Dos estudios científicos encontraron que la oración mejoró los resultados de salud de los pacientes. Un estudio encontró que los pacientes por los que se oró necesitaron menos antibióticos, sufrieron menos edema pulmonar, y no requirieron intubación, en comparación con un grupo de control. Otro estudio también encontró que la intensidad de los vómitos fue menor en el grupo por el que se oró que en el grupo de control. Estos estudios sugieren que la oración puede tener efectos de salud que exceden la explicación del modelo científico