Este boletín informativo del Núcleo de Economistas del Banco Central de Venezuela resume las actividades realizadas para celebrar su 35 aniversario, incluyendo un homenaje a figuras clave en la fundación del banco, una reunión con directores de escuelas de economía, y el acto central de celebración del aniversario con homenajes. También incluye secciones habituales sobre protagonistas económicos y recomendaciones bibliográficas.
1. Volumen 1 Nº 6
Mayo 2007
BOLETÍN INFORMATIVO
CONTENIDO:
Cátedra Fundacional
Alberto Adriani
2
Visita a la Fundación
Alberto Adriani
3
Encuentro de los Directores y Coordinadores de las escuelas de
economía del país
6
Constructores del BCV
9
Celebración del XXV
aniversario del
NEBCV
11
La relación entre el
BCV y el FMI
15
Protagonistas en la
economía venezolana
17
¿Qué podemos leer?
Le presentamos el Nº 6,
del Boletín Informativo
del Núcleo de Economistas del Banco Central de
Venezuela. Finalizamos
el primer semestre de
esta nueva etapa en la
cual la Junta Directiva se
ha empeñado en reforzar
la imagen del Núcleo dentro de la institución.
Quiso el destino que nos
tocara celebrar el XXXV
aniversario del Núcleo.
Para tan destacada fecha
se organizó una serie de
eventos, en los cuales se
resaltaron 2 aspectos
fundamentales de nuestros objetivos: divulgar el
conocimiento de la ciencia económica y el rescate de nuestros valores.
23
JUNTA DIRECTIVA
• Presidente:
Duglas O. Correa.
• Secretario General:
Francisco Osorio
• Secretario de Organización:
Narciso Guaramato Parra
• 1er Vocal:
Reina Romero
Responsable Editorial
Narciso Guaramato Parra
NEBCV, Piso 18 torre Financiera del BCV. Ext. 5061
Para el primer evento se
organizó una reunión de
los Directores y Coordinadores de las escuelas
de economía del país. La
asistencia fue casi total.
Solamente faltó la Directora de Economía de la
Universidad Gran Mariscal de Ayacucho, quien
por compromisos laborales no pudo asistir.
En segundo lugar se realizó un homenaje a los
doctores Alberto Adriani,
Manuel R. Egaña y J.J.
González Gorrondona,
valores de la economía
venezolana, que jugaron
un papel fundamental en
la concepción, fundación
y establecimiento del
Banco Central de Venezuela.
Finalmente el viernes 27
de abril, se efectuó el
acto central de celebración del aniversario. En
este acto se
realizó
homenajes al Dr. Carlos
Rafael Silva y al Comité
que promocionó la creación del núcleo. El orador
de orden fue el Econ.
Sixto I. Antivero quien
fuera el presidente fundador del Núcleo de Economistas.
En este Boletín encontrará la reseña de estos
eventos conjuntamente
con las secciones ya
habituales:
En la sección de Protagonistas en la Economía
venezolana encontrará
una reseña biográfica de
Ernesto Permuy Tinoco,
primer Superintendente
de Bancos, escrito por la
ya conocida pluma de
Carmelo Paiva Palacios.
En la sección de recomendaciones bibliográficas se reseñan dos libros
referidos al pensamiento
económico venezolano,
escrito por los doctores
Asdrúbal Baptista del
IESA y Eduardo Ortiz de
la UCAB.
En el presente Boletín
también se incluye una
breve descripción sobre
la relación existente entre
el BCV y el FMI.
Los próximos meses serán de preparación y organización de dos grandes proyectos; las elecciones del Núcleo de
Economistas y la Fundación del Fondo Editorial
del Núcleo de Economistas, la cual tendrá como
objetivo la publicación sin
fines de lucro de libros de
texto, trabajos de grado,
material de apoyo o trabajos de investigación
escritos por los funcionarios del banco y personas
ligadas a el.
Para finalizar reiteramos
nuestra invitación a colaborar en el desarrollo de
este Boletín Informativo,
2. Página 2
Volumen 1 Nº 6
C AT E D R A F U N D A C I O N A L “A L B E R T O A D R I A N I ”
Por Invitación de la Fundación Alberto Adriani, La Junta Directiva del NEBCV asistió a la
instalación de la Cátedra Fundacional “Alberto Adriani”, efectuada en el Auditorio Hermano Lanz de la Universidad Católica Andrés Bello el miércoles 18 de abril.
En el acto intervinieron los Doctores Tomas E. Carrillo Batalla, Presidente de la Fundación Alberto Adriani; Eduardo Ortiz, Decano de FACES UCAB y Luis Ugalde, Rector de
la UCAB.
Igualmente en el acto se contó con la asistencia de importantes personalidades como
son: el Dr. Carlos Rafael Silva, Dra. Pola Ortiz, el Dr.Román José Duque Corredor y el Dr
Elías Pino Iturrieta.
N.G.P.
3. Página 3
Volumen 1 Nº 6
V I S I T A A L A F UN D A C I Ó N A L B E R TO A D R I A N I
Ing. Alfonso Giordano, Dr. Tomás E. Carrillo batalla y el Econ. Narciso Guaramato Parra
El día 23 de abril la Junta Directiva del Núcleo de Economistas realizó una visita a la
Fundación Alberto Adriani, en donde se reunieron con su presidente, el Dr. Tomas E. Carrillo Batalla y el Ingeniero Alfonso Giordano, Tesorero de la Fundación y natural del pueblo de Zea, en el Estado Mérida, lugar de nacimiento de Alberto Adriani.
Sirvió la ocasión para invitar al Dr. Carrillo Batalla a ser conferencista en el foro:
“Constructores del BCV”, previsto para la semana aniversario del Núcleo y la cual aceptó
con mucho agrado.
En amena conversación se le informó al Dr. Carrillo Batalla de las actividades del Núcleo
y se le suministró copia de los Boletines Informativos publicados hasta la fecha.
Como contribución a la formación de la biblioteca del Núcleo, la Fundación Alberto Adriani donó una serie de libros de la autoría del Dr. Tomás E. Carrillo Batalla.
N.G.P
.
