El documento resume los descubrimientos científicos sobre la materia oscura y la organización del universo, y plantea que esto sugiere la existencia de un principio ordenador. También discute cómo la ubicación del sistema solar en la Vía Láctea permite la vida en la Tierra. Finalmente, ofrece la perspectiva bíblica de que la creación revela a un Creador inteligente.