El documento describe los principios que rigen la actividad administrativa pública como la legalidad, jerarquía, coordinación, centralización, descentralización y adscripción. Explica que la administración pública debe organizarse y operar de acuerdo con la constitución y leyes, y que los órganos administrativos están jerarquizados con órganos superiores e inferiores. También cubre la diferencia entre desconcentración y descentralización, señalando que la primera implica trasladar una oficina pero mantener la misma responsabilidad