1. El arte es la expresión del alma que desea ser escuchada.”
La Expresión Artística tiene un amplio campo de estudio, ya que permite plasmar de manera
visual y simbólica los pensamientos del autor, es decir, se pueden advertir las ideas
generadas en la imaginación del artista cuando se observa su obra terminada.
En algunas ocasiones el artista sólo plasma sus inquietudes, otras veces, coloca dentro de
su obra el elemento que se vuelve el centro de la composición que realiza, aunque plasme
varias imágenes, sin embargo, existe una que es la idea principal de su inspiración y en
torno a ella, todos los elementos se conjugan y combinan, dando origen a una obra
catártica, como lo es el Guernica de Picasso.
La expresión de cada autor varía en relación a su vida, experiencia, sensibilidad, etc.,
aunque sus manifestaciones estéticas sean abstractas, logran en el espectador emociones,
al desarrollar su imaginación para poder entender el significado de la obra, es decir, logran
cautivar su mirada a través del uso de figuras, colores, texturas, etc.
El manejo de las imágenes abstractas permite representar más emociones y conceptos, que
se dejan a la interpretación de los espectadores, ya que las representaciones de esta
naturaleza tienen más subjetividad, dirigiendo a los amantes del arte a realizar esfuerzos
mayores de imaginación, para comprender los elementos que conforman la obra.
Los conocedores del arte analizan las obras, desde las combinaciones, gamas de colores,
difuminados, colorimetría, empleo de la perspectiva, distancia del observador, así como el
acomodo de los imágenes que utilizó el artista para dar sentido a su obra.
Hoy en día es complicado tener una definición exacta de la expresión artística, ya que
está presenta muchos puntos de análisis, desde los artistas gráficos, escritores,
poetas, escultores, diseñadores, fotógrafos, etc., sin embargo, es un medio de
comunicación, a través del cual el hombre genera una conexión, al tratar de
expresar sus ideas, pensamientos, sentimientos, emociones, etc., lo importantes
es lograr cautivar a los espectadores, lo cual no es tarea fácil, ya que requiere
del dominio de ciertas técnicas, teorías y conceptos, así como estar empapado
del arte en todas sus facetas, de tal manera
que, se comprenda la transformación del arte y el impacto que este proceso ha generado en
la sociedad.
En lo personal valoro el trabajo de los artesanos Mexicanos, ya que realizan obras de arte
con un debido detalle, cuidando la forma en que dan a conocer una cultura determinada,
empleando combinaciones de colores y texturas, tomadas de la naturaleza o del medio
donde viven, dando origen a obras de arte que se cotizan a precios muy elevados en el
extranjero, razón por la cual debemos sentirnos orgullosos de la labor que llevan a cabo.
Considero que la expresión artística es el medio de comunicación, por el cual el ser se
expresa en todos sus sentidos, desde la publicación de una obra literaria, el diseño de un
comercial, una fotografía que presenta una realidad, una pintura que muestra imágenes, la
escultura que detalla al hombre como lo es “La Piedad” de Miguel Ángel o la abstracción
absoluta de un concepto, como lo es la composición geométrica en metal de las obras del
escultor chihuahuense Sebastián.
Enrique Carbajal "Sebastián" desde finales de los años sesenta empezó a crear una
obra escultórica única en la tradición mexicana y latinoamericana. Su vocación
constructiva, alimentada por los principios del arte cinético, se expresó inicialmente
en la creación de esculturas transformables, o desdoblables, entre las cuales su cubo
2. flexible bautizado como Leonardo 4 constituye un ejemplo inigualable” Página Web
tierra
Lo importante es entender como el hombre al estar en continua evolución, ha tratado de
encontrar un medio a través del cual, se inicie el proceso de comunicación con sus
semejantes, por ello, invito a reflexionar y conocer la vida y obras del autor, ya que ello
permite apreciar el contexto bajo el cual se inspiró para dar creación a su obra.
3.
4. LOS ORÍGENES DE MESOAMÉRICA
En el mundo se conocen solo seis lugares donde se originó la civilización. En Egipto,
Mesopotamia, China e India, donde las ciudades crecieron a la orilla de los grandes ríos;
en Mesoamérica y los Andes, se fundaron en las regiones montañosas. Mesoamérica se
extendía desde Sinaloa y Zacatecas, en México, hasta Centroamérica. En un área
compleja y montañosa donde se dan los climas y paisajes, de modo que la variedad de
recursos es enorme. Además los valles son tierras fértiles y agua abundante son
numerosos y dieron sustento a una gran cantidad de personas.
Las diferentes regiones de Mesoamérica intercambiaban sus productos típicos; así, el
contacto entre las diversas facilitó la difusión de ideas y los descubrimientos. Como
resultado de lo anterior, todos los pueblos de Mesoamérica compartieron creencias y
costumbres parecidas acerca de la religión, la política y la organización social. Durante
milenios el hombre americano tuvo que sortear grandes dificultades para alcanzar la
civilización. Cuarenta Mil años atrás en la edad Glacial, el hombre cruzo el estrecho de
Bering y colonizó el continente americano. La retirada de las glaciaciones dio origen a
un nuevo clima con una estación lluviosa y otra de sequía, por lo que los grupos
humanos tuvieron que adaptarse: basaron su alimentación en frutos, hierbas y semillas,
seleccionaron las plantas más productivas y finalmente lograron domesticarlas. Para
sobrevivir, el hombre construyó sus casa cerca de los plantíos; así surgieron las
primeras aldeas, donde se desarrollo la alfarería, el comercio, la vida en comunidad, la
política y la religión.
