1. Mal uso de los recursos naturales: Problemas y Soluciones
El desarrollo de la modernidad y de su modo de producción característico, el
capitalismo, ha supuesto que el desarrollo de los pueblos se de en base a la
producción, venta e intercambio de mercancías, cuya materia prima proviene de
la extracción y explotación de los recursos naturales. Además, la inmensa
mayoría de energía necesaria para la transformación de materias primas en
productos elaborados, como su transporte, proviene de la extracción y
explotación de recursos naturales energéticos como petróleo, gas, carbón y
minerales diversos.
En las últimas décadas la preocupación por el cambio climático, la reducción
de fuentes de energía natural no renovable ha generado gran preocupación en
los Estados y corporaciones ya que se ha tomado en cuenta algo, que en el siglo
XX no parecía importante, que es el agotamiento de los recursos naturales
debido a la sobre explotación. La duda más importante respecto a esto, que
desarrollaremos en este ensayo, es ¿Cómo es posible que existan recursos
naturales suficientes para satisfacer las necesidades básicas de toda la
población mundial de manera sostenible y que a pesar de ello los estemos
agotando y existen personas en líneas extremas de pobreza?
La sobre explotación de recursos naturales es un problema con distintas
aristas, que debe ser analizado y resuelto de manera integral. El primero de ellos,
y que abarca a todos los otros es la forma en que se organizan la mayoría de las
sociedades en la actualidad, los Estado-Nación modernos con modos de
producción capitalistas. Esta forma de producción está basada en la
acumulación de recursos económicos en manos de grandes corporaciones, y
esto se da en buena medida a partir de la depredación de los recursos naturales
y humanos, sobre todo de los países de la periferia que han sido empobrecidos
y explotados por las economías más fuertes a nivel mundial y son vistos como
las fuentes de dichos recursos naturales. (Glinchikova,2007 ; Fernández,2010)
América Central, América del Sur, África y determinados sectores de Asia,
son los poseedores de la mayor parte de recursos naturales renovables y no
renovables del mundo, y sin embargo son los países de Europa y América del
Norte, así como las economías fuertes de Asia quienes mayor provecho sacan
2. de estos recursos. Es decir que los países poseedores de estos recursos no son
necesariamente quienes sacan beneficio de estos. Al ser países empobrecidos,
con gobiernos débiles o democracias fallidas, o conflictos civiles, no se
preocupan por el control de la explotación de estos recursos, ni por el cambio de
la matriz productiva para que sus economías no dependan de la explotación de
sus recursos, menos aún por las medidas de seguridad ambiental y humana
adecuadas para la explotación de estos recursos. (Heinberg, 2009)
Existen riesgos ambientales y humanos directamente asociados a la
extracción de estos recursos naturales, y que no siempre son considerados. Es
responsabilidad de quienes los extraen y explotan tener en cuenta este tipo de
riesgos, y no ocurre. Así tenemos el caso emblemático en Ecuador de Chevron-
Texaco, que producto de la explotación petrolera en la Amazonía ecuatoriana
derramó cientos de barriles de petróleo sobre el río y las tierras de una población
con un territorio similar a El Salvador, exactamente de 28.5 millones de litros de
petróleo en bruto y 59.9 mil millones de litros de residuos de petróleo, generando
un ecocidio jamás visto y del que no se ha hecho responsable. En este caso, la
población de la Amazonía ecuatoriana no solo no se benefició de la extracción
de petróleo de sus zonas de vida, sino que fue inmensamente perjudicada por la
contaminación de sus tierras, su agua y sus fuentes de vida. (Ministerio de
Relaciones Exteriores y Movilidad Humana, 2015)
Nuestras formas de vida actuales no son sostenibles a mediano plazo, nos
estamos acabando los recursos naturales no renovables, consumimos de
manera voraz y contaminamos más de lo que somos capaces de limpiar. No me
refiero a lo que hacemos individualmente, únicamente, sino y, sobre todo, a las
formas de vida que tenemos. Una persona promedio consume lo que 2,7
hectáreas de tierra producen, más o menos, mientras que solo tiene a su
disposición 1,8 hectáreas para que todas y todos puedan acceder de la misma
manera a los recursos. (Ecoosfera, 2016; Fernández, 2010). Nuevamente,
nuestra forma de vida y de consumo de los recursos no es sostenible.
