Los expertos discutieron la importancia del diagnóstico temprano de la hipertensión arterial pulmonar (HAP) para mejorar la sobrevida de los pacientes. Señalaron que los síntomas de la HAP a menudo se confunden con otros problemas de salud, dificultando el diagnóstico. Recomendaron que los médicos evalúen parámetros como la capacidad funcional y signos cardiovasculares para detectar la HAP de manera más temprana. Además, enfatizaron la necesidad de determinar el tipo de HAP para brindar el trat
1. Importancia del Diagnóstico Precoz en la HAP
Consenso Latinoamericano
Rubén Dueñas
Neumonólogo. Clínica Shaio. Bogotá, Colombia
Santiago Guzmán
Neumonólogo del Hospital “José Gregorio Hernández”. Caracas, Venezuela
Efraín Gómez
Médico Cardiólogo. Jefe de la Unidad Coronaria y del Programa Falla Cardíaca y
Trasplante de la Clínica Shaio. Bogotá, Colombia
Gur Levy
Neumonólogo, Presidente de la Sociedad Venezolana de Neumonología y Cirugía
Torácica. Caracas, Venezuela
Durante la I Reunión Iberoamericana de HAP, los especialistas representantes de
Colombia y Venezuela sostuvieron una interesante discusión sobre la importancia
de realizar un diagnóstico a tiempo y oportuno para mejorar la sobrevida del
paciente.
A continuación, se detallan los puntos más importantes analizados por este grupo
de expertos:
Diagnóstico
Se sabe que la HAP es el resultado de una presión alta en las arterias pulmonares,
con valores mayores a 25mmHg durante el reposo y a 30mmHg durante el
ejercicio. Esta hipertensión genera el aumento progresivo de la resistencia
vascular pulmonar, lo que conduce al fracaso del ventrículo derecho y a la muerte
prematura del paciente.
De acuerdo con el Dr. Rubén Dueñas, la HAP posee un diagnóstico difícil, debido a
que su sintomatología se puede confundir con el cuadro médico de otra
enfermedad, como falla cardíaca, tromboembolismo pulmonar, asma, EPOC o
daño pulmonar. “Los pacientes sienten palpitaciones, debilidad, mareos durante
el ejercicio, vértigo, dolor en el pecho, síncope, tobillos, piernas o abdomen
hinchados, síntomas que atribuyen al sedentarismo o al sobrepeso; pero cuando
observan que estos signos se agudizan, acuden al especialista cuando la
enfermedad está muy avanzada”.
Con relación a este último punto, el Dr. Efraín Gómez añade que el diagnóstico
de esta patología se dificulta aún más al no tomarse en cuenta como parámetro
clínico la función pulmonar. “Si en las historias clínicas primarias se evaluara la
clase funcional, se podría conocer tempranamente si ese deterioro en la
capacidad de caminar o hacer una actividad física se deba a un proceso de
envejecimiento o a un cuadro de HAP”.
2. También señala la importancia de detectar otros parámetros clínicos como la
aparición de un segundo ruido pulmonar muy elevado, taquicardias y pérdida del
conocimiento.
Además aclara que, en esta clase de enfermedad, se debe precisar su etiología.
“Es necesario que la HAP se reconozca como una especie de síndrome vascular y
no sólo como una entidad específica como tal”.
Por estas razones, es de suma importancia que el especialista aprenda cómo
diagnosticar un cuadro de HAP a tiempo, analizando los síntomas del paciente,
los exámenes clínicos y los resultados que arrojen el electrocardiograma y la
radiografía del tórax.
Para el Dr. Santiago Guzmán, los exámenes básicos, como el electrocardiograma,
permiten conocer que el cansancio o el dolor en el pecho que presenta el paciente
no se genera precisamente por un asma, sino por HAP: “Una patología mucho más
extraña que afecta, en especial, a las mujeres que tienen entre 30 y 40 años de
edad”.
