1. Hijos de Homero, Bernardo Souvirón.
Por Vera Carrión Salas, 2ºBachillerato A, Griego.
ÍNDICE
1. Resumen
2. De la cultura de vergüenza a la vergonzosa individualidad
2.1. Introducción
2.2. Cultura de vergüenza
2.3. Nacimiento de la individualidad
2.4. Safo
2.4.1 Amor sáfico
2.5. Vergonzosa individualidad
3. Conclusión
1.RESUMEN
A través de este libro, Bernardo Souvirón nos presenta su viaje por el
nacimiento de la cultura occidental. Nos muestra la existencia de la
civilización minoica, una civilización matriarcal y pacífica que existió en el
ámbito mediterráneo y que se vio violentada y reemplazada en varias
ocasiones por otras culturas de origen indoeuropeo, como, por ejemplo,
la cultura micénica, y que finalmente compusieron lo que hoy conocemos
como la Grecia antigua.
Los ejes constituyentes de esta narración son las dos obras
fundamentales de la cultura occidental que nos llegan de la mano de
Homero; la Ilíada y la Odisea. De ellas se desglosan grandes rasgos de la
cultura de la época a la que se refieren, y sirven así a Souvirón de gran
ayuda para extraer y explicar parte de la mentalidad o los mitos sobre los
que se funda nuestra civilización.
Este libro nos transporta desde la ya comentada civilización minoica, de
la que se desprendió gran parte de su esencia que perduraría en todo lo
que a ella siguió, hasta lo que ha terminado siendo occidente, pasando
por la imposición del mundo micénico a la primera cultura o ‘la Edad
Oscura’, tan desconocida incluso hoy en día. También cabe destacar la
importancia del papel de las mujeres en esta época y cómo ha ido
evolucionando (o involucionando) a lo largo del tiempo así como los mitos
relativos a él.
2. Se resume en este libro el carácter tan fundamental de la cultura antigua
que se extendió por todo el mediterráneo, que compone una parte
esencial de nuestra civilización y se extrae en gran medida de las dos
obras homéricas. Es por eso por lo que Souvirón nos considera Hijos de
Homero.
2.De la cultura de vergüenza a la vergonzosa individualidad
2.1. Introducción
Hace casi cuatro mil años se inició en el mediterráneo una civilización que
llegaría a alcanzar un inmenso desarrollo cultural cuyo legado aún le
pertenece. Se trata de Grecia, cuna de la civilización occidental. La
civilización helénica de la Grecia antigua se extendió por la Península
Balcánica, las islas del mar Egeo y las costas de la península de
Anatolia, en la actual Turquía, constituyendo la llamada Hélade. Sus
orígenes proceden de las culturas cretense y micénica, las cuales
fueron suplantadas por otras y estas, a su vez, por muchas otras.
Después de una serie de cambios, retrocesos y progresos en la
cultura de la Grecia antigua, la Guerra de Troya, la Edad Oscura,
desarrollo de las pólis, el apogeo de la aristocracia y los atávicos
enfrentamientos entre Esparta y Atenas, entre otros muchos sucesos,
se desarrolló en el Mediterráneo la cultura griega, caracterizada por
ser una cultura de vergüenza. Basada en el desconocimiento de la
concepción del ‘individuo’, la cultura de vergüenza evolucionará a lo
largo del tiempo y, en este trabajo observaremos, muy
superficialmente, el cambio de mentalidad sucedido en esta
civilización. Empecemos.