El año pasado, es decir en el 2018, el 1 de agosto se conoció como el día del
Overshoot, lo que quiere decir que ese día agotamos todos los recursos
naturales que tanto la Tierra como la gestión humana somos capaces de producir
dentro de un año. (El Financiero, 2018) ¿Qué significa? Porque, de todas
3. maneras, desde el 2 de agosto no es que escaseó el agua, el petróleo, las frutas
o las verduras, y seguimos consumiendo lo mismo que cualquier otro día del año.
Significa que a partir del día 2 de agosto empezamos a consumir los recursos
naturales que deberíamos consumir este año, 2019, y que este año cuando nos
acabemos los recursos naturales del año, consumiremos los del 2020, y así de
manera sucesiva, hasta que la vida en el planeta sea insostenible por el
agotamiento de los recursos naturales.
Existen iniciativas ciudadanas, locales, y hasta gubernamentales para
detener esto, que van desde campañas para que no gastemos de manera
inadecuada el agua, al bañarnos, cocinar los alimentos o lavar los autos, que no
pidamos sorbete con las bebidas y que no usemos bolsas plásticas, hasta un día
al año sin auto para impulsar otras formas de movilidad urbana. Sin embargo, y
pese a que son altamente reconocibles estas iniciativas, y que definidamente
todos podemos aportar granitos de arena al planeta, no son, y no serán
suficientes. Como mencionan autores como Lowy (2012), la alternativa al
desastre ambiental, social y civilizatorio que genera el capitalismo, son otros
modelos de desarrollo que sean realmente integrales y sostenibles a largo plazo.
Los sorbetes, las bolsas plásticas, o el dióxido de carbono de un día sin autos,
no son suficientes para detener el tren de la historia que avanza hacia su propia
destrucción ecológica, requerimos transformar de manera radical nuestras vidas
de consumo, nuestros Estados que alimentan este sistema capitalista devorador,
de la misma manera que nuestra visión antropocentrista del mundo; por una que
comprenda que somos solo una parte del planeta, y que sino avanzamos hacia
otras formas de vida, nuestras futuras generaciones no tendrán un hogar, en el
sentido amplio de la palabra, que habitar.
No hace falta que los grandes Estados gasten recursos humanos y
económicos infinitos para buscar vida, agua o recursos en otro planeta, hace
falta, que seamos capaces de buscar modos de vida sostenibles en este planeta
que habitamos, que seamos capaces de cuidar estos recursos que ya tenemos.
Necesitamos tomar compromisos personales, sin duda, pero además exigir en
cada esfera de incidencia que tengamos, la familia, el aula de clases, el Estado,
las leyes, ordenanzas, decretos, etc., que se considere una prioridad avanzar
4. hacia mejores relaciones con la naturaleza, sus recursos y mejores formas de
vida que nos permitan vivir en este planeta de manera digna y sostenible.
Bibliografía y Referencias
Fernández, R. (2010). La Quiebra del Capitalismo Global: 2000-2030: Crisis
multidimensional, caos sistémico, ruina ecológica y guerras por los recursos.
Ecologistas en Acción. Disponible en:
https://www.ecologistasenaccion.org/IMG/pdf/el_inicio_del_fin_de_la_energia_f
osil.pdf [Acceso enero 2019]
Heinberg, R. (2009). Blackout: Coal, climate and the last energy crisis. Ed.
Clairview. Cánada.
Herzog, J. (2012). Entrevista con Edgar Morin: una ecología por el yo y nosotros.
Disponible en: https://www.nexos.com.mx/?p=15044 [Acceso: enero 2019]
Lowy, M. (2012). Ecosocialismo, la alternativa a la catástrofe ecológica. Ed.
Biblioteca Nueva. Madrid.
Ministerio de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana. (2015). El caso
Chevron/Texaco en Ecuador. Una lucha por la justicia social y ambiental.
Fuentes Periodísticas y de Medios Digitales
Ecoosfera (2016). ¿Cuántos recursos consumirás en toda tu vida? Disponible
en: https://ecoosfera.com/2016/07/cuantos-recursos-consumiras-en-toda-tu-
vida-2/ [Acceso enero 2019]
El Financiero (2018). Todavía no acaba el año y ya “agotamos” los recursos
renovables de la Tierra para 2018. Disponible en:
https://www.elfinanciero.com.mx/mundo/todavia-no-acaba-el-ano-y-ya-nos-
acabamos-todos-los-recursos-naturales-overshoot-day. [Acceso enero 2019]