La lactancia materna proporciona numerosos beneficios tanto para el niño como para la madre. Para el niño, la leche materna contiene agentes inmunológicos y nutrientes esenciales que favorecen su desarrollo físico y neurológico, además de protegerlo contra posibles alergias y enfermedades. Para la madre, la lactancia materna ayuda a reducir la depresión postparto, facilita la recuperación física y permite quemar más calorías para perder peso ganado durante el embarazo