El río Martín se forma con la confluencia de cuatro ríos y desemboca en el río Ebro. A pesar de su alto nacimiento, no es especialmente caudaloso debido a su escasa pluviometría. Su curso discurre en dirección noreste hasta unirse al Ebro, atravesando materiales terciarios y depósitos aluviales. Presenta un régimen irregular y ha sido aprovechado para la pesca, ingenios hidráulicos y regadíos, aunque también ha habido disputas por el dominio de sus aguas.