La oración de santa Luisa de Marillac por el P. Corpus Juan Delgado CM
Reflexion P. Rogelio Narváez Martínez 07 de mayo 2017
1. PASTORES SEGÚN EL CORAZÓN DE DIOS.
“En aquel tiempo, Jesús dijo a los fariseos: “Yo les aseguro que el que no entra
por la puerta del redil de las ovejas, sino que salta por otro lado, es un ladrón,
un bandido; pero el que entra por la puerta, ése es el pastor de las ovejas. A ése
le abre el que cuida la puerta, y las ovejas reconocen su voz; él llama a cada una
por su nombre y las conduce afuera. Y cuando ha sacado a todas sus ovejas,
camina delante de ellas, y ellas lo siguen, porque conocen su voz. Pero a un
extraño no lo seguirán, sino que huirán de él, porque no conocen la voz de los
extraños”.
Jesús les propuso esta comparación, pero ellos no entendieron lo que les
quería decir. Por eso añadió: “Les aseguro que yo soy la puerta de las ovejas.
Todos los que han venido antes que yo, son ladrones y bandidos; pero mis
ovejas no los han escuchado.
Yo soy la puerta; quien entre por mí se salvará, podrá entrar y salir y encontrará
pastos. El ladrón sólo viene a robar, a matar y a destruir. Yo he venido para que
tengan vida y la tengan en abundancia”.
Vigésimo Segundo día de la Pascua y el Señor muestra su rostro
bondadoso de Buen Pastor
El día de hoy debemos orar por todos los hermanos que se encuentran
recluídos en centros de readaptación social. Ellos son uno de los sectores
más importantes en el rebaño de Cristo, Buen Pastor, y con ello de la
Iglesia y de todo cristiano.
En este cuarto domingo de Pascua, fiesta de Jesucristo Buen Pastor,
antiguamente la Iglesia visitaba de una forma especial los centros de
reclusión, viendo en todos ellos no tan sólo el rostro de las ovejas de
Cristo, puesto que lo son, sino el rostro del mismo Cristo, quien sin aceptar
ningún tipo de negociaciones nos ha manifestado, que todo aquello que
hagamos con ellos lo hemos hecho con Él mismo (Mt 25,31-46).
Los ojos del cristiano al contemplarles a ellos, parecen no enviar la
información inmediatamente al cerebro sino al corazón de un creyente. De
allí que mucho más que la razón, son la fe y los sentimientos los que
generan la interpretación adecuada sobre lo que ellos significan para
nosotros. Para todo mundo ellos podrán ser personas irredentas,
desadaptados, irreformables, condenados, casos perdidos, pero para un
bautizado ellos son hijos de Dios, son hermanos, y mucho más que todo
esto,.... ellos son Cristo para nosotros.
¡No!, no te apresures a descalificar mi comentario, te pido que me des una
oportunidad de hablarte, de comentarte aquello que al haberlo dicho
Jesucristo fue tan claro y tan directo, que no debiera necesitar un solo
comentario en nuestra vida.
2. “¿Quiénes son los que llenan nuestras cárceles?”: “En la cárcel está Cristo” Él
mismo lo ha afirmado en los versículos 31 al 46 del capítulo 25 en el
Evangelio de san Mateo. Independientemente de que tras las rejas estén
católicos o no católicos, Jesucristo nos dice: “Entra al gozo de tú Señor porque
estuve preso y me visitaste”, ¿cuándo Señor? – le preguntaremos- y Él nos dirá:
cuando lo hiciste con uno de estos pequeños, conmigo lo hiciste”. O bien nos dirá:
“aléjate de aquí maldito, porque estuve preso y no me visitaste”, “pero... ¿cuándo
Señor?” – le preguntaremos- y Él nos dirá: “cuando no lo hiciste con uno de estos
pequeños, conmigo tampoco lo hiciste”.
Es domingo del Buen Pastor y les quiero decir, que Jesucristo piensa en
los encarcelados, que no les abandona, sino que busca a la oveja que se le
pierde momentáneamente. Él no vino por los justos sino por los pecadores,
no son los sanos los que necesitan del médico sino los que nos
experimentemos enfermos.
¡Sí!,... por ellos, y por todos aquellos que un día experimentamos la
inconsistencia de nuestra fragilidad, Cristo ha dejado a las ovejas buenas
en un lugar seguro, para ir en nuestra búsqueda. ¿Y quién de nosotros no se
ha sentido un día incapaz de hacer el bien que quisiera hacer y qué sabe que debe
hacer?
Más allá de la gran verdad que les he recordado, quisiera compartir otra
gran verdad del cristianismo: Cristo estuvo en donde ellos están, él vivió lo
que muchos de ellos viven, y mucho más que eso. ¡Ojalá que ellos que
están recluídos y los que estamos afuera de dónde ellos están pero que
vivimos recluídos en la prisión de nuestro egoísmo tuvieramos la ocasión
de ver la película de la Pasión de Jesucristo! ¡Ojalá que sus autoridades la
consiguieran para que la pudieran ver!
