2. En el campo del derecho, se tendió a sustituir el abstracto método
dialéctico de los juristas medievales por una interpretación
filológica e histórica de las fuentes del Derecho romano. Por lo que
respecta al pensamiento político, los teóricos renacentistas
recusaron, pero no anularon, la proposición medieval de que la
preservación de la libertad, del derecho y de la justicia constituía el
objetivo fundamental de la vida política. Los renacentistas
aseveraron que la misión central del gobernante era mantener la
seguridad y la paz. Maquiavelo sostenía que la virtud (la fuerza
creativa) del gobernante era la clave para el mantenimiento de su
propia posición y el bienestar de sus súbditos, idea consonante
con la política de la época. Durante el renacimiento las ciudades
italianas se convirtieron en estados territoriales que buscaban
expandirse a costa de otros.
4. A lo largo de la historia política de Colombia ha sido propuesta, en
varios gobiernos, la necesidad de realizar una reforma política.
Cuando se habla de reforma se hace referencia al deseo de
cambiar o modificar alguna norma que se encuentre vigente en la
Constitución actual de alguna nación. Con esto se pretende que
las normas obsoletas que de algún modo impidan el desarrollo de
ciertos sectores específicos o que sean perjudiciales para el
bienestar de la sociedad puedan ser modificadas o abolidas con el
único propósito del bien colectivo. Para llegar a lograr el éxito de
una reforma política, se deben seguir varios pasos que van desde
su ponencia hasta su aprobación.
6. surge en Europa Occidental en los siglos XVI, XVII y hasta el
siglo XVIII , como nueva forma de organización política-
económica sustitutiva del régimen feudal. Se caracteriza por
la centralización del poder en el monarca. Durante la Edad
Media, el centro de organización político y económico era el
FEUDO (extensión de tierra) y la cabeza del mismo era el
señor feudal. Económicamente era una unidad productiva
cerrada de subsistencia, donde el comercio era casi nulo.
Socialmente, un sistema de estratificación centrado en el
linaje, la movilidad social era casi imposible. Se centraba en
un contrato feudal con obligaciones de ambas partes: señor
feudal debía brindar seguridad y protección, y los vasallos
debían servir al señor, respetarlo y acompañarlo. El estado
es de carácter patrimonial, y es propiedad privada del rey.
8. El liberalismo político inspiró la organización del Estado durante el
siglo XIX. Pero para conseguir cambiar y consolidar un nuevo
sistema de gobierno era precisa una profunda crítica y
transformación social y económica, de modo que todos los
individuos tuvieran los mismos privilegios y una mayor libertad de
actuación.
10. En sus obras el pensador británico J. Locke legitimó al poder
político que respetase los derechos naturales del hombre. Se
sustituye y critica el poder absoluto del rey por un nuevo principio:
La legitimidad del poder está basada en los ciudadanos. La
división del poder en lugar de un único poder en manos del rey.
John Locke. Postula un sistema que elimine la representación por
estamentos y permita que se oiga la voluntad general a través del
Parlamento. Los principios políticos y los derechos naturales del
hombre son establecidos en Constituciones escritas, las que deben
ser obedecidas y respetadas por gobernantes y gobernados.
12. En contra de lo que muchos teóricos habían pronosticado, el
nacionalismo, como doctrina y como movimiento político, es uno
de los factores determinantes de la vida cultural, política y social de
este final de siglo, y una de las claves interpretativas decisivas
para entender nuestro futuro más próximo. Su carácter específico
hace que el nacionalismo se haya expresa-do como doctrina
propia, o incorporado a las más variadas y opuestas /ideologías,
como pueden ser la democrática y la fascista o comunista. De ahí
que la opinión pública esté hoy dividida respecto a su
consideración. Para unos, el nacionalismo es una amenaza para la
/paz, un impedimento para el reconocimiento y respeto de los
individuos, un enemigo declarado de los /derechos humanos, etc.
Es causa directa o indirecta de la xenofobia, el /racismo y la
intolerancia que han definido muchos de los escenarios de este
siglo, desde la Alemania nazi hasta la limpieza étnica en la antigua
Yugoslavia..
14. El socialismo es la teoría, doctrina o práctica social que
promueve la posesión pública de los medios de producción y
su administración también pública, en pro del interés general
de la sociedad. Puede ser no-estatal, mediante propiedad
comunitaria en sentido amplio, o estatal, mediante la
nacionalización y planificación económica. En un sistema
socialista, al establecerse la propiedad social colectiva de los
medios productivos, se anulan (en concepto) las clases
sociales tan marcadas en el modelo capitalista y la
apropiación excesiva del trabajo producto de la explotación
laboral, quedando así por hecho la desaparición de la lucha
de clases; por lo tanto se caracteriza por un control
consciente de la sociedad como un entero (colectividad)
sobre las funciones económicas integrantes al
funcionamiento de su estructura social. El socialismo como
tal nace a partir de ideas y escritos de distintas propuestas
que estaban en la búsqueda de un sistema menos voraz y
más justo, en donde las ideas de la teoría marxista le dan un
gran impulso y más fuerza como modo de producción.
16. Imperialismo es la doctrina política que justifica la dominación de
un pueblo o Estado sobre otros; habitualmente mediante distintos
tipos de colonización (de poblamiento, de explotación económica,
de presencia militar estratégica) o por la subordinación cultural
(aculturación). Los términos "imperialismo" y colonialismo, muy
relacionados, no son sinónimos. Los Imperios han existido a lo
largo de toda la historia, desde su mismo comienzo en la Edad
Antigua, pero el uso del término "imperialismo" suele limitarse a la
calificación de la expansión europea que se inicia con la era de los
descubrimientos (siglo XV) y se prolonga durante toda la Edad
Moderna y Edad Contemporánea hasta el proceso de
descolonización tras la Segunda Guerra Mundial. Más
específicamente, la expresión Era del Imperialismo, utilizada por la
historiografía, denomina al periodo que va de 1871 a 1919, en que
se produjo una verdadera carrera para construir imperios
coloniales, principalmente con el llamado reparto de África. A ese
periodo se refieren dos de los textos más importantes que fijaron el
concepto: Imperialism, a study, de Hobson, y El imperialismo, fase
superior del capitalismo, de Lenin.