2.2. Cultura de vergüenza
Homero, autor de la Ilíada y la Odisea e iniciador de la poesía épica,
no dejó constancia alguna de él mismo ni un solo dato que nos
desvelase algo de él como individuo, como persona. Esto nos puede
parecer de lo más extraño a personas de hoy en día, acostumbrados
a optar por el protagonismo personal por encima de cualquier otra
cosa, pero si tenemos en cuenta la época en la que se desarrolla
tanto la historia como el autor que la narra, veremos que es
perfectamente comprensible. Los personajes de su historia regían su
comportamiento en base a los dioses, y sólo eran ellos los
responsables de los actos sucedidos. Áte (locura pasajera), Moiras
(las conocidas Parcas, hilanderas del destino personal) y otros
muchos conceptos, sólo podían hacer sentir vergüenza a aquellos que
los sufrían, ya que no concebían la noción de ‘individuo’, y no podían
aceptarse responsables de su propia vida. Es por eso que se le ha
llamado cultura de vergüenza.
2.3. Nacimiento de la individualidad
Con el aumento de la actividad comercial y colonizadora apareció un
nuevo tipo de organización de Estado, la pólis. A raíz de ella empieza a
3. asomar un nuevo tipo de hombre que pone en duda los
procedimientos tan épicos y gloriosos del hombre homérico. El héroe
comienza a transformarse en ciudadano y surge la necesidad de
expresar el nuevo y pujante mundo centrado en lo individual. Esto
comenzará a reflejarse en la poesía de Arquíloco, iniciador de la
poesía lírica y de la elección personal. Fue un hecho que supondría un
paso hacia el hallazgo de la libertad y, para algunos, el descubrimiento
de la democracia. Los poetas comienzan a hacer acto de presencia
en los poemas, cosa que no ocurría en la épica homérica y se abraza
a la expresión de los sentimientos únicos de cada ser humano. El
pensamiento libre será el que, de ahora en adelante, caracterice en
gran medida la mentalidad griega.
Sin embargo, el encuentro con la libertad no supuso el
desprendimiento de una pesada carga, sino todo lo contrario. La
individualidad y la libertad instauraron miedos e incertidumbres en los
hombres, puesto que hasta el momento siempre se habían creído
guiados ciegamente por los dioses. Por tanto, ya no gozaban del
respaldo divino y no podían atenerse por seguro a ningún
pensamiento o actitud. Esta corriente de individualidad, que años
después tanto definiría la cultura Griega, fue culminada por uno de los
personajes más fascinantes de la historia de esta época. La poetisa
Safo.
2.4. Safo
Continuando el pensamiento iniciado en la poesía por Arquíloco, quien
había representado un completamente nuevo paradigma del hombre
en sus poemas, Safo escogió el amor como prioritaria elección en su
vida y obra. Bajo su ineludible condición de mujer, Safo afirmó el
librepensamiento naciente y creciente en la civilización helénica.
Nacida en la Isla de Lesbos, se dice que solía educar a las jóvenes
procedentes de la nobleza. A lo largo de la historia ha sido
considerada incluso madame de un grupo de hermosas aprendices
que, además de entregarse al placer heterosexual remunerado,
también lo hacían al homosexuales. El principal problema, sin duda, es
que Safo era una mujer, y no cabía atribuírsele ninguna actividad
dedicada al intelecto porque el mero hecho de imaginar a una mujer
por encima de algún hombre, era algo inconcebible. No encajaba con
el arquetipo dominante en la civilización antigua y tampoco en la
actual; el hombre no podía aceptar la indiferencia con la que ella
hablaba de ellos en sus poemas o incluso en su vida.
2.4.1 Amor sáfico
El hombre moderno se ve obligado a elegir entre modelo homosexual
o heterosexual, pero esta necesidad de elección es completamente
desconocida en Grecia, donde no se tenía en cuenta esta
diferenciación. La manera de vivir y entender el amor, era diferente. En
una sociedad dominada por el ambiente masculino, fue surgiendo otra
sociedad paralela, la femenina. Estas dos sociedades tan distantes en
principio, hallaron un lugar en el que podían encontrarse. Este lugar es
el matrimonio.
4. El amor nunca formó parte del matrimonio más que por mera
casualidad. El hombre marcaba de forma muy clara su superioridad y
las mujeres quedaban sometidas y resignadas a los deseos de este.
