Memoria de Actividades ATD Cuarto Mundo España 2017
Diagnóstico Proyecto Nuestras voces (Our Voices)
1. ¿QUÉ PENSAMOS DEL
TRABAJO
LAS PERSONAS EN SITUACIÓN DE
POBREZA Y EXCLUSIÓN SOCIAL?
RESUMEN DEL DIAGNÓSTICO PARTICIPATIVO:
OUR VOICES
2. PUNTO DE PARTIDA: INVESTIGAR SOBRE EL TEMA DEL TRABAJO
Para las personas que hemos participado de este diagnóstico, la posibilidad de un empleo
formal se encuentra muy alejada de la realidad actual desde antes de la crisis, por
diferentes razones que iremos nombrando más adelante. Sin embargo, desde las políticas
sociales y las profesionales que las llevan a cabo, se nos insiste, que solo un empleo
formal nos permitirá salir de la pobreza y la exclusión social. Así que comenzamos a
investigar sobre el tema del tema del trabajo partiendo de las siguientes preguntas:
¿Es tan fácil para las personas en situaciones de exclusión social y pobreza
encontrar un empleo formal? ¿Qué barreras encontramos para el acceso al
empleo? Cuando se encuentra, ¿qué tipo de empleo y en qué condiciones?
¿Es lo mismo empleo que trabajo? ¿Existen otras formas de trabajo no
remuneradas y no reconocidas por la sociedad que desarrollan estas personas y
que contribuyen a la sociedad y tienen un beneficio para la misma?
¿Qué consecuencias tiene en materia de derechos sociales que estas formas de
actividad humana no estén reconocidas por la sociedad?
¿Cuál es la relación que guarda el trabajo con la generación de ingresos?
Estas y otras preguntas son las que nos planteamos como punto de partida y que
esperamos dar respuesta a lo largo de las siguientes páginas desde el saber de la
experiencia de las personas en situaciones de exclusión social y pobreza. Aquellas, que en
la definición de las necesidades sociales y la construcción de la política social, quedamos
relegadas a un mero papel de “objetos y/o usuarios/as” de la política social.
3. ¿QUÉ REPRESENTA EL TRABAJO PARA NOSOTRAS Y NOSOTROS?
El trabajo es algo fundamental y necesario, algo que consideramos muy importante para el
sostenimiento de la vida, que nos da libertad, independencia y confianza en uno/a
mismo/a, permite sostener a la familia, sirve para mejorar la sociedad y es algo que nos
inscribe de una forma íntima en la misma. También, el trabajo representa un deseo no
cumplido, sobre todo en el caso de las mujeres que no hemos podido por diferentes
razones acceder a un empleo formal, quedando relegadas al trabajo reproductivo de los
hogares.
• Libertad, autonomía: opuesto al control social que viven las personas en
situaciones de pobreza y exclusión social.
R. “Te aporta independencia: no dar explicaciones, no como cuando pides, que
tienes que estar contando tu vida. Eres Libre, o yo, por lo menos, me considero más
libre cuando tengo trabajo…”
A. “El trabajo también implica quitarte de encima a los trabajadores sociales”
• Seguridad-estabilidad:
J. “Para mi el trabajo representa el poder tener una estabilidad y una seguridad
necesarias para la vida y para superar los problemas que vienen.”
R. “El trabajo te aporta seguridad, bienestar...¿a ver de qué comen, de dónde
saco…?”
• Ser parte de la sociedad:
J. “El trabajo es salud mental, puede que el dinero no esté a la altura, pero en
realidad cuando quieres un trabajo no es por dinero, lo que quieres es una relación
con los demás, estar en sociedad.”
• Salud mental-Autoestima- sentirse útil:
T. “El trabajo aporta bienestar emocional, porque te sientes útil, valido, claro que
esto depende de como se valore tu trabajo”.
J. “El trabajo también implica otras cosas, como el hecho de hacer un trabajo, de
hacer algo y terminarlo, ese orgullo de lo que haces, eso ya es un valor de por sí y
también llevarte bien con las personas.”
4. • Poder acceder a otros derechos:
L. “El trabajo permite mantener la casa y la familia.”
M. “Un trabajo te puede ayudar a salir de la pobreza, tener una vivienda digna,
aunque solo sea alquilar una habitación, cuidar de la familia.”
• El trabajo actual no es digno. Precariedad, mano de obra barata e intereses
políticos y de empresas.
