Conceptos básicos para Instituto Bíblico en el tema Homilética

1. Tarea No. 1
EL PREDICADOR Y EL MENSAJE
Por: Liliana Margarita Barros Tafur
Respuestas presentadas como requisito académico
Módulo: HOMILÉTICA
Maestro:
GIOVANNI MARTÍNEZ MUÑOZ
Pastor
INSTITUTO BÍBLICO
TERCER AÑO
Abril 5 - 2017
Barranquilla-Colombia

2. INTRODUCCIÓN
Marcos 16:16. El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere, será condenado.
17. Y estas señales seguirán a los que creen: En mi nombre echarán fuera demonios; hablarán nuevas lenguas;
18. tomarán en las manos serpientes, y si bebieren cosa mortífera, no les hará daño; sobre los enfermos pondrán sus manos,
y sanarán.
19. Y el Señor, después que les habló, fue recibido arriba en el cielo, y se sentó a la diestra de Dios.
20. Y ellos, saliendo, predicaron en todas partes, y confirmando la palabra con las señales que la
seguían. Amén.
Mateo 28:19. Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y
del Espíritu Santo;
20. enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el
fin del mundo. Amén.
Estos dos textos describen lo que conocemos como “La Gran Comisión”, la labor que Nuestro
Señor Jesucristo encomendó a los discípulos haciéndola extensiva a todos los creyentes
durante la dispensación de la Gracia.
La predicación es un mandamiento y si bien estos textos nos enseñan que en esta labor
contamos con la ayuda de Nuestro Señor Jesucristo a través del Espíritu Santo, también
observamos que todo lo que Jesús mandó debe ser “enseñado” con el objetivo de establecer
las condiciones para que el oyente se convierta en un creyente bautizado, de manera que si
el predicador no tiene la comunión con Dios que lo lleva a humillarse y a ser capacitado, está
en riesgo de ser responsable directo de que una persona no crea y por la consecuente
condenación.
De lo anterior establezco la importancia de desarrollar las respuestas a las preguntas que
generan este trabajo escrito puesto que para que el evangelio sea predicado se necesita
primero el Espíritu Santo y generalmente un predicador, un mensaje ceñido a La Palabra de
Dios y uno o más oyentes.

3. 1. CUÁLES SON LAS ACTITUDES CORRECTAS DE UN PREDICADOR?
a. Una vida de consagración y abnegación.
Hechos 7 nos muestra a Esteban predicando por última vez durante 52 versículos y
previamente Hch 6:5, 8, lo describe con un varón lleno de fé, lleno del Espíritu Santo, lleno
de gracia y de poder. Estas características sumadas a su sacrificio solo pueden provenir
de un siervo con una vida de consagración y abnegación.
b. Estudiante de La Palabra.
Describiendo a los obispos…
Tito 1:9 retenedor de la palabra fiel tal como
ha sido enseñada,
1 Tim. 3:2 Pero es necesario que el obispo sea
irreprensible, marido de una sola mujer,
sobrio, prudente, decoroso, hospedador,
apto para enseñar;
Pablo lo expresa…
1 Cor 11:6 Pues aunque sea tosco en la
palabra, no lo soy en el conocimiento; en
todo y por todo os lo hemos demostrado.
c. Vida devocional continua.
Hechos 1:14 Todos éstos perseveraban unánimes en oración y ruego, con las mujeres, y con María
la madre de Jesús, y con sus hermanos.
Dentro de este grupo descrito en el texto anterior se encontraban todos aquellos a
quienes se les encomendó la Gran Comisión.
d. Testimonio digno de imitar.
Describiendo las características de los obispos y diáconos…
Hechos 3:7 También es necesario que tenga buen testimonio de los de afuera, para que no caiga
en descrédito y en lazo del diablo. 3:9 que guarden el misterio de la fe con limpia conciencia.
Pablo mismo lo plasma en…
1 Cor 11:1 Sed imitadores de mí, así como yo de Cristo.
Filipenses 3:17 Hermanos, sed imitadores de mí, y mirad a los que así se conducen según el
ejemplo que tenéis en nosotros.
De los pastores nos enseña…
Hebreos 13:7 Acordaos de vuestros pastores, que os hablaron la palabra de Dios; considerad cuál
haya sido el resultado de su conducta, e imitad su fe.