Pero,... independientemente lo anterior,... Les quiero recordar que Cristo
conoció los separos judiciales de su tiempo, que Cristo fue acusado
falsamente, que fue abandonado mientras vivía un proceso que tuvo como
desenlace el más injusto de los veredictos sobre la tierra. El decir que
Cristo estuvo preso, no es un recurso de oratoria, ni fue aquello un
simulacro para la fotografía. Cristo fue tratado con altivez e injusticia por los
guardianes del orden en su tiempo, y al ingresar al reclusorio, a los separos
judiciales fue despojado de sus pertenencias y fue torturado por aquellos
que tenían la aplicación de la justicia en sus manos.
Jesucristo, el Buen Pastor, estuvo despojado de su libertad y habiendo
pisado un lugar, como aquel en el que ahora ellos se encuentran, Él
santificó cada rincón de los lugares en los que ahora ellos experimentan la
soledad, ¡y, la verdad, no debieran sentirse solos!
3. El Señor se ha pasado las primeras horas del viernes-santo caminando de
Anás a Caifás y de Herodes a Pilato, para acompañarlos y sacar provecho
en nuestra propia historia.
Al que es la Verdad se le acusa de impostor y de farsante, a Aquél que es
Luz se le acusa de portar la oscuridad de la blasfemia. Al único inocente se
le comete la peor de las injusticias en una sentencia que fue manipulada
por los hijos de la mentira.
En Jesucristo, Buen Pastor, la Palabra se ha hecho carne, pero una carne
como la tuya y como la mía. Se trata de una carne vulnerable, desgarrada,
mortal, pero que al mismo tiempo está destinada a la gloria, así como la de
todos nosotros. El Dios de los cielos se ha hecho visible, cercano e
indefenso en Jesucristo.
Para nosotros los cristianos, creer en Jesús exige tomar conciencia de que
hemos aceptado como nuestro modelo, la vida de un Dios hecho hombre
rechazado, perseguido y sometido a juicio, a causa del escándalo que sus
palabras y acciones producen en los que han atesorado intereses.
Creer en Jesús supone poner la propia confianza en la verdad del Hijo de
Dios hecho hombre ejecutado, abdicado, en consecuencia, de los intereses
que encarnan muchos de nuestros pensamientos mezquinos.
Jesucristo, Buen Pastor, se encontró ante una doble opción: o atenuaba la
fuerza con la que enseñaba a sus ovejas, reduciendo la información que
transmitía a los suyos, echaba, como dice el lenguaje popular, “agua en el
vino”, transigía, claudicaba,... o llevaba hasta el final la tarea a favor de su
rebaño: darles el alimento de su palabra, hacer lo que tenía que hacer por
resguardarlas, sabedor que tropezaría con una resistencia tal, que
acabaría por ser víctima de la misma, en donde el Pastor daría la vida por
sus ovejas.
Creer en Jesús conlleva sentir la tentación de esta doble opción,... y optar,
finalmente, por lo que Jesús apostó.
Si estamos dispuestos a consumir con alegría el resto de nuestros días, de
nuestra fuerza, de nuestra energía, para luchar por la justicia, pero sin odio,
sin violencia, sin armas, sin derramamiento de la sangre del hermano, tan
sólo a través de la presión moral y del testimonio de la coherencia, es
porque creemos en el Buen Pastor, y porque estamos convencidos de que
sólo el amor es constructivo y verdaderamente fuerte en la vida.
Sabemos que este amor que es a la apariencia frágil e inconsútil como el
humo, es realmente tan fuerte como el más templado de los aceros.
Sabemos que la fortaleza que proviene del alma y que la da Dios nuestro
Señor sobrepasa la fuerza de todo el resto de los músculos de nuestro
cuerpo.
4. Jesucristo nos ha enseñado el rostro de la dignidad, el rostro de Aquél que
no pierde la compostura a pesar de todas las vilezas en un trato recibido
que jamás dependerá de nosotros, y que proviene del egoísmo del corazón
humano.
Jesús Buen Pastor es también Rey, pero “no de este mundo”. Su reinado
se asienta en el más desconcertante de los tronos. Da miedo decir que su
trono fue el patíbulo de la cruz. Digámoslo en otras palabras o mejor dicho
con palabras de nuestro tiempo: el trono de Jesús es la guillotina, la horca,
la silla eléctrica, la inyección letal..., eso significaba entonces la cruz. Y
desde ella, con ella a la vista, Jesús se proclama Rey y Pastor de su
pueblo.
La fiesta del Buen Pastor es una fiesta de la Pascua, puesto que
celebramos, y con toda razón, a Aquél que ha dado la vida por el rebaño,
celebramos a quien ofreció su existencia para salvar a su pueblo y para
ofrecerle los verdes pastos.
Por favor no cometas el error de alejarte de Cristo, y no menciones la
herejía de pensar que Cristo se ha alejado de ti.
¿Sabes? Desde que en los inicios de esta semana leía y meditaba el texto
de la Palabra de Dios, no pude evitar que me asaltara en la memoria el
recuerdo de aquella Rima Sacra XIV de Don Félix Lope de Vega, ¿la
recuerdas?:
Pastor que con tus silbos amorosos
Me despertaste del profundo sueño;
Tú, que hiciste cayado de ese leño
En que tiendes los brazos poderosos.
Vuelve tus ojos a mi fe piadosos,
Pues te confieso por mi amor y dueño,
Y la palabra de seguirte empeño
Tus dulces silbos y tus pies hermosos.
Oye, Pastor, que por amores mueres,
No te espante el rigor de mis pecados,
Pues tan amigo de rendidos eres.