T.“ El trabajo para mí representa mano de obra barata, intereses políticos y de las
empresas, precariedad, bajos sueldos...la mayoría de esos trabajos son así, te sirven
para seguir adelante pero en muy malas condiciones, hay personas que trabajan
muchas horas por pocos euros y no estoy hablando de extranjeros, estoy hablando
de todos. Unos 300 euros por 4h diarias, ¿no es un robo? Y si me quejo me echan,
pero aceptas, porque ¿qué harías en casa?”
A. “El trabajo más que ser una ayuda es una trampa del sistema capitalista.”
5. LA ACTIVIDAD HUMANA Y OTRAS FORMAS DE TRABAJO NO RECONOCIDAS
Al compartir las representaciones que tenemos las personas en situación de exclusión
social y pobreza en torno al “trabajo”, hemos descubierto que muchas de la tareas y
actividades que hacemos no son consideradas como trabajo por la sociedad ni muchas
veces por nosotras mismos/as, ya que no nos permiten acceder a algunos derechos
asociados al trabajo formal e incluso a veces éstas son penalizadas.
Muchas de las personas que vivimos en situación de exclusión hacemos multitud de tareas
y actividades que no se valoran como trabajo pero lo son. Las personas en situaciones de
pobreza y exclusión social realizamos nuestra actividad humana o trabajo
fundamentalmente en el trabajo informal y el trabajo reproductivo, los dos tipos más
invisibilizados y, por tanto, más precarios y con menos derechos sociales, no reconocidos
por la sociedad como trabajo y, en el caso del trabajo informal, con posibilidad de
penalización.
• El trabajo que realizamos las personas que vivimos en situación de pobreza no nos
permite acceder a los derechos básicos como pueden ser el paro, la jubilación, las
vacaciones, la seguridad social.
T. “Si no tienes seguro, sin paro, ni prestaciones... Esos son contras del trabajo
no formal, pero si puedes mantenerte y pagar esto o aquello, pues adaptas tu
horario a tu vida, a tu ritmo.”
J. “La chatarra te pueden sacar de un apuro, pero es un parche, no te da la
seguridad que necesitas.”
D. “Estoy apunto de cumplir 32 años. A lo largo de mi vida he trabajado en 5
vertederos, siempre en condiciones precarias. Hoy me toca vivir en las mismas
condiciones precarias. No he tenido las condiciones necesarias para trabajar y
me hecho cortes, he tenido golpes en las piernas, que me dejaban días sin
poder andar. Hoy además, tengo problemas de espalda.”
• El trabajo que realizan las personas en situación de pobreza no es reconocido ni
valorado por la sociedad, es más, suelen ser culpabilizadas por su situación.
Z. “Como no trabajo fuera de casa la gente piensa que no hago nada, que estoy
sentada en casa”
J. “Cuando la gente habla de los que trabajan en negro se refieren a gente que se
aprovecha para no pagar impuestos, son fontaneros ricos y dentistas. Nosotros
trabajamos en negro porque no nos dan más opción.”
A.: “Yo voy a por chatarra varias veces a la semana, pero no siempre es valorado.
También tengo 4 niños a mi cargo y tampoco está valorado.”
6. • El trabajo informal es perseguido por la ley, la respuesta que da la sociedad a la
falta de trabajo son las multas y la persecución.
A. “ Tenemos la renta mínima, pero sin la chatarra, sería imposible llegar a fin de mes.
Lo malo que ahora la trabajadora social te pregunta cuanto sacas de chatarra para
descontártelo del RMI.”
J.“Las multas por recoger chatarra , cartón y basura en general han aumentado en los
últimos años, sobretodo tras la ley de residuos de 2011.”
R. “Alguna vez voy al mercadillo ilegal que se forma en la calle Mendez Álvaro a
vender algo de ropa y cosas que recojo de la basura. Empieza hacia las 5 de la
mañana hasta las 7 que llega la policía y tenemos que irnos.”
• Las competencias laborales que hemos adquirido en el desarrollo del trabajo que
realizamos no son reconocidas. En el caso del trabajo reproductivo, hemos
probado a traducir las actividades que realizamos en nuestras largas jornadas de
trabajo a competencias y este es el resultado:
“Un día en nuestra vida” Competencias laborales
Cuidar a los hijos/as y personas dependientes: Preparar
comidas y dar comidas, vestirles, bañarles, llevarles y
traerles del colegio, al parque, actividades extraescolares.
Ir a clase de castellano.
Limpiar, comprar, planchar, preparar la comida, fregar platos.
Hacer deberes y estudiar con los hijos/as.
Hablar con las vecinas, visitar a vecinas que están pasando
mal momento, planificar eventos en la comunidad.
