3. O Se cuenta que fueron los romanos los que
descubrieron la saponificación a partir de los
restos de cenizas y sacrificios animales. Que
lavando en las aguas río abajo las ropas
quedaban más limpias. Eso es lo que cuentan los
italianos. Los franceses por su parte, cuentan que
fueron sus druidas, a partir de grasa de carnero y
cenizas, los que creaban un ungüento a fin de
teñir sus cabellos, que este tenía propiedades
retorsivas y derivó en el jabón. Pero ya mucho
antes se utilizaban álcalis naturales como el
natrón o la potasa procedente de cenizas con
fines de blanqueo y tratamiento de tejidos. Se
supone que fueron los fenicios los que difundieron
la utilización de esos productos alcalinos
antecesores del jabón.
4. O Fuera como fuere, las primeras noticias que
tenemos de la elaboración del jabón tal y como lo
conocemos proceden de los árabes que lo
introducen en Europa a través de al-andaluz.
Dicen que la primera gran industria jabonera la
implantaron los árabes a finales del siglo XI en
Sevilla, en la calle Castilla. Denominaban a estas
fábricas almonas. Mas tarde los cristianos
extendieron la buena costumbre de lavarse, muy
rentable por otra parte, a otros
países, instaurándose en Marsella (Francia) y
Génova (Italia). En algunos reinos, como en el
castellano, era patrimonio del Rey la producción
de jabón y todo el que lo quería
fabricar, utilizar, transportar o vender le pagaba
impuestos por ello.
5. O Más tarde aun, se extendió por toda Europa y cobraron
importancia las producciones inglesas y alemanas, siendo
estas últimas consideradas las de mejor calidad a finales
del siglo XVI.
O Ya a finales del s. XVIII, animado por un concurso público,
Lebranca descubre el método para obtener sintéticamente
el carbonato sódico lo que hace que la industria jabonera
prolifere y mejore bastante. A partir de ese momento el arte
jabonero se convierte en industria y tanto Lebranca como
Selva desarrollan métodos para obtener sosa cáustica con
lo que el proceso es aun más efectivo. A principios del siux
Chevreul determina la naturaleza de las grasas lo que da
pie al perfeccionamiento de la producción del jabón.
6. O Con las grandes guerras en el siglo XX escasean las
grasas tanto animales como vegetales y se elaboran otros
productos sustitutivos del jabón. Los conocemos
generalmente como detergentes. Desde entonces,
fundamentalmente por su rentabilidad, se han ido
combinando jabones con detergentes incluso hasta su
sustitución total.
O Las ventajas que aporta el jabón natural son
fundamentalmente un tratamiento más suave para la piel y
su biodegradabilidad. La ventaja que aporta la elaboración
propia del jabón es la elección de las materias primas y de
algunos aditivos como los aromas, siendo las esencias
naturales la mejor fuente aromática, ya que además tienen
propiedades terapéuticas.