5. Página 5
Volumen 1 Nº 6
ACTIVIDADES CONMEMORATIVAS DEL
XXXV ANIVERSARIO DEL
NUCLEO DE ECONOMISTAS DEL BCV
El Núcleo de Economistas del Banco Central de Venezuela quiere dar su agradecimiento
público al Diseñador Gráfico: Julio Cesar Rodríguez por tan excelente trabajo al efectuar
el diseño del afiche conmemorativo de nuestro XXXV aniversario
6. Página 6
Volumen 1 Nº 6
GRAN ENCUENTRO DE LOS DIRECTORES Y COORDINADORES
D E L A S E S C U E L A S D E E C O N O M I A D E L PA I S
El pasado miércoles 25 de abril, en el “Salón Manuel Egaña”, se dio inició a las celebraciones de la semana aniversario del Núcleo de Economistas del Banco Central de Venezuela,
con un encuentro de los Directores y Coordinadores de las escuelas de economía del país.
A esta importante reunión asistieron: Profesor Natan Lederman, Director de la Escuela de
Economía de la Universidad Santa María; Profesor Víctor Rivas Rebolledo, Director de la
Escuela de Economía de la Universidad Central de Venezuela, Profesora Patricia Hernández, Directora de la Escuela de Economía de la Universidad Católica Andrés Bello; Profesor
Boris Echerman, Director de la Escuela de Economía Empresarial de la Universidad Metropolitana; Profesor Christian Tovar, Director de la Escuela de Economía de la Universidad
Alejandro de Humboldt; Profesor Edinson Jiménez Medina, Director de la Escuela de Economía de la Universidad del Zulia; Profesor Pablo Polo, Director de la Escuela de Economía
de la Universidad de Carabobo. Profesora Magdalena Muñoz, Directora de la Escuela de
Economía de la Universidad de los Andes; Profesor Daniel Di Vasta, Coordinador de la Escuela de Economía Social (turno diurno) de la Universidad Nacional Experimental Politécnica de la Fuerza Armada; Profesora Silvana Pezzella, Coordinadora Comisión de extensión
UCV; Profesora Raquel Reyna, Coordinadora Académica. Escuela de Economía UCV; Profesor Raúl Huizzi, Coordinador del Convenio BCV-ULA y la Profesora Samaria Muñoz,
miembro de la Comisión Curricular de la ULA.
7. P á gi n a 7
Volumen 1 Nº 6
Como invitados especiales asistieron el Dr. Gastón Parra, Presidente del BCV; el Dr. José
Ferrer, Primer Vicepresidente Gerente del BCV; Dr. Asdrúbal Baptista, Presidente de la
Academia Nacional de Ciencias Económicas; Dr. Iván Giner, Vicepresidente de Estudios;
Dr. Harold Zavarce, Gerente de Investigaciones Económicas y el Econ. Francisco Chirinos
G., Presidente del Colegio de Economistas del Distrito Capital y Edo. Miranda.
El acto se inició con unas palabras de bienvenida por parte del Econ. Duglas Correa, Presidente del Núcleo de Economistas del BCV. A continuación Intervinieron los Doctores Asdrúbal Baptista y Gastón Parra.
En el transcurso de la mañana se presentaron tres ponencias: “La Enseñanza de la Economía en el Siglo XXI” a cargo del Dr. Natan Lederman, Director de la Escuela de Economía
de la Universidad Santa María; “La formación del profesional de la economía en América
Latina”, a cargo del Dr. Edinson Jiménez Medina, Director de la Escuela de Economía de la
Universidad del Zulia y “Nuevo enfoque sobre la concepción de la carrera de Economía en
la UCV” a cargo del Dr. Víctor Rivas Rebolledo, Director de la Escuela de Economía de la
Universidad Central de Venezuela.
Prof. Natan Lederman de la USM
Prof. Edinson Jiménez de la LUZ
En horas de la tarde se inició el debate, en el cual se acordó: reactivar el Núcleo de Directores de las escuelas de Economía y preparar una agenda de trabajo para realizar una nueva
reunión en una fecha próxima.
Finalmente el Prof. Edinson Jiménez invitó a una reunión la cual se efectuará en la ciudad
de Maracaibo el 14 de junio del presente año.
N.G.P.
9. Página 9
Volumen 1 Nº 6
CONSTRUCTORES DEL BCV
El viernes 27 de abril, en la Sala Manuel Egaña del piso 24, el Núcleo de Economistas
del BCV rindió un homenaje a los Doctores: Alberto Adriani, Manuel R. Egaña y J.J. González Gorrondona.
El evento llevó por título: “Constructores del BCV”, resaltando así el papel fundamental
de estos ilustres economistas venezolanos, a la fundación y establecimiento del Banco
Central de Venezuela.
Participaron como oradores: el Dr. Tomás E. Carrillo Batalla, Presidente de la Fundación
Alberto Adriani e individuo de Número de la Academia Nacional de Ciencias Económicas; el Dr. Domingo Felipe Maza Zavala, ex Director del Banco Central de Venezuela e
Individuo de Número de la Academia Nacional de Ciencias Económicas y el Dr. José Moreno Colmenares, Director de la Revista del BCV.
Se contó con la asistencia de notables personalidades como son los señores Cesar Egaña y Rafael Egaña, hijo y nieto respectivamente del Dr. Manuel R. Egaña; el Ingeniero
Alfonso Giordano, Tesorero de la Fundación y natural del pueblo de Zea, Estado Mérida,
lugar de nacimiento de Alberto Adriani; El profesor Arístides Medina Rubio, Director General de la Biblioteca Nacional.
N.G.P.
10. Página 10
Volumen 1 Nº 6
Intervención del Econ. Narciso Guaramato Parra
Doctores. Tomás E. Carrillo Batalla y José Moreno Colmenares
Parte del público asistente
Palabras del Dr. Domingo F. Maza Zavala
de izq. a derch. Dr. Domingo. F Maza Zavala, Dr. Tomás E. Carrillo
Batalla, Dr, Gastón Parra, Dr. José Moreno Colmenares y Dr. José Ferrer
FOTOS: Betsaida Bonilla
———————— 0 ——————-
E-mail Recibido
Estimado Lic. Guaramato. Unas breves líneas para felicitarle por la iniciativa de la conferencia y para agradecerle muy de veras, la invitación a participar. También me pareció
bien logrado el boletín informativo, que por cierto voy a reproducir para distribuirlo entre
mis familiares. Me voy a tomar la libertad de pedirle las direcciones electrónicas del Dr.