Las primeras civilizaciones de México
La historia del México prehispánico en tres grandes épocas el preclásico, el clásico y
pos-clásico. El periodo pre-clásico o formativo duro desde 1600 a.C. hasta los inicios de
nuestra era; en ese tiempo, la geste que vivía en aldeas y pueblos comenzó a construir
los primeros templos para adorar a los dioses. El periodo clásico (del año 0 al 900 d.C.)
fue la época de las primeras ciudades, durante el cual aparecieron la escritura
jeroglífica, los mercados, los palacios, los ejércitos y la administración pública;
entonces florecieron la religión y las artes en todo Mesoamérica. Tikal y Copán,
Palenque, Calakmul y muchas otras ciudades surgieron en medio de las selvas mayas en
sus monumentos quedó plasmada la historia de sus gobernantes: su nacimiento, su
ascenso al trono, sus matrimonios y sus hazañas guerreras.
En el centro de México la gran metrópoli de Teotihuacan dominó sin rivales.
Sacerdotes, guerreros, artesanos y comerciantes fueron la base de su poder.
En el Golfo de México, en sitios como El Tajín, Remojadas y otros, se desarrollo una
cultura partículas conocida por sus caritas de barro sonrientes y por las extrañas
esculturas que representaban yugos, palmas y hachas.
En Oaxaca; Monte Albán fue el sitio más poderoso de la religión; sus conquistas se
extendieron por todo el estado y llegó a tener colonias de artesanos en la misma ciudad
de Teotihuacan.
5. Entre los años 700 y 900 d.C., el Mundo clásico se derrumbó: Teotihuacan fue
abandonada y las ciudades mayas tragadas por la selva. los sobrevivientes de las
antiguas ciudades se reorganizaron, crearon nuevos reinos y conquistaron nuevos
imperios. Esta nueva época de esplendor, conocida como la época posclásica, fue
interrumpida por la llegada de los españoles.
La época de los imperios
Nadie sabe con seguridad cuales fueron las causas que motivaron la caída de
Teotihuacan o el colapso de las antiguas ciudades mayas, pero el hecho es que después
de 900 d.C. el mundo mesoamericano comenzó a reorganizarse bajo nuevas reglas. Fue
una época de inestabilidad general; surgían pequeñas ciudades que se volvían poderosas
por algún tiempo, luego desaparecían al ser conquistada por nuevos reinos.
Las nuevas poblaciones se ubicaron entonces en lugares de fácil defensa, construyeron
fosos y murallas alrededor de sus casas y templos, y en lo alto de las montañas
levantaron fortalezas.
Desde Yucatán hasta Sinaloa aparecieron imágenes de guerreros relacionadas al culto
de Quetzalcóatl -Kukulkán; procesiones de soldados y batallas adornando los palacios
de Tula, Chichén Itzá y Cacaxtla, y las representaciones de sacrificios humanos se
volvieron más comunes. Una nueva ideología se difundío por todas partes. De acuerdo
con ella, la guerra y el sacrificio eran necesarios para mantener el sol en si lucha diaria
contra las fuerzas de la oscuridad y la noche, mientras que los caballeros águila y los
caballeros tigre luchaban sin tregua para asegurar el movimiento de los astros. En estos
tiempos difíciles, se formaron los imperios que después dominarían gran parte de
Mesoamérica, el tolteca, el tarasco y el azteca; en sus orgullosas capitales prosperaron
las artes -como la orfebrería y la pintura de códices- y se establecieron escuelas dónde
enseñaban historia, religión, artes guerreras, canto y administración pública. Mientras
los pueblos conquistados trabajaban la tierra y pagaban tributos para mantener el
esplendor de las nuevas metrópolis.
Los pueblos indígenas a la llegada de los españoles
Cuando los conquistadores entraron en la antigua Tenochtitlán, quedaron tan
asombrados que creyeron estar viendo visiones. En medio de una laguna se había
construido una ciudad mayor que cualquier otra contemporánea de Europa, enormes
templos se levantaban sobre el agua como un gran espejismo. Moctezuma, el
gobernante mexíca, tenía millones de súbditos a sus ordenes y de sus vastos dominios
llegaban los productos más variados al gran Mercado de Tlatelolco, quizá el mas grande
del mundo de su época. Templos, canales, calzadas, palacios y jardines embellecían la
capital azteca.
En el territorio de Mesoamérica vivían muchos pueblos con lenguas y costumbres
distintas: mayas, zapotecos, mixtecos, huastecos, totonacos, tlaxcaltecas, chiapas, etc.,
organizados en cientos de pequeños reinos que comprendían apenas una ciudad capital y
algunas ciudades menores.
Los pueblos indígenas crearon una civilización original que logró grandes avances en la
medicina, las matemáticas, la ingeniería, las artes y la astronomía. Detrás de la riqueza y
el esplendor, estaban las guerras constantes, los sacrificios de prisioneros, y el odio
latente de los pueblos sojuzgados que conquistados y sometidos por los grandes
6. imperios guerreros, ansiaban sacudirse el yugo que se les había impuesto. También los
señoríos independientes sufrían el constante acoso de los ejércitos aztecas.