El acero inoxidable es importante en las plantas de energía debido a su capacidad de resistir altas temperaturas y condiciones corrosivas, así como su excelente soldabilidad y durabilidad. Se utiliza comúnmente en supercalentadores, recipientes de almacenamiento, intercambiadores de calor, tuberías, tubos de presión y estructuras de contención. Gracias a sus propiedades, el acero inoxidable permite que las plantas de energía funcionen de manera segura y eficiente.