Rafael Crazut y del Dr. Maza Zavala. Disculpe esta molestia, pero también quisiera agradecerles por esta reciente contribución a la memoria de Manuel R. Egaña. Al enviarle un
atento saludo, me suscribo.
Fernando L. Egaña
11. Página 11
Volumen 1 Nº 6
CELEBRACION DEL XXXV ANIVERSARIO DEL
NUCLEO DE ECONOMISTAS DEL BCV
El pasado viernes 27 de abril, a partir de las cuatro de la tarde, se cumplió un significativo acto con motivo de celebrar el 35 aniversario de la fundación del Núcleo de Economistas del Banco Central de Venezuela. Precisamente, en la sala Manuel R. Egaña, piso
24 de nuestro querido instituto, tuvo lugar el evento propuesto y organizado por el grupo
directivo del Núcleo de Economistas conformado por los colegas: Duglas Obed Correa
Márquez, Presidente; Francisco Ramón Osorio Guerra, Secretario General; Narciso Guaramato Parra, Secretario de Organización; y Reina Luisa Romero Perdomo, Vocal.
El programa se inició con las palabras del Presidente del Núcleo, en las cuales se
refirió a los planes cumplidos en los pasados meses y previstos para el futuro. Seguidamente, el Secretario de Organización explicó los motivos del presente acto. A continuación se hizo entrega de una placa al Doctor Carlos Rafael Silva “por su valioso apoyo a
nuestras actividades durante el ejercicio de sus funciones como Primer Vicepresidente
Gerente y Presidente del Banco Central de Venezuela. Igualmente queremos honrar su
valiosa trayectoria bancentralista, la cual es ejemplo para todos. “Por su quehacer laborioso y por su manera honrada de servirle a Venezuela, sin servirse de ella.”
En esta oportunidad fue expuesta una placa que recuerda los nombres de los integrantes del Comité Promotor del Núcleo de Economistas del Banco Central de Venezuela. El Doctor Carlos Rafael Silva (fundador, en 1953, del Colegio de Economistas de Venezuela, ex-Decano de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales, ex-Presidente de
la Academia Nacional de Ciencias Económicas, ex-Presidente del Colegio de Economistas, y ex-Vicepresidente de la Federación de Colegios de Economistas de Venezuela)
agradeció con emotivas e interesantes palabras el homenaje recibido.
El colega Sixto Ignacio Antiveros Hernández, quien en 1972 resultó electo y le correspondió ser Presidente Fundador del Núcleo de Economistas del BCV, tuvo a su cargo el Discurso de Orden. Recordó la etapa cumplida en sus primeros años por dicho ente gremial, especialmente en las actividades dirigidas al mejoramiento de nuestra profesión; y propuso un conjunto de sugerencias y planes para el futuro.
Entre los invitados especiales asistentes, recordamos a los ex-Presidentes de la
Academia Nacional de Ciencias Económicas, doctores Tomás Enrique Carrillo Batalla y
Pola Ortiz; Doctor Rafael A. Uzcátegui Díaz, ex-Director de la Escuela de Trabajo Social
de la UCV; ex-Directores de la Escuela de Economía de la Universidad Central de Venezuela: Tulio Vásquez Díaz, y José Moreno Colmenares; José Ramón Carvajal España,
ex-Presidente de la Federación de Colegios de Economistas de Venezuela; Juan Bautista Martínez, ex – Presidente del Colegio de Economistas de Venezuela y de la Comisión
Organizadora del Colegio de Economistas del Distrito Federal y Estado Miranda; Luís
Villarroel, Presidente del Instituto de Previsión Social del Economista (Impreconomista);
José Laurencio Rojas Graffe, Director del Impreconomista; Guido Agustín Solano,
12. Página 12
Volumen 1 Nº 6
ex-Secretario Ejecutivo del Colegio de Economistas; Jesús A. Nieves Luque, Presidente
de la Asociación de Economistas Consultores; Francisco J. Chirinos García, Presidente
del Colegio de Economistas del Distrito Federal y Estado Miranda; Julián Fajardo Lotuffo,
Yunis Zujur Meneses, Ángel Ruocco Saturno, Orlando Pirona Salazar, Isaac Mencias,
Juan Bruzco, Gladys Martínez de Uzcátegui, la doctora Eleonora Silva Pardo de Daza
(hija de nuestra inolvidable y dilecta colega Berta Pardo García de Silva), y tres jóvenes
nietos del doctor Silva.
C.P.P.
Entrega de placa de reconocimiento
Al Dr. Carlos Rafael Silva
Revelación de placa homenaje al Comité
Promotor del Núcleo de Economistas
Del Banco Central de Venezuela
13. Página 13
Volumen 1 Nº 6
Parte del público asistente donde se puede observar a la familia del Dr. Silva,
A la Dra. Pola de Ortiz, el Dr. Tomas E. Carrillo Batalla, ambos miembros de
La Academia Nacional de Ciencias Económicas y Sociales; El Dr. José Moreno Colmenares
Editor de la revista del BCV y el Econ. José Ramón Carvajal, Ex-Presidente de la
Federación de Colegios de Economistas de Venezuela.
Palabras de agradecimiento del Dr. Carlos Rafael Silva
14. Página 14
Volumen 1 Nº 6
Palabras del Econ. Sixto Ignacio Antiveros Hernández,
Primer Presidente Electo del NEBCV, en el año 1972
Brindis de celebración del XXXV Aniversario del NEBCV
FOTOS:Betsaida
15. Página 15
Volumen 1 Nº 6
LA RELACION ENTRE EL BANCO CENTRAL DE
V E N E Z UE L A Y E L F O N D O
MONETARIO INTERNACIONAL
NARCISO
GUARAMATO PARRA
En junio del año 1944, las Naciones Unidas promueven una conferencia en Bretón Woods, New Hampshire, Estados Unidos. Los representantes de 45 países
acuden al llamado y acuerdan crear una organización
económica que permitiera la colaboración internacional y pudiera evitar que se repitiera las equivocadas
medidas de política económica que conllevaron a la
gran depresión de los años 30.
