1. 3.4. ARISTÓFANES.
Aristófanes (445 a.C.-ca. 387 a.C.) es el único comediógrafo
del que nos quedan obras, pues el resto de poetas cómicos son
sólo para nosotros nombres y títulos de obras, nada más. Era
notablemente más joven que los trágicos, aunque las obras
supervivientes -11 en total- son prácticamente contemporáneas de
las tragedias que también nos quedan.
Entre sus comedias destacan Las nubes, La Paz, Las
avispas, Los caballeros, Las ranas, etc. Estas obras tenían grandes diferencias con
respecto a la tragedia; formalmente la comedia presenta un elemento ajeno a la
tragedia: la parábasis, que, situada más o menos en el centro de la pieza cómica, es
una larga tirada de versos muy amplios, en los que el poeta expone tesis suyas, hace
ruegos peculiares a los jueces (que debían elegir a la mejor comedia de entre las
presentadas a concurso) o al público; todo ello desconectado de la trama de la obra
escénica, rompiendo la ilusión dramática.
Otro elemento típico de la comedia es lo obsceno, que también parece un
elemento primitivo en este tipo de representación, pues el Coro de la comedia
practicaba el culto al falo con todo lo que de grotesco tenía ello.
En tercer lugar, la comedia presenta un rasgo burlesco que culmina a veces en
el ataque personal, incluso a los propios espectadores, sin que hubiera cualquier tipo
de censura. Así en Los caballeros, Aristófanes ataca al demagogo Cleón cuando éste
se encuentra en el apogeo de su poder político, como sucesor de Pericles, en plena
Guerra del Peloponeso. También el comediógrafo se burla incluso de los dioses, como
hace, por ejemplo, en Las nubes.
Aristófanes consigue aunar en sus comedias la comicidad más formidable y la
máxima seriedad en el transfondo de sus piezas teatrales, es decir, consigue una farsa
trascendental. Farsa en el sentido de teatro de ficción, que es lo que el autor nos pone
ante sus ojos.
La más esplendida de las obras de Aristófanes, Las ranas, inaugura
explícitamente algo que tendrá una resonancia universal, la crítica literaria. En efecto,
en esta obra Aristófanes compara la obra trágica de Esquilo y la de Eurípides,
caracterizándolas magistralmente, dando la preferencia a Esquilo, sin dejar de
reconocer, sin embargo, la gran valía de Eurípides.
La estructura de la comedia presenta una serie de escenas fijas. Comienza con
un prólogo en que dialogan varios personajes, generalmente secundarios, que acaban
por contar al público de qué trata la obra. Luego, usualmente, entra el Coro, en la
llamada parábasis, que se enfrenta con el héroe de la comedia en diversos
2. enfrentamientos dialécticos e, incluso, a palos: son los agones; también estos agones
se producen entre el héroe y otros personajes que le quieren engañar. Los agones se
intercalan entre la parábasis y los episodios, llegando finalmente al triunfo del héroe,
con fiestas y bodas.
El héroe es un personaje normal, habitualmente un hombre entrado ya en años,
pero que destaca por su inteligencia e ingenio; también intervienen otros hombres y
mujeres, dioses e, incluso, muertos resucitados. Además el coro se presenta
disfrazado casi siempre de animales -de ahí el título de algunas obras de Aristófanes,
como Las aves o Las avispas-.
Veamos para terminar el resumen del argumento de una obra, Las aves, del
414 a.C. -la guerra se ha reanudado con la expedición de Atenas contra Siracusa, que
al año siguiente terminará en un terrible desastre-. Aristófanes escribe una obra alegre
y un tanto irreverente. Dos atenienses, Evélpides y Pistetero, huyen de Atenas,
aburridos de pleitos, impuestos e incomodidades, y marchan junto a las aves. Éstas,
que forman el coro, los reciben con hostilidad; pero Pistetero, el héroe, las convence de
que sus intenciones son buenas: deben fundar el reino de las aves, recuperando de los
dioses los derechos que estos les han robado y haciéndose respetar por los hombres.
Así sucede y los dioses, muertos de hambre al no llegarles el humo de los sacrificios,
pues las aves no dejan que pase, tienen que reconocer el poder de Pistetero. Éste,
finalmente, se casa con Realeza, símbolo del poder.
Las sátiras de Molière, dirigidas contra las convenciones sociales y las
debilidades de la naturaleza humana usaron de los estereotipos y argumentos
inspirados en la tradición de las comedias de Aristófanes, Terencio y Plauto, y en la
commedia dell’arte italiana.
Apéndice.- Cratino (c. 500-c. 420 a.C.), dramaturgo griego, nacido en
Atenas. Escribió 21 comedias satíricas famosas por su fuerza. Obtuvo el primer
premio en el concurso de comedias de los festivales atenienses en nueve ocasiones.
Su obra La botella logró derrotar a Las nubes de Aristófanes en el año 423 a.C. De
estas obras sólo se conservan algunos fragmentos. Después de Aristófanes, Cratino
fue el dramaturgo más famoso de la vieja comedia ateniense.