El ácido sulfúrico es un corrosivo que puede causar daño pulmonar severo si se inhala, incluyendo tos, falta de aire y edema pulmonar. La gravedad de los efectos depende de factores como el tamaño de la partícula, la concentración y la humedad. El daño pulmonar a largo plazo es posible incluso después de exposiciones de corta duración.