El Manierismo fue un estilo artístico que prevaleció en Italia desde finales del Alto Renacimiento hasta principios del período Barroco, alrededor del año 1600. Se caracterizó por figuras serpentinadas y una ruptura del equilibrio clásico, con edificios que perdieron claridad y solemnidad al multiplicar elementos arquitectónicos sin función. Esculturas como Perseo de Benvenuto Cellini mostraban gran precisión y refinamiento, mientras que la arquitectura de Palladio y Vignola añadió elementos sin propósito