2. Después de un largo día de caza, un león se echó
a descansar debajo de un árbol.
Cuando se estaba quedando dormido,
unos ratones se atrevieron a salir
de su madriguera y se pusieron a jugar a su alrededor. De pronto, el
más travieso tuvo la ocurrencia de esconderse entre la melena del
león, con tan mala suerte que lo despertó. Muy malhumorado por ver
su siesta interrumpida, el león atrapó al ratón entre sus garras y dijo
3. -¿Cómo te atreves a perturbar mi sueño ratón? ¡Voy a comerte para que aprendáis la
lección!-
El ratón, que estaba tan asustado que no podía moverse, le dijo temblando:
Por favor no me mates, león. Yo no quería molestarte. Si me dejas te estaré
eternamente agradecido. Déjame marchar, porque puede que algún día me necesites –
¡Ja, ja, ja! – se rió el león mirándole - Un ser tan diminuto como tú, ¿de qué forma va a
ayudarme? ¡No me hagas reír!.
Pero el ratón insistió una y otra vez, hasta que el león, conmovido por su tamaño y su
valentía, le dejó marchar.
Unos días después, mientras el ratón paseaba por el bosque, oyó unos terribles rugidos
que hacían temblar las hojas de los árboles.
4. Rápidamente corrió hacia lugar de donde provenía el sonido, y se encontró allí
al león, que había quedado atrapado en una robusta red. El ratón, decidido a
pagar su deuda, le dijo:
- No te preocupes, yo te salvaré.Y el león, sin pensarlo le contestó:
- Pero cómo, si eres tan pequeño para tanto esfuerzo.
El ratón empezó entonces a roer la cuerda de la red donde estaba atrapado el
león, y el león pudo salvarse. El ratón le dijo:
Días atrás, te burlaste de mí pensando que nada podría hacer por ti en
agradecimiento. Ahora es bueno que sepas que los pequeños ratones somos
agradecidos y cumplidos.
El león no tuvo palabras para agradecer al pequeño ratón. Desde este día, los
dos fueron amigos para siempre.
5. Que todos y todas somos
necesarios independientemente del tamaño que
tengamos.
6. Un padre tenía dos hijas. Una casó con
un hortelano y la otra con un fabricante
de ladrillos. Al cabo de un tiempo
fue a visitar a la casada con
el hortelano, y le preguntó sobre su situación.
Ella dijo:
-Todo está de maravilla conmigo, pero sí tengo undeseo especial:
que llueva todos los días con abundancia para que así las plantas
tengan siempre suficiente agua.
7. Pocos días después visitó a su otra hija, también
preguntándole
sobre su estado. Y ella le dijo:
-No tengo quejas, solamente un deseo especial: que los
días se mantengan secos, sin lluvia, con sol brillante, para
que así los ladrillos sequen y endurezcan muy bien.
El padre meditó: si una desea lluvia, y la otra tiempo seco,
¿a cual de las dos le adjunto mis deseos?
8. No trates nunca de complacer y
quedar bien con todo el mundo. Te será imposible.
9. Un ratón campesino tenía por
amigo a otro de la
corte, y lo invitó a que fuese
a comer a la campiña.
Pero como sólo podía ofrecerle
trigo y yerbajos, el ratón
cortesano le dijo:
- ¿Sabes amigo que llevas una vida de hormiga? En
cambio yo poseo bienes en abundancia. Ven conmigo y
a tu disposición los tendrás.
Partieron ambos para la corte. Mostró el ratón ciudadano
a su amigo trigo y legumbres, higos y queso, frutas y miel.
Maravillado el ratón campesino, bendecía a su amigo de
todo corazón y renegaba de su mala suerte.
10. Dispuestos ya a darse un festín, un hombre abrió de
pronto la puerta.
Espantados por el ruido los dos ratones se lanzaron
temerosos a los agujeros. Volvieron luego a buscar higos
secos, pero otra persona incursionó en el lugar, y al verla,
los dos amigos se precipitaron nuevamente en una rendija
para esconderse.
Entonces el ratón de los campos, olvidándose de su
hambre, suspiró y dijo al ratón cortesano:
Adiós amigo, veo que comes hasta hartarte y que estás
muy satisfecho; pero es al precio de mil peligros y
constantes temores. Yo, en cambio, soy un pobrete y vivo
mordisqueando la cebada y el trigo, pero sin congojas ni
temores hacia nadie.
12. La cigarra era feliz disfrutando
del verano: El sol brillaba, las
flores desprendían su aroma...y
la cigarra cantaba y cantaba.
Mientras tanto su amiga y vecina,
una pequeña hormiga, pasaba el día
entero trabajando, recogiendo
alimentos.
- ¡Amiga hormiga! ¿No te cansas de tanto trabajar?
- Descansa un rato conmigo mientras canto algo para ti. – Le decía la cigarra a
la hormiga.
- Mejor harías en recoger provisiones para el invierno y dejarte de tanta
holgazanería – le respondía la hormiga, mientras transportaba el grano, atareada.
13. La cigarra sereía y seguía cantando sin hacercasoa su amiga.
Hasta que un día, al despertarse, sintió el frío intenso del invierno. Los árboles se
habían quedadosin hojas y del cielo caíancopos denieve, mientras la cigarra vagaba
por campo,helada y hambrienta. Vio a lo lejos la casa de su vecina la hormiga, y se
acercóa pedirle ayuda.