Preparan la cena.
Ir a las citas del médico con sus hijos, padres etc. Cuidar a
otros cuando están enfermos, darles ánimos.
Citas con profesorado de sus hijos/as, servicios sociales, etc.
Acudir a gestiones en el banco etc.
Participar como voluntarias en los colegios de sus hijos/as.
Administran el dinero de la casa
Organizan toda la logística de las visitas familiares.
Cuidado de personas: enfermería,
auxiliar de enfermería, geriatría,
puericultura, etc.
Apoyo emocional y mediación en
conflictos: psicología,
mediación...
Apoyo escolar
administración
Gestión
Logística
Trabajo comunitario
Cocina
Organización de eventos
7. BARRERAS AL ACCESO A UN TRABAJO FORMAL O “EMPLEO” QUE
ENCONTRAMOS
Cuando una persona en situación de exclusión social y pobreza no tiene trabajo, se dice
que “somos unos vagos”, “que no valemos para nada”, que no encontrar trabajo es
“nuestra culpa”. Sin embargo, hemos puesto en cuestión estos mensajes y hemos
descubierto que existen muchas barreras que nos impiden el acceso al trabajo formal y,
que muchas de ellas, son formas de discriminación que guardan relación con nuestra
situación de exclusión social y de pobreza.
• Discriminación estética: La relación de la pobreza y la salud como el fondo del
iceberg de la “imagen corporal no deseada para un empleo”.
A veces no podemos acceder a trabajos por razones de estética, porque no
tenemos la ropa adecuada, no respondemos a la imagen que buscan los
contratistas, porque tenemos un físico y una salud que ha sido castigada por las
condiciones de la pobreza: no tenemos una dentadura adecuada, no hemos podido
cuidarnos como quisiéramos por las condiciones que hemos vivido y vivimos.
Al mismo tiempo muchos hemos estado o estamos mal físicamente, enfermos,
porque hemos trabajado muy duro y nuestro cuerpo ya no responde, o porque no
hemos curado bien una enfermedad o simplemente porque la salud no es buena
por la dureza de la vida que vivimos, la vida nos arrolla a muchos/as...
T. “Mi vida es como subir constantemente una montaña. No puedes descansar ni
un momento y si te caes, levantarse es imposible”.
D. “Todos los días recorro el barrio rebuscando por los contenedores. Muchos
días me corto buscando, tengo muy mal la espalda. También voy a la fuente
para rellenar las garrafas y tener agua en casa.”
• Un mercado de trabajo que no permite la vulnerabilidad: el desgaste psicológico de
la pobreza y la exclusión social.
A veces vivimos inseguridad y desesperación porque el trabajo no llega, porque no
sabemos que más hacer, porque buscamos y no encontramos, porque acabamos
perdiendo la motivación y hundiéndonos. A veces por más que hagamos no llega el
trabajo.
Algunas de las personas que hemos participado somos parados de larga duración,
estuvimos trabajando durante un tiempo y perdimos el trabajo. No pudimos
acceder a otro trabajo, nos hemos quedado fuera, estamos desmotivados y con el
8. ánimo muy bajo: quedarte en la calle, depender de los servicios sociales, no poder
controlar tu propia vida te afecta a la salud mental.
J. “A partir de los 42, 43... es muy difícil encontrar trabajo. Ya te dicen que eres
mayor”
L. “Cuando empiezas en el paro empieza la pena, te hundes, dejas de cobrar y entras
en una dinámica negativa. Sin dinero no te puedes mover, te quedas atascado”
C.“Cuanto más tiempo pasa peor, tienes más inseguridad y te vas quedando en la
cama. Te encierras porque no tienes nada que compartir. Pierdes tus amistades, tus
contactos, te hundes en la vergüenza”
• Barreras formativas y de experiencia: experiencia no válida para conseguir un
empleo.
Muchas de nosotras y nosotros, no conseguimos un trabajo formal porque no nos
adecuamos a la experiencia y formación que exigen las empresas. Algunas tenemos
poca formación, otras venimos de otros países y desconocemos el idioma. Otras
dicen que nos hemos quedado “obsoletas” porque no sabemos utilizar un ordenador
para hacer curriculum o trámites, por ejemplo.