Incluso el ritual de la boda se asemejaba en muchos aspectos al que
se realizaba cuando un esclavo nuevo llegaba a una casa. La única y
exclusiva prioridad de esta institución era procrear por tanto, en medio
de esta carencia de amor, las mujeres (y también los hombres)
tendieron a buscar otro tipo de esperanzas fuera de esta unión
forzada. En este contexto las mujeres desarrollaron aprensión hacia el
género masculino, ya que representaba la opresión. Por eso el amor
homosexual cobró un papel tan importante en la periferia del
matrimonio y por ello Safo, desde su posición de mujer, buscó el
cariño y el aprecio en otras mujeres, donde realmente podía
encontrarlo, así como la felicidad.
Estableció, casi sin saberlo, un desafío ante la sociedad puramente
masculina. Escogió un camino distinto al trazado al lado del hombre y
este proceso de elección estuvo muy vinculado, por supuesto, al
nuevo mundo donde el individuo iba cobrando importancia. No había
libertad sin elección o posibilidad de ella. La poetisa eligió el amor
desde su circunstancia de mujer por otra mujer y en sus versos de la
nueva poesía lírica queda impregnada esta autoafirmación de la
individualidad y libertad humana.
Con el paso del tiempo, y a pesar de lo costoso que fue, el
pensamiento individual fue cobrando fuerza gracias a los intelectuales,
la literatura, los nuevos legisladores y algunos descubrimientos
científicos. Entonces, finalmente, se colocó al ser humano, anthrópos, en
el centro de todo el sistema. Se comenzó a dar forma humana a los
dioses así como a los conceptos antes abstractos como Áte, Moiras
etc, lo cual permitía dirigirse y pensar directamente en ellos. Este
hecho marcaría el camino de la religión griega para siempre. Ante los
nuevos retos e inquietudes suscitados por la consciencia de la
individualidad, la religión supuso un consuelo.
2.5.Vergonzosa individualidad
La libertad ensanchó los horizontes de los griegos pero infundó, como
ya hemos comentado antes, miedos e inseguridades ante lo
desconocido e inexplorado. Los hombres flaquearon, se sintieron
desprotegidos y confusos. Y sintieron miedo. Y esta es una de las
razones por las que he considerado oportuno llamarla ‘vergonzosa
individualidad’, porque no fue sino tímida e indecisa en sus comienzos,
aunque contundente y decisiva en el final. Otra de las razones de
apodarla de esa forma, se basa en la concepción tan egoísta de
individuo que se tiene hoy en día, fomentada por la codicia y la
excesiva ambición de la raza humana. El antropocentrismo nos ha
proporcionado un modelo egocéntrico y narcisista, donde lo único
importante es el bienestar personal sin importar el conjunto en el que
vivimos. Y esto es lo que a mí, personalmente, me parece vergonzoso.
Probablemente estemos hablando en términos demasiado generales y
de forma muy superficial, pero al indagar un poco, es eso lo que nos
encontramos: una sociedad donde impera el ombligismo social en el que
no se tienen en cuenta las necesidades del todo. Es importante,
5. decisiva, necesaria, la concepción de la libertad individual, pero puede
llegar a ser perjudicial, como cualquier otro extremo.
3.Conclusión
Hijos de Homero es un libro que aporta mucho. Trata temas que
parecen muy distantes con gran conocimiento y transmite todo el
sentimiento que experimenta el autor por esta asombrosa civilización.
Me ha parecido muy interesante, en especial los puntos que hablan de
la voluntad, individualidad y de la mujer, como he mostrado en este
trabajo. A pesar de no haberlo acabado de leer por completo me he
propuesto terminarlo porque de verdad me ha interesado. También me
ha obligado en muchas ocasiones a ampliar información pero no por
falta de la misma, sino porque quería saber más.
Es un libro que yo recomendaría y espero en el futuro poder hacer un
trabajo más ampliado y concreto sobre alguno de los temas más
interesantes.