Espera pues, y escucha mis cuidados;
Pero; ¿Cómo te digo que me esperes,
Si estás para esperar los pies clavados?
Absolutamente en ningún momento de la vida estamos sólos. Cristo, el
Buen Pastor, nos lleva sobre sus santos hombros en los momentos de
dificultad. Te quiero invitar para que te abandones en Cristo, puesto que
Cristo permanece siempre a nuestro lado, y Él es fiel.
5. EL PASTOR ENTRA POR LA PUERTA.
“En aquel tiempo, Jesús dijo a los fariseos: “Yo les aseguro que el que no entra
por la puerta del redil de las ovejas, sino que salta por otro lado, es un ladrón,
un bandido; pero el que entra por la puerta, ése es el pastor de las ovejas. A ése
le abre el que cuida la puerta, y las ovejas reconocen su voz; él llama a cada una
por su nombre y las conduce afuera. Y cuando ha sacado a todas sus ovejas,
camina delante de ellas, y ellas lo siguen, porque conocen su voz. Pero a un
extraño no lo seguirán, sino que huirán de él, porque no conocen la voz de los
extraños”.
1.- Cuando los hombres nos hemos puesto a construir imágenes de
Dios, normalmente nos suelen salir muy mal.
Algunos han pensado que Dios está sentado en un mullido sillón de nubes:
ellos han querido hablar de un Dios majestuoso y referirnos al Dios
omnisciente, el que lo sabe todo, pero resulta que les salió un Dios “lejano,
distante”.
Otros han tenido la brillante idea de plasmar un gran ojo en medio de un
triángulo para hablarnos de la omnipresencia de Dios, un Dios que está en
todas partes; y el resultado ha sido un Dios detectivesco, que nos produce
más miedo que confianza.
Finalmente, otros han querido corregir estas apreciaciones pensando en
que una mano es la mejor expresión de la divinidad, para con ello pensar
en el poder y su facultad creadora, pero pareciera que esa mano resultó
ser más una mano ejecutora que una mano que acaricia a los hombres.
Jesús, que conocía muy bien el corazón del hombre y las ansiedades y
necesidades que en él se producen, nos quiso dar una imagen inigualable
de Dios; lo presentó,... mejor dicho se presentó a sí mismo como el Buen
Pastor.
2.- Hay dos momentos en que Jesús quiso servirse de la imagen del
Pastor para hablar de Dios. Cuando quiso referirse a la misericordia que
brota del corazón de Dios, lo insinuó como un pastor que en medio de la
noche deja a las demás ovejas y va en busca de la oveja perdida.
En otra oportunidad, que es la que nos refiere el Evangelio del día de hoy,
Jesús dijo que Él era un buen pastor que conocía a todas las ovejas, y que
las llamaba por su nombre.
3.- ¿Sabes? En las catacumbas de Santa Priscila, lugar al que llegaban
a descansar los restos mortales de los primeros cristianos para esperar
recibir allí corporalmente el regalo de la resurrección, lugar en el que los
primeros cristianos utilizaban para celebrar la liturgia del cristianismo,... ¡sí!,
utilizaban ese lugar a causa de la persecución a que eran sometidos pero
también, porque en su martirio contemplaban el triunfo de Jesucristo,
6. muerto y resucitado por todos los hombres;... allí en las catacumbas de
Santa Priscila, en Roma, se encontró que los primeros cristianos habían
grabado en las paredes la imagen de un fornido pastor, que llevaba una
oveja sobre las espaldas. Así les gustó a los primeros cristianos de las
catacumbas –perseguidos y marginados- imaginar y recordar a Jesús.
Cada uno de ellos se sentía como esa oveja. Eran llevados sobre los
hombros de Jesús y por eso se sentían muy seguros. Cuando Jesús se
presentó como Buen Pastor, quiso que lo sintiéramos así: vivo, amoroso,
cercano y Pastor responsable que no deja las ovejas solas en el peligro,
sino que las carga sobre los hombros y las lleva a “verdes prados y aguas
tranquilas”. Cuando nos lleguemos a sentir como esas ovejas sobre los
hombros de Jesús, sabremos de verdad, cómo es Dios, y nuestros temores
se los llevará el viento.
4.- La vida y la entrega de Cristo ha sido la expresión más pura de
aquellas características que Él mismo nos propuso como descriptivas del
ser y del quehacer del Buen Pastor: escuchar, conocer, seguir, dar la vida,
evitar que sean arrebatadas.
Y aquí está la diferencia y la solución a nuestros problemas: Dios conoce
las ovejas y ama a cada uno personalmente. Se trata de la respuesta que
brota de la fe para solucionar el problema de la soledad y la ansiedad.
Las dos cualidades del Buen Pastor son el conocimiento personal íntimo de
sus ovejas y ese amor único que se convierte en la voluntad de protegerlas
aun a costa de su propia vida. Conocimiento y protección son las dos
cualidades que Jesús reivindica para sí y que pide a todos aquellos que de
una o de otra manera ejercemos el oficio de pastores en la Iglesia, aún
pensando que la porción de su rebaño se circunscriba al espacio físico de
tu propia casa.