El organismo creado, El Fondo Monetario Internacional (FMI), “...es la Institución Central del sistema monetario Internacional, es decir, el sistema de pagos internacionales y tipos de cambio de las monedas nacionales que permite la actividad económica entre países”1/
Los fines para los cuales fue creado el FMI están señalados en el artículo 1 del Convenio Constitutivo:
i) Fomentar la cooperación monetaria internacional por medio de
una institución permanente que sirva de mecanismo de consulta
y colaboración en cuestiones monetarias internacionales.
ii) Facilitar la Expansión y el crecimiento equilibrado del comercio
internacional contribuyendo así a alcanzar y mantener altos niveles de ocupación y de ingresos reales y a desarrollar los recursos
productivos de todos los países miembros como objetivos primordiales de política económica.
iii) Fomentar la estabilidad cambiaria, procurar que los países miembros mantengan regímenes de cambio
ordenados y evitar depreciaciones cambiarias competitivas.
iv) Coadyuvar a establecer un sistema multilateral de pagos para las transacciones corrientes que se realicen entre los países miembros, y eliminar las restricciones cambiarias que dificulten la expansión del comercio mundial.
v) Infundir confianza a los países miembros poniendo a su disposición temporalmente y con las garantías
adecuadas los recursos generales del Fondo, dándole así oportunidad de que corrijan los desequilibrios de
sus balanzas de pagos sin recurrir a medidas perniciosas para la prosperidad nacional e internacional.
vi) De acuerdo con lo que antecede, acortar la duración y aminorar el grado de desequilibrios de las balanza de pago de los países miembros.2/
El inicio de la relación de Venezuela con el FMI, se ubica desde la fundación de la organización. Una comisión Venezolana conformada por Rodolfo Rojas (Ministro de Hacienda para la fecha), Alfonso Espinosa, J.J. González Gorrondona y Cristóbal I. Mendoza,
16. Página 16
Volumen 1 Nº 6
asiste a la conferencia de Bretón Woods. El congreso de la República aprueba el acta
constitutiva del FMI y posteriormente, el nuevo gobierno que asume la dirección del país
a raíz de los acontecimientos del año 1945, ratifica la medida mediante decreto de fecha
25 de septiembre de 1946.
Las relaciones entre el Banco Central de Venezuela y el Fondo Monetario Internacional
se formalizan en el año 1960 cuando se promulga una Ley que autoriza al instituto a
ejercer los derechos y asumir las obligaciones que correspondían a Venezuela ante el
FMI, en concordancia con lo establecido en el Artículo V, sección 1 del Convenio Constitutivo del FMI 3/.
Las relaciones del FMI con los países miembros se desarrollan en cuatro aspectos:
• Atención a los requerimientos de información solicitados por el FMI de acuerdo a lo
establecido en el parágrafo b de la sección 3 del artículo 4 del Convenio Constitutivo: “A
fin de desempeñar sus funciones según el apartado a) El Fondo ejercerá una firme supervisión de las políticas de tipos de cambio de los países miembros y adoptará principios específicos que sirvan de orientación a todos ellos con respecto a esas políticas.
Los países miembros proporcionarán al Fondo la información necesaria para ejercer esa
supervisión y, a solicitud del Fondo, le consultarán sobre sus políticas de tipos de cambio4/”.
• Asistencia Crediticia para solventar problemas en la Balanza de Pagos.
• Asistencia técnica.
• Capacitación profesional.
Haciendo abstracción de la asistencia crediticia, la asistencia técnica y la capacitación
son los aspectos que más marcan el día a día de la relación entre el Banco Central de
Venezuela y el Fondo Monetario Internacional, principalmente en cuatro especialidades:
•
•
•
•
Refuerzo de los sectores monetario y financiero mediante asesoramiento sobre regulación, supervisión y reestructuración del sistema bancario, gestión y operaciones en
moneda extranjera, sistema de compensación y liquidación de pagos, y estructura y
desarrollo de bancos centrales.
Apoyo a la política y gestión fiscales firmes mediante asesoramiento sobre política y
administración tributaria y aduanera, formulación de presupuestos, gestión del gasto,
planificación de redes de protección social y gestión de la deuda interna y externa.
Recopilación, gestión y divulgación de datos estadísticos y mejora de la cali8dad de
los datos.
Elaboración y revisión de la legislación económica y financiera5/.
De los puntos anteriores, el tercero, referido a los datos estadísticos, es donde la relación entre el BCV y el FMI es mas activa. El Instituto Emisor recopila y presenta los principales datos de la economía venezolana, en base a metodologías de aceptación mundial, diseñadas y publicadas por el FMI, en los llamados manuales, así por ejemplo se
tiene el Manual de Balanza de Pagos, el Manual de Finanzas Públicas, etc.
17. Página 17
Volumen 1 Nº 6
El haber adoptado esta forma de tratamiento de los datos, ha permitido la interacción del
BCV con el personal de otros Bancos Centrales, en especial con los de Latinoamérica.
El FMI ofrece cursos de capacitación a funcionarios del gobierno y los bancos centrales
de los países miembros en la sede del FMI en la ciudad de Washington y en los centros
regionales de capacitación en Brasilia, Singapur, Tunez y Viena.
Con el tiempo, este entrenamiento proporcionado por el FMI ha pasado a ser parte fundamental en el desarrollo laboral de muchos de los funcionarios del Banco Central de
Venezuela, permitiendo en muchos casos, que algunos de nuestros compañeros bancentralistas alcancen una proyección internacional.
Finalmente podemos indicar que esta relación entre el Banco Central y el Fondo Monetario Internacional ha permitido la comunicación e interacción de Venezuela con el resto
del mundo y en especial con los mercados financieros internacionales
NOTAS
1/ Fondo Monetario Internacional. “¿Qué es el Fondo Monetario Internacional?”. Guía del FMI, Washington. 2004. p.2.
2/. Fondo Monetario Internacional. “Convenio Constitutivo”.p.12
3/ Crazut, Rafael J. “El Banco Central de Venezuela Notas sobre si Historia y Evolución, 1940-1990” Banco
Central de Venezuela, Colección Cincuentenaria. Caracas, 1990. p.322.
