La gentamicina es un antibiótico del grupo de los amino glucósidos que se utiliza para tratar infecciones graves causadas por bacterias sensibles a este medicamento, como infecciones en el tracto gastrointestinal, la piel, los huesos, la sangre, el oído, el tracto urinario o genital. Se administra por vía intramuscular o intravenosa en dosis que varían según la edad, el peso y la gravedad de la infección, y requiere precauciones especiales debido a su potencial toxicidad para los riñones y el oí
1. Gentamicina
¿Qué es?
Es un antibiótico que pertenece al grupo de los amino glucósidos. Se utiliza para el
tratamiento de infecciones graves provocadas por bacterias sensibles a este antibiótico.
¿Para qué se utiliza?
Tratamiento de infecciones provocadas por bacterias sensibles a este antibiótico
localizadas en el tracto gastrointestinal, la piel, los huesos, la sangre, el oído, el
tracto urinario o genital, quemaduras graves o las meninges.
Tratamiento en combinación con antibióticos tipo penicilina de los procesos de
fiebre en pacientes que han recibido tratamiento con quimioterapia, las infecciones
del corazón y las infecciones pulmonares.
Dosis usual intramuscular o intravenosa en adultos:
En infecciones graves: 1 mg por kg de peso cada 8 o bien una dosis única de 3 mg
por kg de peso al día. Si fueran muy graves se pude llegar a administrar 5 mg por
kg de peso al día repartido en diferentes administraciones.
En infecciones urinarias o infecciones moderadas: 1 mg por kg de peso cada 12h.
En infecciones respiratorias en pacientes con fibrosis: 8 a 10 mg por kg de peso al
día repartido en diferentes administraciones.
Dosis usual intramuscular o intravenosa en niños:
2-2,5 mg por kg de peso administrados cada 8 horas.
Dosis usual intramuscular o intravenosa en niños prematuros o recién nacidos:
2,5 mg por kg de peso administrados cada 12 o 24 horas.
Estos cálculos de dosis pueden ser diferentes en pacientes obesos o en aquellos con
quemaduras importantes.
¿Qué precauciones deben tenerse?
Este medicamento debe administrarse con especial precaución en pacientes con
sordera, vértigo o zumbido en los oídos, debido a que la gentamicina puede
producir toxicidad en los oídos.
La gentamicina debe administrarse con especial precaución en pacientes con
enfermedad de Parkinson o miastenia gravis, debido a que la gentamicina puede
empeorar la debilidad muscular.
En pacientes con enfermedad del riñón puede ser necesario modificar la dosis o el
intervalo de administración de la gentamicina.
Para que el tratamiento con gentamicina sea eficaz, debe administrarse el
tratamiento completo (de 7 a 10 días) aunque se haya producido una mejoría de
los síntomas.
2. Debido a que la gentamicina es un antibiótico con poca diferencia entre las
concentraciones eficaces y las tóxicas, se recomienda medir sus concentraciones
en sangre para asegurar que cada paciente recibe una dosis eficaz y no tóxica.
El tratamiento con gentamicina debe suspenderse inmediatamente si aparece
alguno de los siguientes síntomas: pérdida de audición, presencia de sangre en la
orina, dificultad para respirar, aumento o disminución en el volumen de orina,
debilidad muscular o sed.
La gentamicina debe administrarse con precaución en niños prematuros o recién
nacidos, ya que la incidencia de efectos adversos es mayor en este grupo de
pacientes debido a la inmadurez de su riñón.
Este medicamento debe administrarse con precaución en pacientes ancianos, ya
que presentan mayor riesgo de padecer toxicidad en el riñón o en el oído.
Estructura Quimica
Fuente: Clinica Universidad de Navarra.