El conocer no es tan sólo una pura información intelectual. El conocer
engloba los conceptos de intimidad y relación personal. El conocimiento es
algo íntimo, personal y profundo. Es esto lo que le lleva al Señor al
conocimiento de nuestras debilidades, necesidades y buenos deseos...
antes de que se los expongamos.
5.- Vivimos en esta sociedad tecnificada en la que el hombre se ha
convertido en una clave, en un número, un código o en un caso.
En esta sociedad en donde los nombres ya no importan, tanto en la
escuela como en el trabajo o en el hospital, debemos escuchar el mensaje
de Aquel para quien seguimos y seguiremos siendo personas.
El Señor nos invita para que reconozcamos a los otros como “personas”,
esto es un hecho de grandes consecuencias que nos conducirá demasiado
lejos, incluso hasta el umbral de la verdad suprema. El reconocer al
hombre como persona significa respetar la propia y la ajena inviolabilidad,
7. darle un espacio a nuestra dignidad, reconocer el valor de la individualidad,
respetar la interioridad de cada uno y garantizar el ejercicio de la libertad.
Cada oveja es distinta, cada una tiene cualidades y cada una tiene
necesidades distintas.
Y esto nos dice tanto a todos... Somos tantos los que estamos enterados
de todo, pero ni siquiera imaginamos aquello que en este momento le quita
el sueño a nuestro padre, no conozco acerca de la enfermedad que aqueja
a mi madre, ni siquiera te has enterado que tu hijo está pasando por
momentos sumamente complicados.
Hoy el hombre se ha alegrado de descubrir rasgos de vida en Marte. Es
curioso, buscamos vida en Marte a 320 millones de kilómetros cuando no
hay vida en nuestras propias casas.
Hoy, nos hace falta la cercanía, lo cual nos dará los elementos del
conocimiento personal.
6.- Muy queridos hermanos:
El Evangelio del día de hoy, nos muestra a Jesucristo como el Buen Pastor
no tan sólo para que admiremos la bondad y el amor del Señor sino para
presentárnoslo como ejemplo a seguir por todos los que tenemos una
autoridad sobre los demás.
Recuperemos el modelo para que revisemos nuestro ejercicio:
En el ideal cristiano: No hay peligro que le pase a las ovejas, que no lo
sufra primero el pastor. Y lo peor de todo es que el día de hoy nuestros
rebaños se han dispersado, las ovejas caminan solas.
El buen pastor camina delante de las ovejas, porque es aquel que vive lo
que pide, sin embargo nosotros solemos separar lo que enseñamos de lo
que vivimos y entonces vamos perdiendo la autoridad.
Para el Buen Pastor cada oveja es importante, cada oveja es única e
irrepetible. El buen Pastor deja las ovejas en un lugar seguro y se dispone
a buscar la que se le perdió.
El día de hoy, parecería que los pastores lejos de querer dar la vida por las
ovejas, estamos pidiendo la vida de las ovejas, sobre todo en una
subcultura o contracultura de lo deshechable en donde la vida desde su
misma gestación va a parar al bote de la basura.
No sé si alguna vez hayas escuchado el siguiente texto que escribe Edgar
Guest: "¿Cuánto cuestan los bebés?"
me preguntó el otro día.
"Cuestan mucho -respondí-,
mucho viguilar la cuna,
muchas horas de vigilia,
8. muchos dolores y aflicciones,
muchos sustos y temores,
y lágrimas que vertemos
para pagar nuestros niños,
pero el precio es merecido."
7.- Al que es mal pastor lo único que le preocupa es la propia gloria y el
propio interés y esto es lo que transforma al pastor en mercenario.
Para hablar de los mercenarios tendríamos que pensar no tan sólo en el
dinero, sino en esos momentos en que se piensa sólo en el prestigio
personal, el éxito y la popularidad, esas lecturas del propio papel con clave
de poder y de dominio, cuando en vez de servir se sirve de las personas,
cuando las ovejas se vuelven instrumentos para los propios fines.
Quienes contemplan su vida y sus compromisos al frente de una porción
del rebaño de Dios como Vocación son los que pueden vivir plenamente su
ser pastores, los que lo ven como una Profesión se convierten
automáticamente en mercenarios.
El asalariado... abandona las ovejas cuando ve venir el lobo y huye; y el
lobo hace estragos y las dispersa.
El lugar del padre es insustituible, puede haber subsidiaridades pero nunca
se compararán con la función de los que deben asumir la guía del rebaño.
La grey, es decir la porción del rebaño, se alimenta sobre todo de nuestra
disponibilidad a “dar la vida”.
Se conocen nuestras ovejas y nos identificamos como pastores en el
momento en que uno es capaz de pagar ese precio. Si las ovejas no valen
nuestra vida, el primero que se ha equivocado es aquel que usurpa el lugar
del Buen Pastor.
Estar activo en la obligación un rato, ¡es fácil!, porque a todos nos alcanza
el corazón para emocionarnos y comprometernos por un momento. Lo
difícil es estar activo de tiempo completo, en una actividad, en ocasiones
frenética, por dar y darse a cada momento, por amor a Dios a los demás.
Lo que distingue al Pastor del Asalariado es el amor y la duración en lo
que se realiza. El Pastor hace las cosas de tiempo completo, sin horario y
sin condiciones temporales ni de ningún otro tipo. El asalariado tiene sus
turnos, tiene sus vacaciones, espera su recompensa monetaria, piensa
sólo en sus beneficios y no llega comprometerse del todo.
