1. Participante: PachecoHuarottoMarghot Adela
LA LENGUA Y LA CULTURA:
La promoción de una lengua –ya sea en el plano nacional o internacional– está
muy relacionada con el ejercicio del poder económico y social. Aunque es común
propugnar que no se debería menospreciar a nadie a causa del carácter
(minoritario) de su idioma, el hecho es que, en un contexto de comunicación
plurilingüe, los hablantes que tienen el idioma preferido por lengua nativa poseen
una ventaja sobre los demás; por eso, es indispensable la recuperación de la
lengua nativa como un recurso poderoso en el aula y en las prácticas educativas y
pedagógicas, teniendo en cuenta que la lengua materna de los niños marcan el
inicio para la construcción de su propio conocimiento, haciéndose más fluida y
horizontal la comunicación. En la actualidad existen políticas nacionales que para
atender a las poblaciones indígenas, pero todavía están lejos de concretar los
fundamentos de su origen y contrarrestar la hegemonía de la cultura dominante,
porque los estudiantes que provienen de otros grupos étnicos viven situaciones
de desventaja didáctica en relación con las exigencias del currículo. Debido a ello
se requieren maestros que hablen las lenguas maternas de los alumnos, que
recuperen los saberes locales y vinculen el currículo escolar con los contenidos
culturalmente significativos para los grupos comunitarios; se hace imprescindible
que el programa curricular incorpore otras lenguas que atienda a la diversidad
cultural y lingüística y no solamente como instrumento ideológico de integración de
los pequeños sectores de la población al contexto Nacional sino como medio de
crecimiento cultural afectivo (Gorza, 2002).
También es de necesidad que los programas de formación docente se incorpore
urgente el quechua (el 90% pertenecen a la serranía) y lengua nativa de la selva
debido a que en la provincia de Ica acoge a estudiantes de esas zonas que migran
como única forma de sobrevivencia y por la discriminación sociocultural que
afrontan.
2. MIRADA DE LA ESCUELA SOBRE LA LENGUA NATIVA: En el Perú se cuenta
con una población de más del 20% (López y Küper 1999:36); por eso se hace
necesario atender la intelectualidad y la identidad de una forma de que por
necesidad haga frente a las relaciones coercitivas de poder; no olvidemos que
cuando se limita al estudiante hablar un idioma “neutral”, se le quita la oportunidad
de comunicarse con su propia lengua en el aula y no solo se le violenta al
individuo como tal, sino que, también se anula a su etnia, cultura, raza, etc. a la
que pertenece eliminando toda una cultura, una forma de ser y de vivir el mundo;
haciendo eco a lo prescrito por: Cummins (2002). Es una muerte lenta y
silenciosa que no deja rastros ni culpables qué perseguir, por lo que se le tolera y
estimula.
Es muy cierto que, los docentes y Autoridades educativas poseen una perspectiva
más amplia del lenguaje y del papel que este desempeña al interior de la escuela,
pero, no consideran importante la recuperación del contexto social y cultural donde
se desarrollan los estudiantes a la hora de definir sus habilidades y posibilidades
de aprendizaje. Así, uno de los objetivos del centro escolar es liberar a los
estudiantes de sus características étnicas para permitirles adquirir los valores y
conductas de la cultura dominante.
Se sugiere que desde el Ministerio se editen programas con características y
perfiles de estudiantes propias de cada región que los maestros contextualicen
sus programaciones educativas y el GORE haga viable el PERCI.
Las instituciones educativas construyan escenarios pluriculturales para la atención
a la diversidad en el marco del enfoque territorial desde los instrumentos de
gestión para fortalecer una sana convivencia. PAT compromiso 5.