- Amiga hormiga, tengo frío y hambre, ¿nomedarías algo de comer?Tútienes mucha
comida y una casa caliente, mientras que yo no tengo nada.
La hormiga entreabrió la puerta de su casay le dijo a la cigarra.
14. - Dime amiga cigarra, ¿qué hacías tú mientras yo madrugaba
para trabajar? ¿Qué hacías mientras yo cargaba congranos
de trigo de acá para allá?
- Cantaba y cantaba bajo el sol- contestó la cigarra.
- ¿Esohacías? Pues si cantabas en el verano, ahora baila
durante el invierno-
Y le cerró la puerta, dejando fuera a lacigarra, que había
aprendido lalección.
15. Quien quiere pasar bien
el invierno, mientras es joven debe
aprovechar el tiempo.
16. En unamañanade otoño,
mientras una zorra
descansaba debajo de una
plantaciónde uvas, vio unos
hermosos racimos de uvas ya maduras, delante de sus ojos.
Deseosa de comer algo refrescante y distinto de lo que estaba
acostumbrada, la zorra se levantó, se remangó y se puso manos
a la obra para comerlas uvas.
17. Lo que la zorra no sabía es que los racimos de uvas estaban
mucho más altos de lo que ella imaginaba.Entonces, buscó un
medio para alcanzarlos. Saltó, saltó, pero sus dedos no
conseguían nitocarlos.Había muchasuvas, pero la zorra no
podía alcanzarlas. Tomó carrera y saltó otra vez, pero el salto
quedó corto. Aún así, la zorra no se dio por vencida. Tomó
carrera otra vez y volvió a saltar y nada. Las uvas parecían estar
cada vez más altas y lejanas.
Cansada por elesfuerzo y sintiéndoseincapaz de alcanzar las
uvas, la zorra se convenció de que era inútilrepetir el intento.
Las uvas estaban demasiado altas y la zorra sintió una profunda
frustración. Agotada y resignada, la zorra decidió renunciar a las
uvas.
18. Cuandola zorra se disponía a regresar al bosque se dio cuentade que
un pájaro que volaba por allí,había observado toda la escena y se
sintió avergonzada. Creyendo que había hecho un papel ridículo
para conseguiralcanzar las uvas, la zorra se dirigió al pájaro y le dijo:
- Yo habría conseguido alcanzar las uvas si hubieranestado maduras.
Me equivoqué al principio pensando que estabanmaduras pero
cuando me di cuentade que estabanaúnverdes, preferí desistir de
alcanzarlas. Las uvas verdes no son unbuen alimentopara un
paladar tan refinado como el mío.
Y así fue,la zorra siguió su camino, intentandoconvencerse de que
no fuepor su faltade esfuerzo por lo que ella nohabía comido
aquellas riquísimas uvas. Y sí porque estabanverdes.
20. Un granjero y su esposa tenían
una gallina que ponía un huevo
de oro cada día.
Supusieron que la gallina debería
contener un gran terrón del oro
en su interior, y para tratar de
conseguirlo de una sola vez, la mataron.
Haciendo esto se encontraron, para su sorpresa, que la gallina se diferenciaba
en nada de sus otras gallinas. El par de ingenuos, esperando llegar a ser ricos de
una sola vez, se privaron en adelante del ingreso del cual se habían asegurado
día por día.
22. Un hombre tenía un caballo y un asno.
Un día que ambos iban camino
a la ciudad, el asno, sintiéndose
cansado, le dijo al caballo:
- Toma una parte de mi carga si te
interesa mi vida.
El caballo haciéndose el sordo no dijo
nada y el asno cayó víctima de la fatiga, y murió
allí mismo.
Entonces el dueño echó toda la carga encima del
caballo, incluso la piel del asno. Y el caballo,
suspirando dijo:
- ¡Qué mala suerte tengo! ¡Por no haber querido
23.
24. Obligada por la sed, una
hormiga bajó a un arroyo;
arrastrada por la
corriente, se encontró
a punto de morir ahogada.
Una paloma que se encontraba en una rama cercana
observó la emergencia; desprendiendo del árbol una
ramita, la arrojó a la corriente, montó encima a la
hormiga y la salvó.
25. La hormiga, muy agradecida, aseguró a su nueva amiga
que si tenía ocasión le devolvería el favor, aunque siendo
tan pequeña no sabía cómo podría serle útil a la paloma.
pájaros se alistó para cazar a la paloma. La hormiga, que
se encontraba cerca, al ver la emergencia lo picó en el
talón haciéndole soltar su arma.
El instante fue aprovechado por la paloma para levantar
el vuelo, y así la hormiga pudo devolver el favor a su
amiga.
26. :que todos y todas
podemos colaborar por muy pequeños
que seamos.
27. En un frondoso bosque, de
un panal se derramó una
rica y deliciosa miel, y las
moscas acudieron
rápidamente y ansiosas a devorarla. Y la miel era tan dulce y exquisita que
las moscas no podían dejar de comerlas.
28. Lo que no se dieron cuenta las moscas es que sus patas se fueron prendiendo en la
miel y que ya no podían alzarel vuelo de nuevo.
A punto de ahogarse en su exquisito tesoro, las moscas exclamaron:
-¡Nos morimos, desgraciadas nosotras, por quererlo tomar todo en un instante de
placer!
29. :que hay que disfrutar de
los buenos momentos y no tener
ansiedad.