4/. Fondo Monetario Internacional. “Convenio Constitutivo”.p.12
5/ Fondo Monetario Internacional. “¿Qué es el Fondo Monetario Internacional?”. P.35
18. Página 18
Volumen 1 Nº 6
PR O T A G O N I S T A S E N L A E C O N O M I A V E N E Z O L A N A
ERNESTO G. PERMUY TINOCO
PRIMER SUPERINTENDENTE DE BANCOS DE
Carmelo
VENEZUELA
Paiva Palacios
LA SUPERINTENDENCIA DE BANCOS.La Ley de Bancos sancionada el 13 de julio de 19391/, en su artículo 34 instituye
un servicio especial adscrito al Despacho que disponga el Ejecutivo Federal, que se denominará “Superintendencia de Bancos” y tendrá las atribuciones que le señale dicha
Ley. Precisamente, el Título VIII de la referida Ley, constituido por los artículos 34 hasta
el 45, detalla todo lo concerniente a requerimientos y campo de actuación que le corresponde a dicho Servicio que, además de los bancos propiamente dichos, abarca a las casas de cambios y otras instituciones de carácter bancario.
Al tiempo de crearse la Superintendencia de Bancos, operaban en Venezuela
cuarenta y seis (46) oficinas bancarias (sin considerar al Banco Central de Venezuela,
Banco Obrero y al Banco Agrícola y Pecuario); y esa situación se mantiene invariable
durante los dos primeros años de existencia de la Superintendencia. Cinco (5) correspondían a bancos extranjeros (Royal Bank of Canada, Nacional City Bank, Holandés
Unido, de Londres & Sur América Ltd, y el Alemán Antioqueño); y seis (6) eran las casas
matrices de los bancos nacionales privados (Maracaibo, Venezuela, Caracas, Comercial
de Maracaibo, Venezolano de Crédito, y Mercantil y Agrícola); también la oficina principal
del Banco Industrial de Venezuela propiedad del sector público2/. Nueve (9) sucursales,
de las cuales ocho (8) pertenecían al Banco de Venezuela (localizadas en las ciudades
de: Maracaibo, Ciudad Bolívar, Puerto Cabello, Valencia, Barquisimeto, San Cristóbal, y
Barcelona), y otra era la del Mercantil y Agrícola que funcionaba en Valencia. Veinticinco
(25) agencias tenía el Banco de Venezuela (las cuales operaban en: Carúpano, Cumaná,
Coro, La Guaira, Maturín, Porlamar, San Fernando de Apures, Maracay, Calabozo, La
Victoria, Mérida, Ocumare del Tuy, Río Chico, San Felipe, Trujillo, El Callao, El Tocuyo,
Tucupita, Aragua de Barcelona, Acarigua, Barinas, San Carlos, Encontrados, Guiria, y
19. Caripito), y una (1) agencia del Banco de Maracaibo funcionaba en Caracas.
Un decreto presidencial de fecha 31 de enero de 1940, establece: 1º “Creado como ha
sido el Servicio de Superintendencia de Bancos por la Ley de Bancos promulgada en esta misma fecha, se suprime el Servicio de Fiscalía de Bancos que funciona en el Ministerio de Fomento y en consecuencia se declaran insubsistentes las partidas 144, 145 y 146 del Capítulo IV del
Presupuesto de Gastos de dicho Departamento”. 2º Se estiman como gastos para el funcionamiento de la Superintendencia de Bancos, adscrita al Ministerio de Hacienda, desde 1 de febrero hasta 30 de junio del corriente año, ambos inclusive, la cantidad total de treinta y dos mil quinientos bolívares (Bs. 32.500), discriminados tal como se presenta a continuación:
El Superintendente a Bs. 2.000 mensuales
Tres fiscales auxiliares a Bs. 1.200 mensuales
Un oficial a Bs. 700 mensuales
Otros gastos (alumbrado, aseo, artículos de escritorio, etc.)
Total
Bs.
Bs.
Bs.
Bs.
10.000
18.000
3.500
1.000
32.500
Valga hacer notar que la figura del Fiscal de Bancos estaba legalmente contemplada desde hacía muchos años. Precisamente, según el artículo 31 de la Ley de Bancos promulgada el 7
de mayo de 1895, “el Ejecutivo Nacional por órgano del Ministerio de Fomento nombrará un Fiscal para cada banco”. A partir de la Ley del 25 de junio de 1910 se dedica un conjunto del articulado a tratar del servicio de fiscalía a las instituciones bancarias (por ejemplo, en la antes citada
Ley, el Título IV, artículos 23 al 28, refiere acerca “De los Fiscales” de bancos). En la Ley del 20
de julio de 1936, de acuerdo al artículo 42, “el Ejecutivo Federal nombrará un Fiscal General y
demás Fiscales auxiliares, quienes deben ser expertos en contabilidad, para vigilar las operaciones de los bancos”. Las funciones y campo de actuación están definidos en el Título IV, artículos
42 al 45 de dicha Ley. Como se ha dicho anteriormente, la Fiscalía General de Bancos se extinguirá con la promulgación de la Ley de Bancos, desde enero de 1940 y la creación de la Superintendencia.
EL PRIMER SUPERINTENDENTE DE BANCOS.Una resolución emanada de la Dirección General de Administración3/ y firmada por el Ministro de Hacienda, doctor Francisco J. Parra, señala que “por disposición del Presidente de los
Estados Unidos de Venezuela y de conformidad con los artículos 26 del Reglamento de la Ley
de Ministerios y 2º del Decreto Ejecutivo del 31 de enero último, se nombra Superintendente de
Bancos al ciudadano Ernesto G. Permuy”, quien con anterioridad a esa fecha, venía desempeñándose como Comisionado Especial para estudios económicos y financieros del Ministerio de
Hacienda. De acuerdo al artículo 36 de la Ley de bancos, la citada designación era para un período de un año y es por ello que, casualmente, a partir del 28 de enero de 1941 el nuevo Superintendente de Bancos será el ciudadano Pedro Felipe Rojas4/.
El referido señor Permuy era un funcionario que llenaba sobradamente los requisitos exigidos por la Ley. Tenía una reconocida y destacada experiencia en Contabilidad y práctica bancaria ejercida en institutos nacionales, con estudios de ciencias económicas, administración y
contaduría cursados en Alemania, Bélgica y Francia, con dominio fluido de varios idiomas; entre
ellos el inglés, italiano, alemán y francés. Había nacido en la población de Guiria, Estado Sucre,
el 14 de noviembre de 1890, hijo de don Enrique Gastor Permuy y doña María Matilde Tinoco de
20. Permuy. Casado en Caracas, en la década de los años treinta, con doña Laura Isava de Permuy; y padre legítimo de Laura Permuy Isava de Aveledo.
