1. Leche materna
La leche materna humana es el alimento natural producido por la madre para alimentar al
recién nacido. Se recomienda como alimento exclusivo para el lactante hasta los 6 meses de
edad, ya que contiene todos los nutrientes necesarios para su desarrollo (excepto en el caso
del recién nacido pretérmino, en el que la leche materna es insuficiente y ha de fortificarse).
Además contiene inmunoglobulinas y otras sustancias que protegen al bebé frente a
infecciones y contribuye a estrechar el vínculo madre-hijo, favoreciendo un adecuado desarrollo
psicomotor.
Para que la mujer pueda producir leche materna debe estar bajo la influencia de las hormonas
prolactina y oxitocina. La prolactina es la encargada de que haya producción de leche y la
oxitocina desencadena la eyección (salida) de la leche.
Sustancias contenidas en la leche
Además de nutrientes, agua, enzimas y hormonas contenidas en la leche de la madre, al hijo
también se pueden transferir, mediante la lactancia, medicamentos o sustancias tóxicas, como
el alcohol, o algunas enfermedades y virus patógenos.
En el bebé para prevenir enfermedades
● Tiene la proporción ideal de nutrientes.
● El acto de amamantar crea y mejora la relación madre-hijo.
● Tiene también otros no-nutrientes como factores de crecimiento cerebral
● El apego a la madre.
La digestión de la leche materna es más fácil y eficiente. La grasa de la leche materna incluye
una lipasa, enzima que ayuda a digerir la leche.
● Transmite inmunidad pasiva
● Provee al bebé de alimento por sus primeros 6 meses de vida
● Disminuye la gravedad de las alergias
● Disminuye el riesgo de infecciones respiratorias, digestivas, de las vías aéreas
superiores y de otitis
● Disminuye considerablemente el riesgo de muerte súbita
● Disminuye el riesgo de obesidad
● Disminuye el riesgo de diabete de tipo 1 y 2, de linfoma, hipercolesterolemia y de asma
del futuro adulto
● La leche materna protege al niño de enfermedades de la piel.