4. e. Buen aspecto personal.
1 Tim. 3:2 Pero es necesario que el obispo sea irreprensible, marido de una sola mujer, sobrio,
prudente, decoroso, hospedador, apto para enseñar;
Dios estableció pautas claras en el antiguo testamento en cuanto a las vestiduras
sacerdotales, no hay motivo para que esto haya cambiado. Cuando ministramos debemos
guardar no solamente reverencia sino también cuidado de nuestra apariencia. Si lo hacemos
ante simples mortales que tienen cierto grado de eminencia, cuanto más si estamos delante
de Nuestro Creador, Padre, Salvador y Consolador.
f. Adaptabilidad al medio.
Pablo inspirado por el Espíritu Santo lo expresa de esta manera…

5. 1 Cor 9:19 Por lo cual, siendo libre de todos, me
he hecho siervo de todos para ganar a mayor
número. 9:20 Me he hecho a los judíos como
judío, para ganar a los judíos; a los que están
sujetos a la ley (aunque yo no esté sujeto a la
ley) como sujeto a la ley, para ganar a los que
están sujetos a la ley; 9:21 a los que están sin
ley, como si yo estuviera sin ley (no estando yo
sin ley de Dios, sino bajo la ley de Cristo), para
ganar a los que están sin ley. 9:22 Me he hecho
débil a los débiles, para ganar a los débiles; a
todos me he hecho de todo, para que de todos
modos salve a algunos.
Filipenses 4:12 Sé vivir humildemente, y sé tener
abundancia; en todo y por todo estoy enseñado, así para estar saciado como para tener hambre,
así para tener abundancia como para padecer necesidad.
g. Que inspire confianza y entusiasmo.
2 Tim 1:3-14 nos muestra al apóstol Pablo transmitiendo a
Timoteo confianza y entusiasmo para seguir adelante
Y Pedro expresa…
1 Pedro 5:2 Apacentad la grey de Dios que
está entre vosotros, cuidando de ella, no
por fuerza, sino voluntariamente; no por
ganancia deshonesta, sino con ánimo
pronto;
h. Naturalidad.
2 Cor 11:13 Porque éstos son falsos apóstoles, obreros fraudulentos, que se disfrazan como
apóstoles de Cristo.
Cuando el predicador tiene comunión con Dios es una persona segura, conoce sus
debilidades, sabe que sus fortalezas provienen de Dios y al abrir su boca el Espíritu Santo
la llena. “Predicadores” sin comunión buscan imitar gestos, movimientos, palabras y
estilos que son propios de siervos fieles perdiendo credibilidad ante una audiencia
consagrada, aprenden a motivar antes que a ministrar, se convierten en entusiastas
presentadores de un show y no en predicadores fieles del evangelio.