De inmediato comienza su desempeño y en la Gaceta Oficial Nº 20109 del jueves 15 de
febrero de 1940, la Superintendencia de Bancos aparece por primera vez destacando en el
“Sumario de la Gaceta” la reseña de sus actuaciones. Precisamente, la resolución firmada por el
Superintendente Ernesto G. Permuy en esa misma fecha: “En conformidad con lo dispuesto en
el artículo 37 de la Ley de Bancos, se nombra Fiscales Auxiliares de Bancos a los ciudadanos
Juan Antonio Antoni, Gonzalo Pecchio y Héctor Pons, quienes actuaban en los mismos destinos” (por cuanto antes pertenecieron al personal de la Fiscalía General de Bancos). Los nombrados deberán prestar a entera satisfacción del Contralor General de la Nación, la fianza fijada
por el Ejecutivo Federal, por la cantidad de quince mil bolívares (Bs. 15.000,oo), cada uno de
ellos. Por otra resolución que aparece publicada en la Gaceta Oficial del viernes 16 de febrero
de 1940, se nombra al ciudadano Hilario Itriago Pérez como Oficial de la Superintendencia de
Bancos, éste funcionario cinco meses después (el 15 de julio) será ascendido al cargo de Fiscal
Auxiliar que figuraba antes con residencia en Maracaibo.
El señor Héctor Pons fue nombrado como Fiscal Auxiliar residente en Maracaibo y trabajó
hasta el día 15 de julio, cuando fue eliminado ese cargo. También se desempeñó como Oficial el
ciudadano Asdrúbal Brigé, desde el 15 de julio hasta el 15 de septiembre por haber renunciado
al cargo, y para reemplazarlo, en esa última fecha, como Oficial fue nombrado el señor Pedro
José Romberg. Es de hacer notar que el señor Juan Antonio Antoni, desde el 26 de octubre de
1940, fue designado Delegado Suplente del Ejecutivo Federal en la Comisión de Control de Importaciones (la cual había sido creada por Decreto fechado el día anterior).
Desde el momento en que se crea la Superintendencia de Bancos, le tocará al señor Ernesto Permuy, como primer titular en el cargo, el manejo de la organización y estructura de dicha institución y dirigir su funcionamiento. A ello ayuda la reconocida capacidad, mística, competencia y experiencia del personal en las tareas que desempeñaba la Fiscalía General de Bancos
(conformada por un Fiscal General y demás Fiscales auxiliares), que había sido creada en julio
de 1936 de acuerdo a lo dispuesto en el artículo 42 de la Ley de Bancos5/.
El detalle de las principales actuaciones de la Superintendencia de Bancos durante su
primer año, bajo la dirección del señor Ernesto Permuy Tinoco, será remitido oficialmente al Ministro de Hacienda con fecha 7 de abril de 1941, firmando como responsable el ciudadano Pedro Felipe Rojas, quien ejercía el cargo de Superintendente desde el 28 de enero de dicho año.
En dicho Informe6/ con todos sus anexos se evidencia el cumplimiento fiel y cuidadoso de lo estipulado en la Ley y la práctica acostumbrada.
Entre las funciones inherentes al cargo de Superintendente de Bancos se contaba asistir
semanalmente a las reuniones del Directorio del Banco Central de Venezuela, fundamentado en
el mandato legal (numeral 3 del artículo 40 de la Ley de Bancos promulgada en 1940) que lo autorizaba a “asistir a las reuniones de las Juntas Directivas y Administrativas y a las Asambleas
de los Bancos o hacerse representar en ellas por un funcionario de su dependencia. En esas
reuniones el Superintendente o sus representantes, tendrá derecho a voz pero no a voto”. También presenciar y participar en algunas otras actividades del Banco Central7/.
El Superintendente de Bancos era integrante del Consejo Bancario Nacional (otra de las
innovaciones introducidas por la Ley de Bancos y su reunión constitutiva, previa convocatoria
21. del ciudadano Superintendente de Bancos, se llevó a cabo el 14 de marzo de 1940) y le corresponderá desempeñar un papel trascendental. Dicho Consejo, tal como lo establece el artículo 50
de la Ley, se reunirá cada vez que lo convoque su Presidente y, por lo menos, una vez al mes;
además, cuando el Presidente del Banco Central, el Superintendente de Bancos, o dos de sus
miembros así lo soliciten. Es de notar que, en los siguientes meses del año 1940, no fue necesario que el Superintendente solicitara, de por si, la reunión de dicho Consejo; pero participará
activamente en sus deliberaciones.
Nuevamente volverá el señor Ernesto G. Permuy Tinoco a ser designado para el cargo de
Superintendente de Bancos. Al inicio del año 1942 y como consecuencia de sucesivas reelecciones, se mantendrá desempeñando esa posición hasta el 23 de octubre de 1945, cuando es sustituido por el doctor Martín Matos Arreaza quien estará ejerciendo el cargo durante un mes, por
cuanto el 23 de noviembre de dicho año toma posesión el doctor Luís Cárdenas C., como titular
de la Superintendencia de Bancos.
Para los primeros años de la década de mil novecientos sesenta, el señor Ernesto G. Permuy Tinoco prestará sus servicios al Banco Central de Venezuela. Precisamente se desempeña
como Asesor en la Oficina de Control de Cambios, a partir de marzo de 1961. En ese tiempo y
en años posteriores, muchas veces participamos en sus amenas e ilustradoras conversaciones
sobre temas de teorías y políticas monetarias, enfrentando los argumentos que sustentaba el
señor Permuy en convencida defensa del patrón oro. Es indiscutible que sus conocimientos teóricos y experiencia van a ser bien aprovechados para la exitosa gestión y resultados favorables
de la política de control cambiario puesta en ejecución desde noviembre de 1960 hasta marzo
de 1964.
