1. Contaminación del aire:
La polución del aire es la acumulación en la atmosfera que producen y amenazan
la salud humana, en otros seres vivos y materiales.
La generación de energía y calor son las mayores fuentes de contaminación, los
procesos industriales, la quema de desperdicios sólidos y especialmente el
transporte.
Las seis sustancias más polucionantes son los hidrocarburos, los óxidos de
carbono, el monóxido de carbono, los oxidantes fotoquímicos, las partículas y el
dióxido de azufre. Dentro de estas sustancias, las que presentan mayores riesgos
son las partículas de suspensión, la contaminación en espacios cerrados, la
inhalación de metales pesados por ejemplo el plomo…
Los principales fines de la contaminación se originan en la utilización de
combustibles fósiles, la producción industrial y las emisiones de los vehículos. La
contaminación atmosférica tiende a aumentar con el nivel económico del lugar. Sin
embargo se observa que en lugares en donde hay un promedio de ingresos altos,
son muy bajos, inclusive más bajos que en lugares en donde hay un promedio de
ingresos bajos.
Consecuencias:
La contaminación del aire puede causar trastornos como ardor en la nariz y los
ojos, picazón e irritación de la garganta, y problemas respiratorios. Algunas
sustancias pueden causar cáncer, daños cerebrales, malformaciones congénitas y
trastornos en el sistema nervioso, así como lesiones de las vías respiratorias y
lesiones pulmonares. A determinado tiempo de exposición, algunos contaminantes
pueden llegar a causar la muerte.
La polución también provoca daños en el medio ambiente afectando la fauna, la
flora arbórea y los lagos.
Julieth Paola Castillo