6. La falta de naturalidad de un predicador produce distracción y apatía en medio de los
oyentes. Aún siendo un ministro consagrado se puede llegar a copiar ciertos gestos,
entonaciones y acentos de otros predicadores de manera involuntaria por la mucha
observación y hasta por admiración, sin embargo, el siervo de Dios debe evitar esto y ser
original y espontaneo para que Dios utilice las características innatas que le otorgó.
i. Sabiduría y autoridad.
Manifestadas en el ministerio del apóstol Pablo,
Hechos 17:22 Entonces Pablo, puesto en pie en medio del areópago, dijo: “varones atenienses,
en todo observo que sois muy religiosos; 17:23 porque pasando y mirando vuestros santuarios,
hallé también un altar en el cual estaba esta inscripción: Al Dios no conocido. Al que vosotros
adoráis, pues, sin conocerle, es a quien yo os anuncio”.
Hechos 16:18 Y esto lo hacía por muchos días; mas desagradando a Pablo, éste se volvió y dijo al
espíritu: Te mando en el nombre de Jesucristo, que salgas de ella. Y salió en aquella misma hora.
j. Integridad y seriedad.
Le aconseja el apóstol Pablo a Tito, al cual encomendó una labor (Tito 1:5 “Por esta causa
te dejé en Creta, para que corrigieses lo deficiente, y establecieses ancianos en cada
ciudad, así como yo te mandé;”)
Tito 2:7 presentándote tú en todo como ejemplo de buenas obras; en la enseñanza mostrando
integridad, seriedad,
k. Algunas más …
El predicador ejemplar gozará a lo máximo
su tiempo en la congregación y trabajará de
una manera eficaz con los hermanos y por
ende será un buen ejemplo en cuanto al
evangelismo personal (Romanos 15:19), una
vida de pureza moral y espiritual (1 Pedro
1:13-16), correcto sentido de las prioridades
(Mateo 6:33), manera de hablar (Col. 4:6)
2. QUÉ DEBE EVITAR UN PREDICADOR?
a. Fijar la vista.
Se refiere a que no es apropiado mantener la mirada fija en alguna persona en particular
o en algún punto u objeto del sitio en donde se está predicando.
Al mirar constantemente el techo o el suelo, por ejemplo, transmite distracción, apatía y
denota inseguridad.
b. Jugar con algún objeto.

7. Al manipular con demasía el pañuelo, lápiz, corbata, cable del micrófono, lentes, las
notas, las hojas de la Biblia, distrae al oyente y denota nerviosismo.
c. Contar chistes.
Como lo expresé en la introducción, el propósito de predicar el evangelio es que los
oyentes crean para que sean salvos. Un predicador puede relatar anécdotas risibles
referentes al tema del mensaje, sin embargo, hay que tener cuidado de no caer en el
extremo porque esto es de mal gusto y elimina el sentido de espiritualidad del sermón.
No se debe perder de vista que a la audiencia hay que ofrecerle el debido respeto y
algunos predicadores hacen notorias las características físicas de algún oyente para
hacer comentarios que lejos de resultar agradables se convierten en una burla evidente
e irrespetuosa.
Por otro lado, cuando nos congregamos no es entretenimiento lo que vamos a buscar
sino una Palabra que produzca el cambio que necesitamos para comportarnos con la
dignidad que Cristo nos dió para ser llamados hijos de Dios.
d. Muletillas.
Cuando un predicador lleva una vida consagrada y ha apartado suficiente tiempo de
estudio en comunión con Dios para preparar un sermón en particular, es un siervo seguro
de lo que Dios quiere transmitir a las almas y por lo tanto el mensaje fluirá sin dar lugar a
apoyaturas verbales automáticas que se generan por mal hábito cuando hay inseguridad
en lo que se va a decir. Las muletillas distraen y aburren a la audiencia.
Cuando se trata de salvar las dificultades que la sintaxis del idioma nos impone el
predicador puede usar recursos orales para interactuar con la audiencia y generar un
corto espacio de participación que le dé suficiente tiempo para recuperarse de algún
bloqueo mental fisiológico.
Cuando se presenta dificultad para expresar una idea debido a un ataque de las tinieblas,
el predicador debe usar las armas espirituales para vencer un bloqueo mental espiritual
y puede hacerlo en conjunto con los creyentes presentes.
2 Cor10:4 porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la
destrucción de fortalezas, 10:5 derribando argumentos y toda altivez que se levanta contra el
conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo,
Desde chicos en nuestra formación académica las muletillas han sido signo de
inseguridad en el conocimiento por una falta de dedicación al estudio, siendo
predicadores también significa lo mismo y se llega al punto expresar muletillas que no
encajan con una frase dicha previamente, por ejemplo:
“… cuando oyó Sanbalat que el pueblo de Dios edificaba el muro, se enojó y se enfureció en
gran manera, e hizo escarnio de los judíos” --- “ Gloria a Dios, Aleluya! Bendito y alabado sea
Nuestro Dios!”