Al resbalarse y caer dentro de su propio hogar, se originaron fracturas en sus piernas que
aceleraron el deterioro de su estado general de salud y a la edad de noventa y tres años, de estado civil viudo, fallece en Caracas el día viernes 16 de marzo de 1984 y sus restos reposan en
el Cementerio del Este.
ACTIVIDADES EN EL PRIMER AÑO DE LA SUPERINTENDENCIA.Durante su primer año de actividades el personal de la Superintendencia de Bancos estaba conformado, en su mayor parte, por ex-funcionarios de la extinguida Fiscalía General de Bancos, el presupuesto asignado era más reducido y, además, ocupaba el local que antes correspondía a dicha Fiscalía en el edificio del Ministerio de Fomento. A pesar de esas y otras limitaciones, desarrollará exitosamente un trabajo muy significativo.
Tal como se da cuenta en el Informe correspondiente al año 1940, la insuficiencia del personal pudo comprobarse al empezar el Banco Central sus operaciones y requerir, de acuerdo a
la Ley, la presencia continua de Fiscales de Bancos para el traspaso del oro que respaldaba la
emisión de billetes de los bancos, así como para la emisión de sus propios billetes, operaciones
éstas para las cuales fue preciso habilitar especialmente varios Comisionados Especiales del
Ministerio de Hacienda.
Según lo señalado en la Ley, las inspecciones a los bancos deberían efectuarse, por lo
menos, una vez cada seis (6) meses. Esa previsión no se cumplirá y se seguirá la costumbre
practicada por la Fiscalía General de Bancos en años anteriores8/, pero es que para lograr una
22. inspección en regla sería necesario que la Sección de Control de Inspección pudiera obrar a fondo en todos o varios Departamentos de un Banco simultáneamente. Ello en las actuales circunstancias era imposible por la escasez de recursos disponibles que presentaba la Superintendencia.
Las visitas de inspección se limitaron a un total de seis (6) durante el primer año del funcionamiento de la Superintendencia, practicadas a las instituciones y fechas que se indican a
continuación: Banco de Londres & Sur América Ltd., el 22 de abril; Banco Alemán Antioqueño, el
31 de mayo; Banco Holandés Unido, el 31 de julio; Banco Industrial de Venezuela, el 18 de septiembre; Banco Caracas, el 2 de noviembre; y el Banco Mercantil y Agrícola, el 1 de diciembre
de 1940.
Para el momento en que inicia sus funciones la Superintendencia de Bancos, era realmente considerable el número de firmas mercantiles que estaban autorizadas a recibir
“depósitos bancarios”. Precisamente, en los artículos 15 al 19 de la Ley de Bancos de 1926 se
contenían las normativas requeridas a los establecimientos que, sin ser bancos, reciban habitualmente dinero en efectivo, pagaderos a la orden de quien los entrega o de tercera persona
que no sea deudora, con o sin intereses, conservando el receptor la facultad de disponer de las
cantidades recibidas. La Ley de Bancos de 1940 cambia esa situación y le corresponderá a la
Superintendencia de Bancos atender grandes y significativas tareas derivadas de la supresión
de tales autorizaciones.
Según el artículo 70 (de la Ley de Bancos de 1940), quedarán suspendidas todas las referidas autorizaciones concedidas por el Ejecutivo Federal y las firmas mercantiles no podrán
recibir nuevos depósitos de dinero. Dichas firmas9/ estarán obligadas a enviar a la Superintendencia de Bancos la relación de tales depósitos (en los treinta días siguientes a la publicación de
la Ley), especificando: nombre y domicilio del depositante, monto del depósito, plazo, tipo de interés y otras condiciones que rijan para cada depósito; y los demás datos que exija la Superintendencia de Bancos. Por otra parte, dentro de los primeros ocho días de cada mes, deben informar el movimiento de los mismos depósitos en el mes anterior, y hasta su definitiva cancelación.
Otra tarea específica de la Superintendencia de Bancos se refería a las Casas de Cambio. Eran establecimientos con funciones y campo de actuación reconocida legalmente desde
tiempos ya remotos10/. Durante el primer año de existencia, la Superintendencia de Bancos autorizó para funcionar como Casa de Cambios, a las firmas de Juan Dager; Remigio Elías; P. Prosperi & Cía.; y Domingo Abreu, hijo.
Se puede decir con toda propiedad que al momento de iniciarse el segundo año y estrenarse en su cargo un nuevo Superintendente de Bancos, no se registrará ningún cambio, en
cuanto al número de las oficinas bancarias que funcionaban en nuestro país; sin embargo los
indicadores económicos y monetarios tienen una evolución significativa, por cuanto hasta ese
momento eran pocos los efectos negativos originados por la guerra que, en los años siguientes,
involucrará a la mayor parte de la comunidad mundial.
23. NOTAS
1/ Promulgada por el Presidente, General Eleazar López Contreras, el 24 de enero de 1940, refrendada por los doctores Francisco J. Parra y Manuel R. Egaña, Ministros de Hacienda y de Fomento, respectivamente, y publicada en
la Gaceta Oficial Nº 20096 del miércoles 31 de enero de 1940.
2/ El capital de los bancos privados era el siguiente: Banco de Venezuela, Bs. 24,0 millones; Banco de Maracaibo,
Bs. 2,5 millones; Banco Caracas, Bs. 6,0 millones; Banco Comercial de Maracaibo, Bs. 2,0 millones; Royal Bank of
Canada, Bs. 1,5 millones; Nacional City Bank of New York, Bs. 2,0 millones; Banco Venezolano de Crédito, Bs. 6,0
millones; Banco Mercantil y Agrícola, Bs. 8,0 millones; Banco Holandés Unido, Bs. 1,5 millones; London & South
América Ltd., Bs. 1,0 millones; y Banco Alemán Antioqueño, Bs. 1,0 millones.
3/ Publicada en la Gaceta Oficial Nº 20107 correspondiente al martes 13 de febrero de 1940.
4/ Nombrado mediante Resolución firmada por el Ministro de Hacienda, el 25 de enero y publicada en la Gaceta
Oficial Nº 20400 correspondiente al día martes 28 de enero de 1941.
5/ Sancionada por el Congreso Nacional el 14 de julio de 1936, promulgada el 20 de ese mes por el Presidente de
los Estados Unidos de Venezuela, General Eleazar López Contreras y refrendada por los ciudadanos Alberto Adriani y Néstor Luís Pérez, ministros de los despachos de Hacienda y de Fomento, respectivamente.
