El documento discute el plan del Ministerio de Educación chileno para implementar clases de educación sexual en todas las escuelas. Sin embargo, los fondos entregados a las escuelas no especifican que deben usarse para educación sexual, por lo que a menudo se destinan a otras necesidades. Esto ha llevado a que estudiantes de escuelas emblemáticas indiquen no recibir estas clases. El documento también plantea la necesidad de incluir la educación sobre diversidad sexual e identidad de género en las aulas.