8. e. Extenderse en el tiempo otorgado para desarrollar el mensaje.
Es cierto que Dios es quien habla a través de sus siervos, sin embargo hay
predicadores que siguen exponiendo sus ideas aún después que el Espíritu Santo
a terminado de hablar. En estos casos es evidente cuando el Espíritu Santo deja
de actuar y el sermón se vuelve vacío y sin propósito, la audiencia se fastidia, se
desconcentra y pronto olvida el rhema que atrajo su atención.
Hay predicadores que piensan que un sermón extenso genera convicción y
aprobación no solo de la audiencia sino de los líderes presentes, sin embargo,
cuando en realidad estamos prestando atención al sermón es fácil darse cuenta
que estos predicadores repiten lo mismo expresando una misma idea de maneras
diferentes acompañándolas de exclamaciones de adoración y alabanzas para
generar cierto estado de emoción en el público.
Esto produce que al finalizar un servicio las personas no tengan claro cuál fue el
tema del mensaje aunque tengan las endorfinas al tope y el predicador se
convierte en un productor de “oidores olvidadizos” y no en productor de
“hacedores de La Palabra” porque nadie puede poner en práctica lo que ya olvidó
así como no puede haber creyentes si no hay quien les predique.
Santiago 1:23 Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es
semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural. 1:24 Porque él se
considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era. 1:25 Mas el que mira atentamente
en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino
hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace.
.
Otra razón por la que un predicador no debe extenderse es por sujeción a las
autoridades puestas por Dios, si el pastor a cargo es un siervo de Dios consagrado
y en plena comunión, y le otorga un tiempo para desarrollar el sermón, el Espíritu
Santo no hará nada para generar desobediencia en el ministro que predica y
Nuestro Dios tiene suficiente Poder para lograr el propósito de Su Palabra tanto
con el uso de muchas frases como con muy pocas.
En otras ocasiones hay que tener en
cuenta, si una lluvia se avecina, si el
lugar de la reunión en medio de la
noche es bastante alejado de los
hogares de los miembros, si en medio
de la congragación hay invitados que
llegan con cierta necesidad o no fue
fácil lograr su asistencia y
generalmente no están
acostumbrados a permanecer mucho
tiempo sentados en un auditorio, estos
se duermen, se aburren rápido y se
van influenciados por el enemigo
quien aprovechó esta falta de
discernimiento e interés del predicador.

9. 3. TRES COSAS QUE DEBE CONTENER UN MENSAJE.
Para poder desarrollar esta pregunta he entendido por “cosas” que debe contener un
mensaje como refiriéndose a “elementos” y a “características”.
Inicio describiendo “los elementos” en el punto 3.1 y continuaré describiendo “las características”
en el punto 3.2
3.1. “ELEMENTOS” DEL MENSAJE.
No son 3, son 4 a saber:
Los oyentes
El propósito del mensaje
El tema
El texto
3.1.1. Los oyentes.
Rom 10:14 ¿Cómo, pues, invocarán a aquel en el cual no han creído? ¿Y cómo creerán en
aquel de quien no han oído? ¿Y cómo oirán sin haber quien les predique?
El predicador debe tener en cuenta el tipo de personas que va a encontrar en un
auditorio, el mensaje debe girar en torno a ellas para lograr un entendimiento y el
predicador debe ser sensible a la Voz de Dios para decir algo que afecte verdaderamente
sus vidas.
La Biblia lo tiene inmerso en su estructura, cada libro se escribió teniendo en cuenta
ciertos grupos de personas.
La capacidad intelectual y la cultura de los oyentes determinará el vocabulario que se
emplee al predicar y el ambiente en el que viven determinará las ilustraciones.