6/ Publicado enteramente en el Boletín Informativo del Ministerio de Hacienda, Año 3, Nº 33, Abril de 1941.
7/ Por ejemplo, el “Acta de la primera emisión de billetes efectuada el día 10 de diciembre de 1940, comienza diciendo textualmente: “Hoy diez de diciembre, se reunieron en el edificio del Banco Central de Venezuela las personas que a continuación se expresan: J. M. Herrera Mendoza, Presidente del Banco; Dr. Ernesto G. Permuy, Superintendente de Bancos; Dr. Pedro M. Castillo, Delegado de la Superintendencia; Dr. A. Machado Hernández; Dr. Pedro I. Aguerrevere; Dr. Ángel Biaggini; Andrés Velutini, Miguel Ron, y Carlos Enrique Reverón; los seis últimos
miembros del Directorio del Instituto; Xavier Lope Bello, Primer Vicepresidente, y Alfonso Lander R., Cajero Principal, con el objeto de hacer una emisión de billetes, de acuerdo con lo dispuesto por la Junta Directiva en su reunión
del día 5 del presente mes…”
8/ Durante el año 1938 se realizaron inspecciones en los bancos: Caracas, Venezolano de Crédito, Mercantil y Agrícola, Industrial de Venezuela, Nacional City Bank, Royal of Canada, Holandés Unido, y London & South América.
En el año 1939, solamente a dos bancos: Venezuela, en febrero, y Mercantil y Agrícola, en junio.
9/ Al momento de entrar en vigencia la Ley de Bancos de enero de 1940, firmas mercantiles autorizadas para recibir
depósitos bancarios: Blohm y Cía., Santiago Sosa y Cía., Juan Gómez e hijos, Seguros La Previsora, Juan París,
Brewer Moller y Cía., Rioka y Cía., Steinvorth y Cía., Rafael Sansón, Juan Baduy y Cía., Laurel y Benacerraf, Delgado y Cía., Juan Manuel Díaz y Cía., Julio Añez y Cía., Van Dissel Rode y Cía., Bel Beckman y Cía., Calderón e
hijos, Caja Popular de San Cristóbal, Elías Burguera y Cía. Firmas o establecimientos mercantiles que estuvieron
autorizados, además de los señalados anteriormente, son los siguientes: Santana Hermanos y Cía., Felipe Toledo y
Cía., Bocardo y Cía., Taurel Hermanos, Hermanos Benacerraf, M. A. Belloso y Hermano, Rafael Zubillaga y Cía.,
Curazao Trading Comp., Boulton y Cía., Elías Haddad y Hermano, Montemayor y Cía., H. L. Boulton y Cía., Kolster
y Cía., Benarroch Hnos., Bazar Americano C.A., A. Dubuc y Cía., José Faraque, L. Pérez Díaz, Villasmil Hermanos,
F. Eraso.
10/ Es de hace notar que en la Ley de Bancos de 1918 se otorgaba privilegios a las Casas de Cambio que operaban establecidas con licencias del Ejecutivo Federal. La autorización para funcionar como Agencia de Cambio era
otorgada por el Ministerio de Fomento, según lo previsto en el artículo 25 de dicha Ley, y estaban obligadas a enviar trimestralmente a ese Despacho una relación de su movimiento operativo y existencia de billetes extranjeros.
24. Página 24
Volumen 1 Nº 6
¿Q UÉ PODEMOS LEER?
El relevo del capitalismo rentístico, hacia un nuevo balance del poder, de Asdrúbal Baptista, es un libro que combina cualidades poco comunes en obras de esta naturaleza. Por
una parte, es una obra rigurosa que recoge el pensamiento del autor desde el comienzo
de sus investigaciones, hacia 1978, acerca de la cuestión de la renta del petróleo y al
desarrollo económico de Venezuela, y que fueron plasmados en su obra Teoría Económica el capital rentístico. Pero además, y esto es principalmente lo inusual, su lectura
tiene el sentido pleno de vida de un drama teatral: lo que aquí se pone en “escena” es el
acontecer y la proyección del destino del país.
El carácter de esas investigaciones, por razones del método que las determina, obligó al
autor a mantenerse dentro de los estrictos términos impuestos por la práctica del capitalismo rentístico, cuyo colapso se erigió como el gran tema a dilucidar. Pero quedó una
interrogante en el aire, fruto de la comprensión de dicho colapso, y que debía abordarse:
¿Qué habrá de seguirse de esta compleja situación histórica que vive el país?
El tema de este libro, por lo tanto, no puede ser otro que el relevo del tiempo de Vene-
25. zuela al que domina la renta del petróleo propiedad del Estado. Tiempo excepcional por demás
y que se prolonga ya por muchas Décadas desde los inicios del siglo XX.
El relevo del capitalismo es un asunto de poder. Por ello resulta inseparable de un nuevo balance de poder, del cual podría depender íntegramente del destino de Venezuela.
Las teorías, en economía y otras ciencias, no nacen por generación espontánea. Surgen en un
momento determinado, para reflexionar sobre un conjunto de temas específicos que requieren
atención. Este libro pretende presentar las teorías económicas en acción, afectando a grupos
sociales específicos, que reaccionan de acuerdo a la manera en que estas atañen a sus preocupaciones e intereses.
Se estudia el pensamiento económico en la primera mitad del siglo XX, ya que en ese período
hubo en Venezuela una eclosión de escritos sobre temas económicos que no tienen parangón
posible en épocas anteriores.
Hubo motivos para ello: la transformación de un país agrícola en petrolero, el progreso fulgurante de los medios de comunicación, la desaparición de los caudillismos y las revueltas, la unificación de los mercados por el incremento de las vías de comunicación, la constitución del Banco
Central de Venezuela, la fundación de la primera facultad de Economía, la aparición de las primeras confederaciones de trabajadores y empresarios.
Al escribir esta obra se ha tenido como meta llegar a un público múltiple y heterogéneo. La exposición no está destinada a un grupúsculo de iniciados. Más bien pretende alcanzar a personas
con diversas pericias y especialidades, interesadas en el tema económico y en su impacto sobre
la vida diaria de la población.