¿Cuántos de nosotros, cuántos de los que estamos presentes parecemos
más asalariados que buenos pastores para los que se nos confiaron?
9. EL PASTOR HA DADO LA VIDA Y LA HA RECUPERADO.
Jesús les propuso esta comparación, pero ellos no entendieron lo que les
quería decir. Por eso añadió: “Les aseguro que yo soy la puerta de las ovejas.
Todos los que han venido antes que yo, son ladrones y bandidos; pero mis
ovejas no los han escuchado.
1.- Muy querido amigo:
La vida y la entrega de Cristo ha sido la expresión más pura de aquellos
cinco verbos que encarnan esas cinco características que Él mismo nos
propuso como descriptivas del ser y del quehacer del Buen Pastor: amar a
la ovejas, conocerlas, caminar adelante de ellas, llamarlas por su nombre,
y dar la vida por las ovejas.
Podríamos hoy incluir muchas más cualidades descriptoras del quehacer
del Buen Pastor: buscar a la oveja que se pierde, la caridad sin límites, la
misericordia, la comprensión, la perseverancia, el consejo, el ejercicio de la
persuasión, la autoridad, la obediencia total y delicada, el silencio discreto y
la palabra oportuna, la inteligencia, la humildad, la mansedumbre, el
corazón indiviso para dedicarse a todas y a cada una de las ovejas, la
servicialidad, la vigilancia, la paciencia, la pobreza, la moderación, la
indulgencia, la integridad...
3.- ¿Sabes? El día de hoy, quisiera no perder la oportunidad de hablar
sobre un corazón que suele llegar a amar con los mismos sentimientos de
Aquel que es el Buen Pastor: el corazón materno y paterno.
¿Cómo ser buenos pastores hacia el interior de la familia? Tú bien sabes
que para cuidar a estas ovejas no basta con darles comida, vestido y
escuela.
Cuando llegan los hijos, los padres se preguntan si como buenos pastores
serán los mejores educadores, si los formarán integralmente para hacerlos
hombres o mujeres de bien.
Aquí tenemos que recordar que los padres son los principales educadores
de sus hijos. Ellos tienen el poder de influir en el carácter de un niño para
bien o para mal. Es cierto que no es la única influencia que tiene el niño
para desarrollar su personalidad, también están la escuela, su grupo de
amigos, la comunidad de fe y la comunidad en general, que marcarán
alguna huella en su manera de ser, pero sin duda, la familia es quien
influye de manera trascendente en cada uno de sus miembros. En muchos
lugares los hijos se informan pero sólo en la familia reciben verdadera
formación.
Pensemos en el tipo de carácter que esperamos que desarrollen los hijos
cuando lleguen a su madurez. ¿Serán adultos competentes, responsables
10. y confiables? ¿Serán buenos esposos o esposas, y serán buenos padres
de familia? ¿Sus matrimonios serán felices y duraderos? ¿Podrán
atravesar los cambios bruscos de la adolescencia y salir fortalecidos?
Aunque no se nace sabiendo ser padres, ni podemos controlar lo que los
hijos llegarán a ser, se tienen muchas oportunidades de influir en su
desarrollo. Para usar la influencia como padres al máximo, se necesita ver
hacia el futuro y trabajar ahora para dejar las mejores bases para su
crecimiento como personas íntegras.
Afortunadamente, hay muchas investigaciones en el desarrollo infantil que
nos ayudan a conocer lo que los pastores efectivos han realizado en la
educación de sus hijos.
4.- Hablando de Buenos Pastores en nuestras casas, te comparto una
investigación realizada por Tomás Lickona en donde nos muestra las diez
actitudes que los padres hacen para promover la educación integral de sus
hijos y conducirlos por el camino que los lleve a ser mejores personas.
Primero: los padres que son buenos pastores aman a sus hijos y los
proveen de un ambiente estable y seguro. El amor de los padres ayuda al
niño contra su autodestrucción, por ejemplo, ingerir drogas o alcohol. El
amor provee a la ovejas con un ambiente seguro y estable en el cual
desarrollarse.
Segundo: Los padres que son buenos pastores promueven el respeto
mutuo. Una de las lecciones morales más importantes que un padre puede
enseñar es: Haz a los otros lo que te gustaría que te hicieran a ti.
Tercero: Un buen padre controla el uso de los niños sobre los medios de
comunicación. Están alerta de la influencia de los medios y los utilizan de
manera proactiva.
Cuarto: Un buen pastor en la familia enseña con su ejemplo. Enseñar con
el ejemplo va más allá de tratar bien a los hijos, el comportamiento se ve
reflejado también en el trato con el o la cónyuge, demás familiares y
personas alrededor.
Quinto: Los padres buenos enseñan directamente por medio de la
explicación. Enseñar directamente y no con rodeos es muy importante.
Esto implica muchas veces el explicar porqué algunas cosas están bien y
otras mal.
Sexto: El buen pastor del matrimonio utiliza el cuestionamiento para
promover el pensamiento moral de sus hijos, pues fomenta que los niños
se detengan y piensen en sus acciones.
Sétimo: Los padres buenos delegan a sus hijos verdaderas
responsabilidades. Los niños son responsables si se les dan
11. responsabilidades. Proveer a los niños oportunidades en donde desarrollen
el hábito de la responsabilidad.