10. 3.1.2. El propósito del mensaje.
Tener claro el propósito del mensaje hace efectiva la predicación porque cuando se sabe
lo que se quiere lograr o a donde apuntar (la meta), se eliminarán rodeos e ideas sueltas
que no edifiquen.
Para determinar el propósito del mensaje es necesario tener la guía del Espíritu Santo
para responder preguntas como:
Cuál es la necesidad de los oyentes?
Necesitan tener una experiencia personal con Cristo?
Les falta ejercer la fé?
Se les ha hablado de guardar con paciencia la venida de Nuestro Señor
Jesucristo?
3.1.3. El tema.
Es la idea principal del mensaje expresada en una frase breve. Puede ser de dos tipos:
- General: por ejemplo “El carácter del cristiano”
- Específico: por ejemplo “El carácter del cristiano fiel en medio del desánimo”
Las fuentes para obtener el tema de un mensaje pueden ser:
- Primeramente, la dirección del Espíritu Santo a través de la oración y el estudio de La
Palabra.
- Las necesidades espirituales de los oyentes sin llegar al extremo de enfocar el
mensaje en una persona o familia en particular por haber conocido cierta situación;
cuando conversamos con personas inconversas y miembros de la iglesia podemos
descubrir necesidades comunes a cada grupo.
- Escuchando o leyendo sermones predicados por otros ministros si llegar al extremo
de terminar repitiendo lo mismo sin escudriñar para aportar enfoques adicionales.
- Considerando todas las cosas que nos rodean. A diario nos relacionamos con la gente
en distintos ambientes.
3.1.4. El texto.
La palabra “texto” procede del latín “textus” y significa tejido, enlace, trama. De ahí que
los textos presenten muchos elementos relacionados entre sí, las palabras, de forma
lineal, pero a veces formando un entramado en el que es fácil perderse.
El texto de un mensaje se refiere al pasaje bíblico que apoya el tema.
Cómo se escoge el texto apropiado?
- Debe ilustrar el tema del mensaje.
- Debe ser claramente entendido por el predicador.
- Debe ser bien interpretado.

11. Cómo podemos hacer una buena interpretación del texto?
- Identificar y diferenciar entre el lenguaje figurado y el literal
- Conocer el significado de las palabras contenidas.
- Considerar el tiempo y el ambiente en el cual se desarrollan los eventos relatados.
- Comparar varios pasajes para confirmar lo revelado.
- Conocer la cultura y geografía bíblicas.
3.2. “CARACTERÍSTICAS” QUE DEBE TENER UN SERMÓN.
También encontramos 4 características básicas:
Unidad: las divisiones del sermón deben ir relacionadas con el tema o título del
mensaje.
Orden: cada parte del sermón debe ser tratado en orden de prioridades, de lo
general a lo particular o de lo particular a lo general según la estructura planteada.
Proporción: conociendo el tiempo otorgado para desarrollar el mensaje, el
predicador debe distribuirlo proporcionalmente a las divisiones del sermón y no
dedicarle demasiado tiempo a enfoques de mínima importancia.
Culminación o clímax: el final del mensaje debe dar paso a una invitación
específica según el tema que se trató, y en la medida en que haya inconversos
en medio de la congregación, debe dar paso para que se invite a esas almas a
recibir a Jesucristo como Único Señor y Salvador.
CONCLUSIÓN.
La predicación del evangelio contiene el propósito de La Salvación y merece todo el esfuerzo
y la dedicación. Dios no es Dios de confusión sino de Paz (1Cor 14:33) por tanto no existe la
semilla lanzada al azar como lo interpretan algunos predicadores al referirse a la parábola
del sembrador. La predicación es un arte que debe ser dirigido por Dios.
Este relato muestra lo que sucede con el oyente cuando su corazón está en cada una de las
condiciones representadas en los diferentes ambientes (Mt 13:19-23), no es un llamado a la
resignación cuando la semilla cae en tierra no fértil, es un llamado al trabajo y al esfuerzo
para fertilizar un terreno en donde la semilla pueda fructificar.
BIBLIOGRAFÍA
BIBLIA DEVOCIONAL DE ESTUDIO. Reina – Valera 1960. Liga bíblica. 1991
LA ACTITUD BÍBLICA DEL MINISTRO DE DIOS. por Willie A. Alvarenga.
HOMILÉTICA. Módulo de 1er año. Instituto Bíblico Hosanna Linaje Escogido.
Septiembre-2016