Los insectos del bosque discutían sobre quién era el más importante. El zancudo, la garrapata, el piojo y la mosca argumentaron que lo eran por chupar sangre o descomponer alimentos. La avispa dijo que era importante por picar a otros. Cuando llegó la abeja, explicó que no podía perder tiempo y debía recolectar néctar para alimentar a sus crías. La hormiga estuvo de acuerdo y propuso nombrar a la abeja como la campeona por ser la más trabajadora, inteligente y útil