Octavo: Los pastores domésticos ayudan a sus hijos a proponerse metas.
Es importante que se ayude a los hijos a pensar en algo que quieran
alcanzar y qué medios pueden utilizar para lograrlo. Así ellos encontrarán
sentido en la vida y algo por qué luchar.
Noveno: Los pastores efectivos son exigentes en su disciplina. La
autoridad adulta, propiamente ejercida, es vital para el desarrollo sano del
niño. Recordemos que no hay familias perfectas ni hijos perfectos, la clave
para ser una familia feliz está en la manera en que resuelven sus
problemas y enseñen a resolver los problemas.
Décimo: Los padres buenos fomentan el desarrollo espiritual de sus hijos.
Los padres tienen la responsabilidad de enseñar a los hijos el por qué de la
existencia humana, las razones por las que debemos vivir de acuerdo con
las normas morales y las tradiciones y rituales que enriquecen la vida
espiritual de la familia.
5.- Muy queridos amigos:
Junto con la reflexión anterior, elevo a Dios nuestro Señor, una oración
especial por las madres de familia, a las que celebraremos, honraremos y
recordaremos el próximo miércoles en su día.
Resulta verdaderamente lamentable, el hecho tan real de la ingratitud,
especialmente cuando la cometemos contra aquellas personas que nos
han dado todo. Somos carne de su carne, sangre de su sangre, herencia
de su herencia. Ellos nos dieron la vida y muchísimo más que la vida.
Es lamentable que cometamos cada injusticia con ellos. Y la peor injusticia
en nuestra vida es esa ingratitud y esa falta de correspondencia a aquello
que se hizo, o que se hace por nosotros.
Resulta entristecedor, encontrarnos con situaciones en las que una
persona puede gastarse y desgastarse por nosotros y; de nosotros, no
recibe sino indiferencia, o en ocasiones, nuestro olvido y rechazo.
No es que la persona haya hecho las cosas con el afán de la retribución,
no se trata de pagar, puesto que hay cosas que con nada se pagan. Se
trata de un trato humano y cristiano en la vida, se trata de correspondencia
6.- Cómo sacerdote, yo nunca les diría a unos padres de familia que se
dejen de preocupar por sus hijos, ¡lejos de mí el hacerlo!, lo que sí digo es
que los hijos debieran preocuparse de la misma manera, a favor de los
padres.
Cómo ministro sagrado, jamás me pasaría por la mente el decirle a una
esposa cristiana que deje de tener atenciones por su esposo, ¡jamás! lo
12. que sí tengo que decir es que el esposo deberían ocuparse y preocuparse
en la misma intensidad por su esposa.
7.- Me parece, que en ocasiones tenemos un pensamiento confuso
sobre las virtudes cristianas que debemos poner en práctica. Hay personas
que piensan que con los padres se practica la virtud de la caridad. No estoy
totalmente de acuerdo con ello.
Estoy profundamente agradecido por tantas bendiciones que Dios me dio a
través de Virginia, mi madre, y de Francisco, mi padre. Estoy convencido
de que a través de ellos, Dios me acarició el rostro y me besó en la frente.
Así mismo, estoy convencido que, alimentar a quien me alimentó, cuidar a
quien me cuidó, besar la frente de quien besó mi frente, desvelarme por
quien se desveló por mí, preocuparme por quien tanto se preocupó por mí
no es, en modo alguno, una obra de caridad, sino una obra de justicia.
NO CARGAR A LAS OVEJAS EN LA CONCIENCIA.
Yo soy la puerta; quien entre por mí se salvará, podrá entrar y salir y encontrará
pastos. El ladrón sólo viene a robar, a matar y a destruir. Yo he venido para que
tengan vida y la tengan en abundancia”.
1.- Muy querido amigo de la Parroquia del Rosario:
El Evangelio de Jesucristo Buen Pastor, la presencia de la embarcación
holandesa abortista WOMEN ON WAVES en Zihuatanejo hace 2 semanas,
así como la fiesta del día del niño del domingo pasado y la fiesta del día de
las madres del próximo miércoles, me conducen a elaborar esta reflexión
en torno a la práctica del aborto.
2.- Para ello quisiera compartirte una serie de frases que nos pueden ser
útiles y suscitar una reflexión adecuada en torno a este tema tan difícil.
Este es un fragmento del Juramento de Hipócrates de Cos que los médicos
hacen para guardar una ética clínica: “No me avendré a pretensiones que
afecten en la administración de venenos, ni persuadiré a persona alguna
con sugestiones de esa especie; me abstendré igualmente de suministrar a
mujeres embarazadas pesarios o abortivos”. [460-377 a.C.].
Santa Teresa de Calcuta ha afirmado: “Es algo muy pobre decir que un
niño debe morir para que tú puedas vivir como lo deseas”.
Menciona Jesús Poveda de Agustín algo interesante: “Cuando el gobierno
ve a un ecologista jugarse la vida por un huevo de halcón, ve en él un
héroe, y cuando ve a un pro-vida en la puerta de una clínica abortista, ve
en él a un fanático”.
13. A continuación, te coloco tres textos del doctor Jerôme Lejeune que, sin
duda, te pueden ayudar: “Es mejor cargar a un bebé en brazos que
cargarlo en la conciencia”.