Respecto a la experiencia vemos que casi toda la experiencia de trabajo que
tenemos las personas que vivimos en situación de exclusión es experiencia no
válida para la sociedad, es decir, las personas que trabajamos de manera informal en
el hogar o fuera del mismo, personas que realizamos innumerables tareas todas las
semanas, que tenemos competencias profesionales y saberes de muy distinta índole
no son reconocidas en estas habilidades porque no tenemos un título, es decir, un
reconocimiento oficial que nos avale en estas habilidades. Como estas actividades y
habilidades no son reconocidas por la sociedad muchas de las personas que vivimos
en la exclusión somos tratadas como vagas o como personas que no queremos
trabajar.
• Discriminación cultural que se ceba con las mujeres.
Algunas personas sufrimos discriminación a la hora de hacer una entrevista y
conseguir un empleo por llevar pañuelo en la cabeza (el hiyab) o por vestir el luto
(mujeres gitanas). También los hombres somos objeto de esta discriminación.
A. “Yo visto de negro porque mi marido murió, pero me dicen que así no voy a
encontrar trabajo.
H. Es muy difícil conseguir trabajo cuando llevas pañuelo.
9. T. En una entrevista de trabajo (parece un chiste pero no lo es), entra un gitano, un
marroquí y un payo. ¿A quién le dan el trabajo? Al menos a los gitanos ya te digo yo
que no y al marroquí tampoco seguramente.
• Incompatibilidad con ayudas sociales y de ingresos.
Muchas de las personas que cobramos la Renta Mínima tenemos miedo a perderla si
encontramos trabajo porque cuesta mucho tiempo obtenerla (en la actualidad unos
18 meses) y no sabes cuanto van a tardar en devolvértela. Al mismo, al ser una ayuda
asociada a un padrón, provoca que si alguien de la casa se pone a trabajar, le van a
bajar la renta al que la está cobrando.
M. Yo tengo una mierda de trabajo. Como no me metían todo en nómina les pedí que
me quitaran 15€ del sueldo para tener derecho a RMI. Si no tienes tanto de sueldo,
puedes acceder al RMI y a ayudas para hijos.
• Discriminación de género. Muchas personas que viven en la exclusión no son
contratadas por su realidad de vida y se ven obligadas a mentir para intentar acceder
a un puesto de trabajo.
L. Luego está lo de madre soltera con hijos busca…que es lo que no te contrata
nunca nadie. Madre soltera con hijos busca. Yo voy a pedir un trabajo y llego a una
entrevista laboral… Estoy soltera, ¿cuántos hijos tienes? 4, y si se te ponen malos
¿cómo vas a venir al trabajo? Por mucho que intentes explicar, aunque sea mentira,
que tienes apoyo familiar, ya me buscaré yo la vida, si se me pone malo, ya eso ya
me preocuparé yo, ¿no?
Claro, eso déjamelo de mi cuenta que ya me preocuparé yo, cuando mis hijos se
pongan malos a quién acudir para yo no tener que faltar al trabajo. Yo nunca he
faltado al trabajo, yo he trabajado con 4 hijos, he sido oficial de primera de
pescadería, he trabajado muchísimos años en una pescadería en Carrefour, y yo
jamás he faltado a mi puesto de trabajo, nunca en la vida, jamás, sabes, y vas al
Corte Inglés y te dicen que como, vamos, que directamente que no te contratan. No
tienes marido, yo tengo que mentir, tengo que decir que estoy casada, claro, ya al
principio no mentía ahora ya miento, claro, digo pues sí, estoy casada. Apoyo
familiar, todo el del mundo, el que tú quieras, padre, madre, aunque no tenga padre
ni madre, y estén muertos, vale, sabes yo… Tienes que mentir, y aun así con todas, lo
que más pesa es que tengo 4 hijos.
• Barreras económicas.
Algunas de nosotras por ejemplo, tenemos dificultades para poder ir a una
entrevista o mantener un trabajo. Un ejemplo concreto es el tema del transporte al
trabajo:
T. “¿quién paga el transporte?, yo no tengo para ir a una entrevista a Madrid”.
10. PROGRAMAS Y POLÍTICAS DE EMPLEO: ¿SON ÚTILES PARA LAS PERSONAS
EN SITUACIONES DE POBREZA Y EXCLUSIÓN SOCIAL?
Una de las respuestas de las instituciones ante la falta de trabajo son los programas y
políticas de empleo. Muchas de las personas que vivimos en situaciones de pobreza y
exclusión hemos participado en formaciones y cursos planteados por las instituciones.
• El sentido de la formación: ¿para qué?
C. Jardines...un curso de jardines ¿para qué si hay jardineros parados? Yo soy
carpintero y estoy parado ¿para qué un curso de carpinteros? Si ya hay carpinteros
formados que están en el paro...
