Los impuestos “saludables” en México pueden dividirse en dos grandes grupos: 1) Los famosos IEPS (Impuestos Especiales sobre Producción y Servicios), donde las entidades federativas reciben el 20% de lo recaudado en las ventas de cerveza, bebidas refrescantes, alcohol, bebidas alcohólicas fermentadas y bebidas alcohólicas. Y 2), los impuestos que se cobran a los establecimientos que las venden.
Los municipios reciben el 20% de la participación que le corresponda al Estado. Estimados lectora lector, desde el punto de vista de la salud pública, se parte del supuesto que si cuesta más adquirir el alcohol o el tabaco, entonces disminuirá su consumo. Sin embargo, cuánto interés podrán tener los hacendarios en que se disminuya el consumo, si ganan con el mismo. Hoy les participo algunos datos duros de nuestra ciudad relacionados al consumo del alcohol y usted tendrá la mejor opinión.
En salud no hay evidencia más consistente que los certificados de defunción, así que al consultar las principales causas de muerte en León durante 2013 y 2014 (cifras preliminares) en la Dirección General de Información en Salud nos encontramos lo siguiente: Por enfermedad alcohólica del hígado fallecieron 294 en 2013 y hasta octubre de 2014 han muerto 267. Por el síndrome de dependencia del alcohol hubo 39 decesos en 2013 y 37 en el periodo señalado de 2014. De la enfermedad alcohólica del hígado, el 81% de los decesos ocurrieron en hombres y 19% en mujeres. La edad de ocurrencia de la defunción fue así: 62% en edad productiva (20-64) años y 38% en adultos mayores (65 y más). Del síndrome de dependencia del alcohol el 97% fue en hombres y 3% en mujeres. En edad productiva fallecieron el 92% y 8% en adultos mayores.
Estimados lectora lector, esta evidencia es solo de dos causas específicas. Cuánto cree usted costó a las familias y la sociedad en lo económico, social y psicológico esta enfermedad que llevó al fallecimiento de las y los ¡637! leoneses. Las participaciones económicas de los IEPS y del impuesto que pagan por refrendo las tiendas que venden el alcohol ¿alcanzarán a pagar los costos que usted imaginó? Creo que su respuesta será negativa y sin duda que tiene razón.
Un dato adicional, los IEPS no se destinan a la salud o lo hacen en muy pequeña cantidad. Así que me parece poco el impuesto cobrado, algo más debiéramos hacer. Si añadimos además las otras causas de muerte o enfermedad donde el alcohol es el factor gatillo como accidentes, violencia, suicidio y lesiones, entonces es claro que nuestra sociedad sufre y que al menos los impuestos debieran ser de mayor cuantía y más orientados al sector salud y social en su redistribución.
Vale la pena recordar que la gente bajo la influencia del alcohol puede reír y hablar en voz alta, sentirse mareada; tener visión borrosa; tener problemas para mantenerse de pie y balancearse cuando caminan; hablar con insultos; sentirse soñoliento y relajado; desm