Clasificación de la HAP
Después de confirmar el diagnóstico, el siguiente paso es determinar la clase de
HAP que posee el paciente. “Es importante saber que existen cinco grupos de
pacientes con HAP. Uno de ellos es la idiopática, que se caracteriza por no tener
una causa conocida que origine el desarrollo de la enfermedad, aunque se habla
que puede relacionarse con factores genéticos o ambientales”, apunta el Dr.
Guzmán.
Otro grupo es la HAP secundaria, la cual se desarrolla por otra condición médica,
como enfisema, bronquitis crónica, insuficiencia cardíaca congestiva, defectos
congénitos del corazón, tromboembolismo pulmonar crónico, SIDA, cirrosis,
lupus, fibrosis pulmonar y el uso de ciertos medicamentos. “En esta clase, es
fundamental tratar la enfermedad de base para mejorar, de forma, efectiva, la
sintomatología del paciente”, afirma el Dr. Gur Levy.
Con relación a la clasificación de la enfermedad, el Dr. Dueñas comenta que sólo
los grupos 1 y 4 se benefician de la farmacoterapia más avanzada desarrollada
para el control de la HAP. “ Debemos tomar en cuenta que no todos los pacientes
pueden recibir el mismo tipo de medicamento. De esta premisa es que parte la
importancia de hacer un diagnóstico adecuado y a tiempo, a fin de conocer qué
clase de paciente con HAP estoy tratando y, de esa forma, recomendarle la terapia
que más se adecue a su situación”.
Tratamiento
Según el Dr. Gómez, hoy en día, se cuenta con un arsenal de medicamentos para
el tratamiento de la sintomatología de la HAP. “Sin embargo, para mejorar los
3. resultados, estos fármacos se deberían suministrar en etapas mucho más
tempranas, a fin de reducir la mortalidad cardiovascular del paciente”.
Tomando en cuenta este punto, el Dr. Dueñas reitera que sólo dos grupos con
HAP se benefician de los recientes medicamentos creados para el control de la
HAP. “Además de que no se pueden utilizar para todos los pacientes, también se
debe considerar que estos fármacos son de alto costo. Por lo tanto, se deben usar
de forma racional”.
Centros Especializados de Atención
Para lograr este objetivo, se están desarrollando centros especializados de
atención al paciente con HAP, a fin de que los recursos, tanto estudios
diagnósticos como terapéuticos, sean distribuidos de forma adecuada.
En Venezuela, estos centros de atención especializada se encuentran en el
Hospital Clínico Universitario de Caracas, Hospital Militar, Hospital “José Ignacio
Gabaldón” de El Algodonal y los Hospitales Universitarios de Maracaibo, Mérida y
Puerto La Cruz.
“En los últimos diez años, una de las enfermedades que ha tenido más avance
desde el punto de vista terapéutico ha sido la HAP. Por lo tanto, si hacemos un
diagnóstico precoz, podemos mejorar la sobrevida y los síntomas del paciente,
siempre y cuando conozcamos qué medicación puede recibir y la forma en que
debe ser suministrada. De esta forma, generaremos más beneficios que daños”,
acota el Dr. Levy.
También comenta la importancia de referir a los pacientes con HAP a los centros
de atención especializada, a fin de que reciban los estudios diagnósticos
necesarios y el tratamiento que más se adapte a su clase de enfermedad.
“Supervisar el suministro de medicamentos para el control de la HAP no sólo
mejora la sintomatología del paciente, sino que ayuda al mantenimiento de
nuestro sistema nacional de salud, debido a que evitamos malgastar estos
recursos médicos de alto costo, que pagamos todos los ciudadanos a través de
nuestros impuestos”, enfatiza el Dr. Levy.
Aprendiendo a vivir con HP
Como conclusión, los especialistas que participaron en este análisis sobre el
diagnóstico y tratamiento de la HAP resaltaron la importancia de que el médico
motive al paciente a relacionarse con fundaciones especializadas en esta
enfermedad, a fin de que pueda recibir información oportuna, soporte sicológico,
legal y logístico. De esta manera, podrá sobrellevar la carga de padecer una
patología de difícil tratamiento.