A parte de esto hay otras cuestiones que hacen de los programas y políticas de
empleo algo ineficaz y frustrante...
• Programas que no se realizan o no están pensados para las personas que
tenemos más dificultades sino para otros colectivos.
S. “El programa de Garantía Juvenil está pensado para personas que están en la
Universidad.”
M. “ El caso es que fuimos a un curso de formación, pero en realidad no era un curso
de formación, era un estudio sociológico que había puesto en marcha un técnico del
ayuntamiento que era sociólogo y eso se había justificado el dinero de Garantía
Juvenil.”
• No parten de la realidad de vida de las personas y su obligatoriedad es
contraproducente para las mismas, es decir, no se dan las condiciones para que
las personas que viven situaciones de exclusión puedan realizar los cursos.
L. El problema es que los que cobramos el RMI y te mandan una carta del paro estás
obligado a cogerlo, pero claro, hay que priorizar, primero están tus hijos, si a mí me
sale un curso por la tarde ¿qué hago yo con mis hijos? Porque si me sale por la
mañana que están en el colegio, en un momento dado, pero y si es por la tarde como
el que hice yo de certificado profesional, tuve que tirar del padre, un enfermo de
cáncer, un enfermo de cáncer que estaba el hombre, que cuando llegaba yo estaba
que se moría, que él me ayuda en todo lo que puede, pero está enfermo. Entonces
me ayuda, temporal, en fechas concretas, que está un poquito mejor de salud, pero
cuando está mal no me puede ayudar, entonces qué hago ¿pierdo el RMI?
J. “A mi mujer le dieron un curso, pero obligada y lo hacen sin pensar si es
provechoso para ti o no, pero eso sí lo tienes que hacer igualmente. El estado paga
los cursos y no tienen garantías para ofrecerte después un trabajo, así que seguimos
igual.”
11. M. “ Hacen cursos para justificar gastos. Los cursos tendrían que estar más mirados,
ya que la persona emplea su curso y sus capacidades en él, a pesar de la vida que
tenga, y le da esperanzas.”
• “Búscate la vida”: Del abandono institucional al control social
R. “Al no hacer el curso de emprendedores (para hacerlo tenía que pagar 100 euros
por cada una de mis hijas en la guardería, más los uniformes), no nos entendimos y
me hicieron una hoja de que no me quería reinsertar y me quitaron el RMI. Todas las
Trabajadoras Sociales que he tenido solo están con lo de “ponte a trabajar”, pero no
ven lo complicado que hay alrededor. Lo que he conseguido de ayuda es porque yo
me he informado, no porque me lo hayan dicho en Servicios Sociales.
R. Eso es lo que me da miedo. Con la sanción de 1 año sin RMI que tengo, la
trabajadora social sólo me dice que me busque la vida. ¿Qué quiere decir “búscate
la vida?”Yo estoy haciendo lo que dicen ahora, pero no me viene el dinero. Dependo
de ellas, tienen poder sobre mí. Y me da miedo que vean que si que no tengo, que
me puedan quitar a mis hijas.
• En algunos casos los programas y formaciones no se adecúan a los conocimientos
que tienen las personas.
M. Hice un curso de mecánica y tenía que estudiar varios libros pero me cuesta
mucho leer y escribir.
A. Por el RMI me pusieron un curso para cuidar a un bebe. Pero si soy abuela ya, pero
no se dan cuenta que ya se cuidar bebes. Pero claro, si no vas te quitan el RMI. Fue
humillante.
• En la mayoría de los casos las personas que recibieron la formación sintieron que
ésta fue inútil.
J. Yo hice un curso de jardinería, durante 6 meses cobré algo por hacerlo, había días
que iba andando, sin desayunar porque no me quedaba dinero, para no faltar al
curso, pero después no he tenido la oportunidad de un trabajo del curso ni del inem
ni de empresas privadas.
P El estado paga los cursos y no tienen garantías para ofrecerte después un trabajo,
así que seguimos igual.”
J. Han desaparecido los aprendices y la formación profesional donde podría haber
experiencias, y ahora hay mucha gente con estudios …
12. Tras este proceso de diagnóstico, comenzaremos una siguiente fase de elaboración de
propuestas que comenzará en el mes de noviembre.
Si quieres más información o participar escríbenos a:
cuartomundo@gmail.com
contacto@equipoandecha.org
O llámanos al teléfono de la Oficina del Movimiento ATD Cuarto Mundo en Madrid:
91-448-14-45
También puedes seguirnos en:
http://www.facebook.com/OurVoices2017