"La genética moderna se resume en un credo elemental que es éste: en el
principio, desde la primer célula, hay un mensaje, este mensaje está en la
vida y este mensaje es la vida".
“Hoy sabemos que la vida es muy parecida a lo que sucede con un disco
en el que se ha grabado música. En el disco no hay notas. En la
reproductora no hay músicos ni instrumentos. No obstante, debido a que la
información ha sido codificada en el momento en que era recibida por un
micrófono y luego transmitida al disco, el lector óptico puede leer dicha
información, dar impulso a los altoparlantes, y así, lo que se reproduce no
son los músicos ni las notas de la partitura, lo que se transmite, si usted
está escuchando "la pequeña serenata", es el genio de Mozart.
Exactamente de la misma manera se ejecuta la sinfonía de la vida. Está
escrita mediante un código muy especial en la molécula de DNA, y la
primera célula es la primera parte del reproductor, que descifra el código y
toca vida humana.
Si la información que está dentro del reproductor -esa primera célula- es
información humana, entonces este ser es un ser humano. Sabemos que
inicialmente hay un mensaje, y si este mensaje se deletrea al estilo
humano, forma lo que es un ser humano. Comprendemos que la materia
es solo materia. Pero la materia puede estar animada por determinada
información que le da forma y permite la construcción de un nuevo ser.
Ahora, dependiendo de si uno es un melómano o un aficionado,
reconocerá más pronto o más tarde, que en el reproductor se ha puesto un
disco de "la pequeña serenata". Si usted es un melómano de verdad, al
segundo compás reconocerá la música. Si es un aficionado necesitará
escuchar toda la cinta antes de decir: "Ahora sé que se trata de la pequeña
serenata". La ventaja de la genética es que la ciencia es devota de la vida:
nos damos cuenta de que se trata de la vida tan pronto se ejecutan los
primeros compases”. (Jerôme Lejeune, testimonio que dio ante la Asamblea
Legislativa del Estado de Louisiana (USA) el 7 de junio de 1990, All About
Issues, Vol. No. 5, otoño de 1991, pp. 17-20.)
3.- ¿Qué te parecieron los textos anteriores?
¿No te has fijado como, hoy en día, en dónde no se promueve la
continencia sexual se pretende infringir la continencia de una vida?
Continencia sexual suele ser una palabra que amarga la existencia de no
muy pocos, algunos por ser adictos al pan-sexualismo; otros que, por el
afán de defender algunos derechos individuales, van negando los
compromisos sociales y sostienen nuevas expresiones de anarquía.
14. Ante la polémica generada por la discusión y promoción en las Cámaras de
una ley que permita interrumpir el embarazo hasta antes de las doce
semanas de gestación; así como por la expresión pública de la Iglesia
Católica sobre la posición cristiana, defendiendo el valor de la castidad y el
ejercicio de una sexualidad responsable abierta al amor y a la vida dentro
de una estructura conyugal, te quiero invitar para que consideremos por un
momento dos factores: el valor de la continencia y el significado de la vida
en gestación.
El término continencia es un concepto con dos posibilidades
aparentemente contradictorias: por un lado significa reprimir y por el otro
moderar y encausar.
Si se entiende por continencia aquello que bloquea se podrá argumentar
que es una práctica represiva, si se comprende como la capacidad de
autogobernarse ingresará entonces el factor humano, convirtiéndola en un
medio y no en un fin.
La sexualidad es un don de Dios. Al revés de los animales, que sólo
ejercen la función reproductiva en época de celo, el hombre la puede
realizar en cualquier época. De allí la necesidad de que la inteligencia, el
dominio de sí mismo y el amor sincero sustituyan al mero instinto en la
conducción de la vida sexual.
4.- Y, ante una sexualidad que no es contenida, hoy se dispone de la
continencia de la vida.
Hoy, no queremos percibir que el tema del aborto más que un aspecto de
salud y economía, o una discusión de moral y religión, es un problema de
humanidad.
A este respecto, parafrasearía a Julián Marías: “Legisladores, Médicos,
Sector Salud e Iglesia tienen derecho a equivocarse, pero no tienen
derecho a mentir”.
¡No traspasemos la frontera de la barbarie atentando contra la dignidad del
hombre! La vida humana es, desde su concepción, un valor intrínseco que
posee sus propios códigos genéticos, únicos e irrepetibles.
La Iglesia tiene el deber de recordar que un hombre existe en donde antes
existió un niño. Un niño existe en dónde antes existió un bebé. Un bebé
existe en dónde antes existió un ser en gestación, aunque apenas fueren
doce semanas, o así fueren veinticuatro horas. Si aplastamos los brotes
jamás existirán los árboles, y si cortamos las flores jamás existirán los
frutos.
5.- Recordando las virtudes de Jesucristo, Buen Pastor, hablemos pues,
sobre el gran regalo de la paternidad y de la maternidad:
15. Yo sé que sobre nuestra primera entrada, que es el nacimiento, las
personas no parece que podamos hacer mucho, dado que no estamos por
el momento en circunstancias conscientes de poder alterar los
acontecimientos o nuestra manera de recibirlos. Pero sí podemos hacer
dos cosas.
