1. EL SOLDADITO DE PLOMO Erase un vez un soldadito de plomo, al que le faltaba una pierna, se decía que la había perdido en la guerra. Tan famoso se hizo nuestro amiguito que algunos juguetes empezaron a tenerle envidia Adaptación:Mariuxa Murillo Reinoso

2. Fue así como PLINPLIN, el payaso de la caja sorpresa, lleno de envidia, empujó al soldadito al bote de basura, donde lo encontró PELUCHE, el perro de la familia. Tanto llamó su atención que se puso a jugar con el hasta cuando lo llamaron a comer, dejando al soldadito, en la calle botadito. Adaptación:Mariuxa Murillo Reinoso

3. ¡Pero que suerte del soldadito! pues pronto fue encontrado por unos niños que al verlo sin poder marchar, pues le faltaba una piernita, decidieron ponerlo a flotar en un barquito de papel. Se divirtieron tanto, pero en un descuido se lo llevó la corriente hasta el río. ¡oh pobre soldadito! Adaptación:Mariuxa Murillo Reinoso

4. Pero quiso el hada de los juguetes, pues en muchos cuentos hay una, que el soldadito fuera a parar a la barriga de un gordo pez, que fue pescado por un flaco pescador, vendido por un buen vendedor y luego comprado por la mamá del dueño del soldadito…. ¡que lío! Pero esa fue la verdad, así es como el soldadito volvió a su casa. Adaptación:Mariuxa Murillo Reinoso

5. Al fin nuestro amiguito se reunió con sus demás compañeros y PLINPLIN, el payacín de la caja sorpresa, muy arrepentido de su acción, al soldadito pidió perdón. Adaptación:Mariuxa Murillo Reinoso