego, las llamas de aquel lugar no se pagan y los gusanos de los cuerpos
podridos no mueren. Es lo mismo que nos dice el libro de revelaciones; “Mas
los perros estarán fuera, y los hechiceros, los fornicarios, los homicidas,
los idólatras, y todo aquel que ama y hace mentira”.
Cuando los salvos vean el abominable ejemplo de los impíos, tendrán vergüenza
perpetua por ellos, es decir los condenados serán aborrecibles por la eternidad,
es por eso que el pasaje de Daniel dice lo siguiente:
“Y muchos de los que duermen en el polvo de la tierra serán despertados, unos
para vida eterna, y otros para vergüenza y confusión perpetua” (Daniel 12:2)
La doctrina de la inmortalidad del alma, mal interpreta este pasaje, diciendo que
los impíos tendrán sufrimiento eterno, es decir no morirán, sino que
experimentaran vivos por la eternidad el sufrimiento y el tormento. Sin embargo,
lo que nos quiere decir este pasaje es que cuando lo injustos sean condenados
tendrán una vergüenza tremenda pues sus pecados serán descubiertos, y todo
lo que hicieron en tinieblas saldrá a la luz, es por eso que el texto dice que serán
despertados para vergüenza. El pasaje dice también que esto les traerá
confusión perpetua, la palabra que se usa en el hebreo es; “deraon” Esta
palabra denota, aversión, abominable, confusión.
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12. H1860
‫ ְ ָא‬deraón; o
‫ר‬
‫ ֵ ָא‬deraón; de una raíz que no se usa (sign. repulsar); obj. de aversión:-
‫ר‬
abominable, confusión.
Como podemos ver el diccionario Strong español, nos da como primer y
segundo significado de aquella palabra; “aversión y abominable” ¿Qué nos
quiere decir esto? No que los impíos vivirán sufriendo en confusión eternamente,
sino que serán eternamente abominables, pues rechazaron servir y amar a
Elohim, antes se encendieron es sus concupiscencias y rechazaron la verdad
del Altísimo. Esto nos aclara más el panorama, pues los impíos si morirán
eternamente, es decir, participaran en la segunda muerte, y se tendrá en
memoria abominable de ellos, pues sus cadáveres estarán afuera de la gran
ciudad ardiendo en el lago de fuego.
Otras versiones bíblicas dicen en relación a este pasaje:
(Versión Palabra de Dios para Todos) “La gran cantidad de muertos que
descansa bajo tierra se levantará. Algunos se irán a disfrutar de la vida eterna, y
otros pasarán vergüenza y serán despreciados por siempre”
(Versión Nueva Biblia de Los Hispanos) Y muchos de los que duermen en el
polvo de la tierra despertarán, unos para la vida eterna, y otros para la
ignominia, para el desprecio eterno.
(Version La Biblia de las Ameritas) Y muchos de los que duermen en el polvo
de la tierra despertarán, unos para la vida eterna, y otros para la ignominia,
para el desprecio eterno.
Por otra parte, es muy importante decir, que el pasaje en su principio nos dice
una tremenda verdad, y esta es que; “Muchos serán despertados para vida
ETERNA”. Es decir, si unos son despertados para vida eterna, por
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13. consecuencia lógica los otros son despertados para morir eternamente. No se
nos olvide que solo los hijos de Elohim, son hijo de la resurrección para vida
eterna, en cambio los hijos del maligno, son hijos de la resurrección que es para
muerte eterna. (Lucas.20:35-37).
Por ultimo es importante decir, que una vez que los injusto e impíos sean
condenados, luego arrojados vivos al lago de fuego, atormentados,
seguidamente destruidos en cuerpo y alma, para participar de la segunda
muerte. Luego que todo esto se haya cumplido, ¡La misma muerte morirá! ¡Y su
muerte será el mismo YHWH! Es decir, él no la dejara existir nunca mas pues
sus hijos nunca mas morirán. (Lucas 20:35-37). Eso es lo que nos dice la
profecía en el libro de Óseas y es lo que nos enseña el Apóstol Pablo/Shaul,
veamos.
“De la mano del Seol los redimiré, los libraré de la muerte. Oh muerte, yo seré
tu muerte; y seré tu destrucción, oh Seol; la compasión será escondida de mi
vista” (Oseas 13:14)
“Porque preciso es que él reine hasta que haya puesto a todos sus enemigos
debajo de sus pies. Y el postrer enemigo que será destruido es la muerte”
(1Corintios15:25-26)
Por lo tanto, como ya no habrá mas muerte, la muerte misma morirá y no tendrá
poder sobre ningún ser vivo. Por que el Mismo Elohim eterno y
TODOPODEROSO la vencerá y será su muerte. La muerte será el último
enemigo de Elohim a vencer y lo hará una vez que todos los impíos estén
condenados, destruidos en cuerpo y alma y muertos en el lago de fuego.
Conclusión
Los impíos y condenados al lago de fuego serán destruidos en cuerpo y alma en
el lago de fuego. ESTA ES LA SEGUNDA MUERTE. Estos sufrirán el tormento
en llamas de fuego literales, en llanto, y en crujir de dientes, de acuerdo a la
gravedad de sus condenas.
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14. El castigo eterno que estos sufrirán, explica que estos serán eternamente
eliminados, pues es eso lo que enseña la profecía, pues el Altísimo dice; “NO
LES DEJARE RAÍZ NI RAMA”.
Cuando los impíos sean absolutamente exterminados, el postrer o ultimo
enemigo del Altísimo que es la muerte, también será destruido para siempre,
pues el mismo dice: “MUERTE YO SERÉ TU MUERTE”.
Por lo tanto, LA SEGUNDA MUERTE ES LA DESTRUCCIÓN TOTAL DEL
CUERPO Y DEL ALMA. Esta no denota un sufrimiento eterno, sino que el
castigo eterno de la vergüenza y el desprecio eterno, pues al rechazar y no
obedecer al Santo de Israel, no volverán nunca más a vivir, y se tendrá memoria
de ellos para siempre pero con desprecio, pues serán vergüenza de los
hombres.
“Pero los cobardes e incrédulos, los abominables y homicidas, los fornicarios y
hechiceros, los idólatras y todos los mentirosos tendrán su parte en el lago
que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda” (Apocalipsis 21:8)
©Sana Doctrina Ministerio de Restauración Bíblica
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