Primero: los padres, y más aún las madres en el papel que les es
correspondido en gestación y nacimiento, pueden influir en que la entrada
en el mundo del nuevo ser sea lo más benéfica posible y constituya un
primer principio ejemplar de todas las entradas subsiguientes que
corresponderán al neófito a lo largo de su vida.
Y, segundo, todos nosotros, al aprender algo sobre la influencia que esa
primera entrada de gestación y nacimiento tiene en la vida y la ha tenido
también en la nuestra, podemos entendernos mejor a nosotros mismos, y
saber por qué reaccionamos algunas veces como reaccionamos, y así ir
mejorando las demás entradas parciales que nos esperan en el resto de
nuestra vida.
¿Sabes? El doctor Thomas Verny ha escrito un libro sobre “La Vida
secreta del niño antes de nacer” en el cual nos refiere la importancia de
los cuidados y de la vida prenatal: Él trabaja en una casa de maternidad
que dirige. Menciona que los descubrimientos recientes en la neonatología
se conocían por intuición desde los años cuarenta, pero que los medios
actuales permiten ver y demostrar lo que en aquel entonces sólo se intuía y
conjeturaba.
El caso más interesante de los que presenta es el del director de la
Hamilton Philarmonic Symphony de Ontario, Boris Brott. En el ejercicio de
su oficio como director de orquesta, le llegó el momento de dirigir
conciertos de violonchelo y orquesta, entre los cuales se ubicaban los del
célebre Franz Joseph Haydn, Luigi Boccherini, Antonin Dvorák, Charles
Camille Saint Saëns y Eduard Elgar.
Menciona que en el mundo de la dirección musical el dirigir una nueva
obra, con un solista que tiene su propia reputación, estilo e incluso
caprichos, requiere del director mucho estudio, atención y dominio antes de
enfrentarse a los ensayos, y Brott lo hizo de manera concienzuda y segura.
Cada concierto le llevó un buen tiempo hasta dominarlo, pero notó una
cosa curiosa: El concierto de Antonin Dvorák que no es precisamente uno
de los más fáciles, le resultó sumamente sencillo, de tal manera que casi a
una primera lectura se encontró listo para el ensayo. ¿De dónde le vino
esta facilidad? Él mencionó su perplejidad a su madre, que era profesora
de violonchelo, y entonces ella se lo explicó. Ella había estado aprendiendo
precisamente ese concierto cuando estaba embarazada de él. De ahí le
venía su habilidad en los ensayos y en la ejecución, fue a través de la
16. memoria pre-natal que adquirió la facilidad de dominar la complicada
partitura. Había empezado pronto el aprendizaje.
El Doctor Verny dice que el bebé en gestación es el mejor alumno por dos
razones: porque no tiene otra cosa que hacer y porque no tiene prejuicios
ni defensas ni distracciones que le impidan el aprendizaje.
Él mismo menciona que los autores favoritos de los no-nacidos son:
Antonio Vivaldi es el que se lleva la palma por sus ritmos alegres, sencillos,
inocentes, que les llevan a disfrutar de las cuatro estaciones, cada una en
su estilo y en su belleza, como para decirnos que desde el calor del verano
hasta el frío del invierno pueden resultarnos artísticos si los sabemos
acoger cada uno a su tiempo. Ludwig van Beethoven menciona que les
asusta a los niños, y dice que hay razón en ello porque expresa traumas y
extremos aunque sean artísticos, y ¡claro! que la música rock destroza a
los niños.
Menciona también el médico que fumar no le ayuda al bebé en gestación,
por química y por reducción de oxígeno. El doctor menciona que el bebé
pasa un mal rato cuando su madre fumaba. Y es que surge la sensación
prenatal de estar en una zozobra que provoca también la ansiedad
prenatal: ¿Cuándo volverá este mal rato? ¿Cuánto tardará? ¿Cuánto
durará? ¿Hasta cuando tendré que aguantarlo? ¿Y si aumenta? La espera
incierta provoca ansiedad al bebé en gestación.
Kristina es el nombre de una niña recién nacida que le presentó al doctor
Verny un caso difícil. Sencillamente, ella se negaba a recibir el alimento del
pecho de su madre. Kristina no se amamantaba en absoluto. La bebé
tomaba el biberón con gusto, pero rechazaba la leche materna. El médico
en el desconcierto le pidió a otra madre en lactancia que probase a darle
pecho a la niña, y sucedió lo inesperado: la bebé tomó leche del pecho de
aquella otra mujer. Ahí había algo que investigar, y el doctor lo hizo con
mucha delicadeza pero con firmeza. Él le preguntó directamente a la
madre: ¿Quería tener usted a la niña?. Ella contestó que no, que no quería
un hijo, y que cuando se supo embarazada se decidió a abortar. En
cambio, su marido intervino a favor de tener al niño, y fue así que nació
Kristina.
La vida se inicia desde el vientre materno, ojalá que nunca lo olvidáramos.
Yo sé que el nacimiento de una nueva vida es como el abrir una puerta
desconocida: tiene el vago sabor de lo desconocido, y despierta la
sensación de pasar a un momento nuevo, en el que se manifestará de
manera impredecible la confusión mundana.
¡Cuánta razón tiene Jerome Lejeune el médico francés que ha mencionado
lo siguiente: “Es mucho menos pesado tener a un niño en brazos que
cargarlo sobre la conciencia”.